La deuda del IPAB, de un billón 200 mil millones de pesos, reconoce Beauregard

''Cínica'', la justificación del acuerdo con la banca: PRD y PT

Equivale a 18% del PIB, afirma el secretario ejecutivo del IPAB El convenio no requerirá recursos adicionales del presupuesto federal, pero sí más dinero para pagar intereses: Gil Díaz

ENRIQUE MENDEZ

En el contexto de una comparecencia en la que diputados de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT) calificaron de ''cínica'' la justificación dada por el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, al acuerdo alcanzado con la banca para el canje de los pagarés-Fobaproa por otros títulos, el secretario ejecutivo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), Mario Beauregard, reveló que la deuda del rescate bancario asciende ya a casi un billón 200 mil millones de pesos que representan 18 por ciento del producto interno bruto (PIB).

El calificativo derivó de un juego de palabras con el que ambos funcionarios intentaron justificar el arreglo con los bancos. La operación, afirmaron, no requerirá recursos adicionales del presupuesto federal, pero sí más dinero para el pago de intereses, mientras la parte nominal del pasivo será financiada con la emisión de bonos de deuda.

Pero lo que ni el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, ni el secretario ejecutivo del IPAB, Mario Beauregard Alvarez, se atrevieron a confesar frente a los constantes cuestionamientos de la oposición en sentido de que el canje se convertirá en nueva deuda pública, lo admitió el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, el panista Gustavo Enrique Madero, en una entrevista:

''Los pagarés vencerán en septiembre de 2005 (y con el canje) se le da una solución para cerrar este capítulo tan costoso y traumático. Es la misma gata, sin revolcar. Eso es un juego de palabras, pero el gobierno tiene que hacer frente a la deuda, porque si no habría una situación de crisis extraordinaria. ¡No hay vuelta de hoja, tenemos que apechugar!''

Los contribuyentes siempre pagan los platos rotos

Ya en ese tono, Francisco Gil atajó que en cualquier país, cuando es necesario un rescate bancario, ''es en general el contribuyente el que paga los platos rotos'', y defendió que ''al llevar a cabo este canje de deuda conjuramos un gran riesgo, porque de no haberlo llevado a cabo -aunque físicamente no se haya dado sino hasta que concluyan las auditorías- se hubieran generado disturbios, perturbaciones y problemas en el mercado financiero''.

La respuesta del secretario molestó a los diputados del PRD. El secretario de la comisión especial, Alfonso Ramírez Cuéllar, advirtió que su bancada no admitirá que el contrato entre los bancos y Hacienda se convierta en deuda pública, ni aprobarán recursos adicionales para el pago de intereses.

Durante la comparecencia de Francisco Gil Díaz y Mario Beauregard Alvarez ante la comisión especial de investigación del IPAB, perredistas y petistas cuestionaron que la emisión de bonos para refinanciar la deuda adquirida por el rescate bancario constituye ''una tercera deuda'', que asciende a 489 mil millones de pesos y se agrega al total del rescate que suma más de un billón 200 mil millones de pesos.

Más pagos a bancos, plantea PRI

Por si fuera poco, el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis Rico Samaniego, le propuso a Gil Díaz que el gobierno federal compre acciones a los bancos, en una mini operación de ''estatización bancaria'', lo que a su vez implicaría un nuevo pago a los dueños de las instituciones financieras, sugerencia que fue bien recibida por el secretario. ''Es muy interesante, la vamos a estudiar'', dijo.

El titular de Hacienda asumió una posición indiferente ante las críticas, y cargó el peso de las respuestas a Beauregard. Ante esa actitud, los legisladores lo calificaron de cínico, soberbio, cómplice, mentiroso, falso y complaciente. Desde el comienzo de la comparecencia el diputado del PT y flamante vocero de la fracción parlamentaria, Oscar González Yáñez, le soltó:

''Aquí está justificando el fraude. Nos parece una vergüenza que si los banqueros hacen las cosas que hacen, lo hagan con la complicidad de Hacienda, porque a fin de cuentas sabemos que los intereses del secretario no están con los del pueblo de México y sí con los banqueros. No está aquí el secretario de Hacienda de los mexicanos, aquí está el representante de los intereses de los señores del dinero. No es culpa del PAN ni del Presidente, y es la primera vez que exonero a (Vicente) Fox de algo muy malo. Creo que aquí está el responsable''. Gil Díaz se mantuvo indolente.

Cuando el senador panista Fauzi Hamdan le preguntó al secretario ejecutivo del IPAB el monto exacto de los activos del instituto, Beauregard incluyó como ''activos'' del IPAB los 116 mil millones de pesos que, según él y Gil Díaz, se recuperaron con la negociación entre el gobierno federal y los bancos, y que por lo tanto la Federación no tendrá que desembolsar a los banqueros.

Tanto Gil como Beauregard afirmaron que aun cuando ya se había auditado a los bancos, a partir de la investigación que realizó el canadiense Michael Mackey, la administración federal ''va más allá'' y llevará a cabo las auditorías de gestión, objeto y legalidad (GEL), y sólo una vez concluidas se comenzará el proceso de canje, si es que no hay irregularidades.

Aseguraron: ''La formalización del programa no implicará solicitar recursos adicionales al Congreso de la Unión. Para hacer frente a los vencimientos de estos nuevos pagarés, el IPAB continuará la estrategia de refinanciamiento de pasivos que ha aplicado desde su fundación. Esto es, solicitando recursos del presupuesto únicamente para hacer frente al componente real de su deuda, mientras la parte nominal del pasivo se refinanciará a través de la colocación de Bonos de Protección al Ahorro Bancario''.

Los argumentos en sentido de que el canje aún no se ha hecho, generaron dudas sobre el acuerdo al que llegaron Hacienda y el IPAB con los bancos. Si no se ha hecho la operación, entonces ¿qué hicieron?, cuestionó Ramírez Cuéllar, y la respuesta de Beauregard fue: ''cambiamos una deuda por otra''.

Gil Díaz defendió el rescate y adujo que entre 2000 y 2004 los bancos perdieron 9 mil 600 millones de pesos porque la tasa de los pagarés Fobaproa es de Cetes menos 1.35 por ciento.

Al final de la comparecencia los funcionarios no convencieron a la oposición.

La banca en México vive de los impuestos: López Obrador

El jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, declinó opinar sobre los cambios realizados por las instituciones bancarias para transparentar sus operaciones; en su conferencia de prensa dijo que las desconoce. De lo que sí tiene conocimiento, explicó, es de que la banca en México es la paraestatal más onerosa pues vive de los impuestos de todos los mexicanos, ''no hay institución de gobierno, paraestatal que reciba tantos rendimientos del presupuesto como la banca'', indicó.