Producción de Epigmenio Ibarra y Carlos Payán, ya ha sido vendida a 22 países

Desde hoy, Ladrón de corazones por canal 52 de MVS, historia de amor, narcotráfico y corrupción

ARTURO CRUZ BARCENAS

Hoy comenzará a transmitirse la telenovela Ladrón de corazones, por canal 52 de MVS, producción de Argos Comunicación y Telemundo, luego de tener éxito entre el llamado público latino de Miami, Chicago y Los Angeles, Estados Unidos. Ha gustado porque incluye escenas de alto riesgo, persecuciones, choques de automóviles, balaceras, explosiones y efectos especiales.

Con un costo de 10 millones de dólares, la telenovela fue grabada en la ciudad de México, Morelos, Miami, Nueva York, Chicago, Los Angeles y San Diego. De acuerdo con la línea de las producciones de Argos; aborda temas sensibles y relevantes sobre narcotráfico y corrupción en los altos círculos de poder. Cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia.

La dirección de escena y de cámaras está a cargo de Walter Doehner, quien dirigió y produjo las telenovelas Nada personal, Demasiado corazón y El amor de mi vida, así como de la película La habitación azul. Pretende que quien siga la historia se identifique, como ocurrió durante la transmisión de Nada personal.

La distribuidora de la telenovela, la agencia Tepuy Internacional, ya la ha vendido en 22 países. Donde se ha transmitido, Ladrón de corazones ha roto récords y sus más altos ratings los ha logrado en los cierres.

Peligro y venganza

En concreto, es la historia de un amor atormentado y marcado por el peligro entre Verónica Vega, una destacada y bella policía, y Gustavo Velasco, un hombre que para vengar la muerte de su padre se ve forzado a cometer actos delictivos. En 1993 el crimen organizado tiende sus redes sobre un barrio popular de la ciudad de México. Domingo Velasco, una especie de Robin Hood mexicano, que se dedica a robar a criminales poderosos para ayudar a su gente, es asesinado por un integrante de uno de los delincuentes más peligrosos del país.

Con su asesinato viene también su desprestigio, pues todas las pruebas lo señalan como narcotraficante, que la mafia liquidó en un ajuste de cuentas. Gustavo, hijo de Domingo y con tan sólo 15 años de edad, es enviado por Celia, su madre, a Estados Unidos para proteger su vida de las vendettas criminales. Diez años después recibe una llamada de Ferreira, su padrino y el verdadero cómplice de los narcotraficantes, quien le dice que no puede morir sin antes confesarle la verdad y que las cosas no son como le han hecho creer.

Al saber que su padre es inocente, Gustavo decide quedarse en México para encontrar al asesino. Para ello empleará todos los medios posibles, incluso poner en práctica las habilidades de ladrón que aprendió de niño. Ignora que el destino lo pondrá frente a Verónica Vega, con quien vivirá una atormentada historia de amor que lo obligará a replantearse todos los esquemas que hasta ese momento funcionaban para su vida.

Verónica es una policía muy profesional y guapa. Trabaja para la Fuerza Omega, grupo ultra secreto encargado de investigar y perseguir a los criminales más peligrosos del país. Se ha dedicado en cuerpo y alma a su carrera, y ha emprendido una lucha incansable contra el narcotráfico, al que considera la peor y la más despreciable de las organizaciones criminales.

Muy lejos estaba de saber que en realidad Antonio Vega, su padre, al que tanto admira y por quien ha jurado cumplir sus objetivos, tiene dos caras: una, la que ella conoce, un hombre dulce y padre responsable, y la otra, una faceta sombría, torcida, peligrosa. Antonio Vega, ex policía de expedientes intachables y varias veces condecorado por el gobierno es en realidad uno de los principales capos de una poderosa organización criminal. Es el enemigo a quien ella juró destruir.

Así seguirá la historia, producción de Epigmenio Ibarra y Carlos Payán; productoras asociadas, Mónica Skorlich y Ana Celia Urquidi; ejecutivo a cargo de la producción de Telemundo, Carlos Kenny; productora ejecutiva Sachiko Uzeta.

La historia original es de Leonardo Bechini, con adaptación de Epigmenio Ibarra y Ricardo García. El director de fotografía es Esteban de Llaca y la directora de escenografía Cristina Martínez de Velasco.

El elenco está de lux: Manolo Cardona interpreta a Gustavo Velasco; Lorena Rojas, a Verónica Vega; Humberto Zurita, a Antonio Vega; Fabiola Campomanes, a Inés; Roberto Mateos, a Esteban, y Claudia Lobo, a Celia Velasco, entre otros.