Enojo y desilusión

Cancelan en Bellas Artes la última función de 2 óperas

ANGEL VARGAS

Del desconcierto a la desilusión y al enojo, así fue la reacción mayoritaria entre el público que asistió anteanoche al Palacio de Bellas Artes a la tercera y última función de las óperas El prisionero y Orestes parte, luego de que ésta se suspendió de manera imprevista.

En un ambiente caótico, en el que las personas se arremolinaban en la entrada principal del recinto, nadie daba la cara para explicar las causas de ese hecho. Todo era confusión y rumores.

Lo más que se hizo fue repartir un volante en el que el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), así como el Palacio de Bellas Artes, lamentaban ''que por causas de fuerza mayor esta función se haya cancelado", y se comprometían a rembolsar el importe de las entradas.

Finalmente, el INBA emitió un comunicado, sin ningún logotipo oficial, para explicar que la cancelación se debió ''a que algunos trabajadores del foro, agremiados a la delegación sindical 198, se negaron a prestar sus servicios como medida de presión para obtener prestaciones que la normatividad del instituto no permite otorgar".

De manera extraoficial se conoció que entre esas demandas laborales se incluyen la exigencia de mil regalos por el Día del Niño y otros tantos por el Día de la Madre".