Condena Madonna al cristiano renacido

Madonna comparó a George W. Bush con el dictador Saddam Hussein. "Creo que ambos -afirmó- se están comportando de manera irresponsable y, por tanto, en ese respecto son parecidos". Durante una gira internacional de conciertos -por el momento ofrece seis en el Madison Square Garden de Nueva York-, no ocultó su oposición al régimen actual de su país. Su gira de la obra Reinvención tiene un mensaje antiguerra y el nuevo video que acompaña a su canción Vida americana es claramente opuesto a la guerra. La escena final muestra a un tipo caracterizando a Bush besando el cachete de Hussein.

En su primer concierto, la noche del miércoles, declaró ante su público de miles en la enorme arena: "les insto a cada uno de ustedes para ir a ver" la nueva película de Michael Moore, Fahrenheit 11/9, que se estrenara el próximo 25 de junio. Dirigiéndose a Moore, que estaba entre el público, añadió: "el mundo necesita de más gente como tú".

Las declaraciones de Madonna siempre son no-ticia, y si no se registran en las primeras planas aparecen en la sección de espectáculos, de chismes sobre las estrellas, o en los programas de televisión sobre el mundo de Hollywood; o sea, en los espacios mediáticos más vistos y leídos por este pueblo.

Por tanto, que preste su voz a la oposición contra Bush tiene impacto mucho más amplio que casi cualquier político. Peor cuando la Material girl au-tora de famosas canciones (Como una virgen, Holiday, Vogue) tiene toda una generación de personas -millones- con derecho al voto que la escucha.

En entrevista con PA News, de Inglaterra, con la cual habló de su percepción de Bush, dijo que ha cambiado en estos años de una rebelde provocadora a alguien que desea ofrecer algo más. "Creía que estaba liberando a la humanidad, pero, como dije, en realidad no estaba ofreciendo alternativa". Agrego que "opto por verme como persona que ahora está despierta e intentando formar parte del orden, no del caos, del mundo".

La cantante de 45 años de edad comenzó su nueva gira de unos 120 conciertos; Reuters calcula que su público en total será de unas 920 mil personas. Todos escucharán su mensaje antiguerra. Así Madonna se suma a figuras del mundo artístico popular que cada vez alzan más su voz contra los actuales ocupantes de la Casa Blanca. El enemigo más poderoso del presidente George W. Bush podría no ser su contrincante en las elecciones, sino la cultura.