México D.F. Viernes 26 de diciembre de 2003
México pierde a un dramaturgo universal,
considera Rascón Banda
Convertir su casa en museo será el mejor homenaje
para Argüelles
Impulsará la Sogem el proyecto para cumplir con
la última voluntad del escritor
Recibirá un reconocimiento póstumo, el
próximo enero, en el Palacio de Bellas Artes
CARLOS PAUL
El mejor homenaje que se puede hacer a Hugo Argüelles,
además de divulgar y poner en escena sus obras, es convertir su
casa en museo, proyecto que será impulsado por la Sociedad General
de Escritores de México (Sogem), ya que esta fue su última
voluntad, expresa en entrevista Víctor Hugo Rascón Banda,
presidente de esa institución.
Rascón Banda, quien aún se encuentra delicado
de salud, vía telefónica destacó que con el fallecimiento
de Argüelles, México pierde a un dramaturgo
universal.
''El mejor homenaje va a ser un proyecto que no pudimos
concretar hace dos años, que es el de convertir su casa en museo.
''El sitio que habitó es un mundo fantástico,
de pesadilla, llena de obras de arte y artesanías, de cientos de
fotografías de todas las épocas, de programas de mano y carteles,
de libretos y discos, y sobre todo de pinturas. No hay pared que se pueda
ver, porque todas las pinturas, muchas invaluables, están colgadas
ahí.
''El me pidió que Sogem gestionará este
museo con el Gobierno del Distrito Federal y con la delegación Cuauhtémoc.
''Esto se hizo cuando Enrique Semo llegó a la Secretaría
de Cultura. El funcionario no lo vio mal y nos pidió un avalúo
y un inventario de la casa. El inventario ya se tiene. Y bueno, esa fue
su última voluntad y eso será el gran homenaje.
''Una de las condiciones que el escritor puso es que no
fuera sólo museo, sino que por las tardes hubiera, en dos de los
salones, talleres de dramaturgia. Y todo eso es lo que intentaremos concretar
el próximo año, para lo cual quizá se tenga que fundar
también un patronato. Va a ser, esperamos, un museo vivo."
Descubridor del humor negro
Con el fallecimiento de Argüelles, abundó
Rascón Banda, ''México pierde a un gran dramaturgo, descubridor
del humor negro, un género tan difícil que no se practica
en otros países y que en el nuestro todos los discípulos
que tuvo durante más de 40 años, no han podido continuar
por esa línea.
''Tuve la fortuna de formar parte de su taller, junto
con Sabina Berman, Tomás Urtusástegui, Jesús González
Dávila, Leonor Azcárate y Susana Robles, entre muchos otros.
''Sus clases eran muy didácticas, donde el maestro
con voz tonante disertaba, y al día siguiente teníamos que
repetir la lección.
El nos acercó al análisis de los clásicos
griegos e isabelinos, pero sobre todo a Henrik Ibsen, Anton Chéjov,
Eugene O'Neil, Tennessee Williams y Arthur Miller. Y era hasta después
que leíamos nuestros propios textos.
''Era un maestro muy generoso y solidario con sus amigos,
pero implacable con sus enemigos. Su carácter y temperamento eran
de un ser soberbio y vanidoso, al grado que era temido por productores
y directores que intentaran cambiar una coma de sus obras.
''Junto con Rodolfo Usigli y Sergio Magaña, es
de los tres últimos que no permitieron que los directores usaran
como pretexto sus textos, pues eso provocaba que se despidiera al director
de escena o se suspendiera el montaje.
''De ahí que en los recientes años no hubiera
montajes de sus obras que tuvieran cierta relevancia (con excepción
de Las pirañas aman en cuaresma, dirigida por Abraham Oceransky
y escenificada en el Centro Nacional de las Artes, de la que Argüelles
permitió ciertas modificaciones).
''Sus obras -añade Rascón Banda- son únicas
en lengua española, porque sus temas eran la disección del
tejido enfermo de la sociedad y la familia, del poder y de la Iglesia,
llegando a límites perturbadores, como en El ritual de la salamandra
o Los gallos salvajes, sólo por mencionar dos.
''Como otros grandes creadores, era un árbol gigantesco
de un bosque, del que los pequeños arbolitos a su sombra (sus alumnos)
tienen que saber separarse a tiempo, porque si no se convierten en imitadores
del maestro o en caricaturas. Muchos de sus alumnos quisieron emular el
humor negro de Argüelles, inclusive hoy existen algunos que lo intentan
y les dicen argüellitos porque no logran su grandeza.
''Aquel grupo al que pertenecí creo que nos supimos
separar a tiempo, aunque se enojó mucho, pero luego nos perdonó.''
Tributo en el Foro Cultural Coyoacanense
''Argüelles -prosigue Rascón Banda- fue fundador
de la Sogem y consejero de la misma durante muchos años. Fue el
que me apoyó de una manera decisiva para ocupar la presidencia de
esa sociedad autoral.
''Antes de su fallecimiento trabajaba también en
la escuela de escritores de Televisa, donde estaba escribiendo una telenovela
que, tengo entendido, terminó."
Por otra parte, Edgar Ceballos, director de Escenología,
editorial que ha publicado la obra completa de Argüelles en 10 volúmenes,
más otros tres titulados Hugo Argüelles. Estilo y dramaturgia,
comentó que ''en enero rendiremos el homenaje que ya teníamos
planeado desde hace algunos meses, junto con el Consejo Nacional para la
Cultura y las Artes".
El Palacio de Bellas Artes será el recinto en el
que se efectuará ese reconocimiento. En ese contexto, se presentará
el libro Hugo Argüelles. El teatro de la identidad, de Rosario
Alonso.
Ayer, familiares y amigos de Argüelles le rindieron
homenaje en el Foro Cultural Coyoacanense que lleva su nombre. Parte de
sus cenizas serán depositadas en un panteón del DF y otra
será esparcida en el mar de su entrañable Veracruz.
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