La tecnología ofrece mejores imágenes y sonido, y muy bajos costos

Prevén auge del cine digital en 2004

REUTERS

Londres, 25 de diciembre. Agarren sus palomitas de maíz, cinéfilos. Prepárense para presenciar una de las mejores secuencias de películas en años: el cine digital.

"La imagen digital es más brillante, más aguda, los colores son más claros y la imagen más estable", sostiene Patrick von Sychowski, analista de Screen Digest, firma británica de investigación de medios.

Después de años de mucha publicidad en Hollywood, 2004 podría ser realmente el año decisivo para el cine digital.

Un aumento reciente en inversiones de cadenas de cines y compañías de tecnología significa que la cantidad de proyectores digitales en los cines se duplicará con creces, a más de 400 en los próximos 12 meses, según los reportes de Screen Digest.

Como siempre, cada vez que colisionan el arte y la tecnología, emergen las complicaciones.

Los costos de instalación para los cines son altos y los grandes estudios son lentos en producir en abundancia éxitos digitalizados hasta que se resuelvan los estándares de tecnología y las medidas contra la piratería.

Pero los operadores de cine, ansiosos de exhibir sus nuevos proyectores digitales al público, no están esperando por Hollywood. Una serie de cadenas europeas han comenzado a mostrar conciertos de rock digitalizados, documentales y presentaciones de cineastas independientes.

"La nueva tecnología, como la vemos, da a los cineastas locales la oportunidad de exhibirse ante una audiencia más grande. Esos filmes, que no tienen posibilidades bajo el modelo de distribución de 35 milímetros, tendrán una nueva oportunidad", dijo Steve Perrin, subjefe de distribución y exhibición del Consejo de Cine del Reino Unido.

Dicho consejo ha comprometido unos 20 millones de libras (39 millones de dólares) para pagar el desarrollo de 250 pantallas digitales en Gran Bretaña para el año 2005.

Exitos en demanda

Desde mediados de la década de los 90, los campeones de la cinematografía digital como George Lucas y Steven Soderbergh la han aclamado como un triunfo sobre el filme de celuloide imperante desde el siglo XIX.

Mediante archivos digitalizados de imagen, la tecnología ofrece un medio mejor de perfeccionar los efectos especiales y una calidad de sonido pregrabado que no se deteriorará con el tiempo.

Un filme digital puede ser enviado a los teatros vía satélite, por discos ópticos o redes de fibra óptica, eliminando potencialmente los exasperantes retrasos de meses que deben enfrentar los cinéfilos fuera de Estados Unidos por las producciones de Hollywood.

Y los subtítulos pueden alternarse minutos antes de que comience la película.
En los cines, un filme digital puede almacenarse en un servidor de computadora conectado a un proyector digital, Este proyector está equipado con un chip informático avanzado que limpia la imagen, capaz de mostrar 35 billones de variaciones de colores.

Desde que los hermanos Lumière y D.W. Griffith promovieron el medio hace más de 100 años, los cineastas han tenido que vivir con la realidad de rayas y cabellos que estropean algunas imágenes, y los siseos y ruidos que distorcionan el sonido.

La cinematografía digital promete remover esos dolores de cabeza. Lo que se conseguirá es un sonido de ambiente digital e imágenes precisas. No sorprende que India, uno de los mayores mercados de producción de películas, se haya embarcado en los programas de inversión en cine digital más ambiciosos.

También se están registrando nuevas inversiones en China, Gran Bretaña y Suecia, lo que hace que probablemente Europa y Asia superen a Estados Unidos -el país pionero en el cine digital- como las nuevas capitales mundiales.

Rescribiendo el guión de Hollywood

Peter Wester, gerente de proyectos de la cadena sueca de cines Folkets Hus och Parker, sostiene que un cine puede descargar una versión digital de la película en el disco duro de una computadora y proyectarla mientras haya público.

Puede costar miles de dólares a los cines el tener un éxito de Hollywood cerca de la fecha o el día del estreno. Un operador de cines, por consiguiente, regularmente tiene pocas opciones sino mostrar la película tantas veces como sea posible antes de regresarla al distribuidor.

Una versión digital, como puede reproducirse, embarcarse y almacenarse fácilmente cuesta menos de 20 dólares por copia, según expertos del sector.

También permite a los operadores de cine tener libre manejo de su programa de proyección.

Y aunque los equipos y la instalación de los proyectores digitales y servidores cuestan ahora unos 125 mil dólares, los costos están bajando, ya que se espera que el lanzamiento ampliado reduzca a la mitad su costo.

Sin embargo, el gran obstáculo es Hollywood.

Walt Disney Co., por conducto de su asociación con Pixar Animation Studios Inc., y Warner Bros., son los únicos estudios que producen filme digital.

Bucando a Nemo, de Disney-Pixar, y El último samurai, de Warner Bros, fueron dos de un puñado de estrenos digitales este año.