.
Primera y Contraportada
Editorial
Opinión
El Correo Ilustrado
Política
Economía
Mundo
Estados
Capital
Sociedad y Justicia
Cultura
Espectáculos
Deportes
Fotografía
Cartones
CineGuía
Suplementos
Perfiles
La Jornada en tu PALM
La Jornada sin Fronteras
La Jornada de Oriente
La Jornada Morelos
La Jornada Michoacán
Librería
Correo electrónico
Búsquedas
Suscripciones
Obituario

C U L T U R A
..

México D.F. Lunes 30 de agosto de 2004

Ofreció una conferencia sobre el tema en la Universidad Autónoma de Chiapas

La memoria colectiva forma parte de la literatura testimonial: Poniatowska

Las letras que salen a la calle responden a la necesidad de manifestar lo oculto y documentarlo; los pudientes tienen a sus amanuenses, indica la autora de Tinísima

JAVIER MOLINA

Tuxtla Gutierrez, Chis. La literatura testimonial es la que sale de la calle, las voces que escuchamos, las que hacemos entre todos apenas amanece, afirmó Elena Poniatowska en la conferencia que sustentó en la Biblioteca Central de la Universidad Autónoma de Chiapas. Comenzó platicando de sus anteriores viajes a la entidad. ''Desde luego vine en 1994, respondiendo a un llamado del subcomandante Marcos, mi hija permaneció un mes ayudando a hacer la biblioteca". Antes, en un homenaje a Rosario Castellanos; en otra ocasión con Susana Alexander, para hablar de las mujeres y la literatura.

-¿Me quieres?

-Sí.

-También yo. Así de fácil es el diálogo -dijo.

''Yo sí''

Recordó a los novios en la Plaza de las Tres Culturas, el 2 de octubre de 1968, cuando ella y él estaban empapados por la lluvia, y también por las veces que habían caído en las fosas mojadas. El moría pero para ella estaba más vivo que nunca, su cuerpo caliente junto a la muchacha que dijo: ahora sí te quiero más que nunca, total, si vamos a morir, te quiero para siempre, para lo que quieras. Yo sí.

Hizo la comparación literaria -y viva- con el monólogo final de Molly Bloom, del Ulises, de James Joyce. "Yo sí". ¿Si dijeran que esto sucedió real, oralmente, perdería un ápice su valor literario?

También recordó a los granaderos que reprimían a los estudiantes diciéndoles ''Aquí está su diágolo, porque ni diálogo sabían decir''. Y también la carencia de diálogo del gobierno actual, que tuvo la osadía de afirmar que resolvería el problema indígena en 15 minutos.

Asimismo el testimonio del doctor Cuauhtémoc Abarca, durante los sismos de septiembre de 1985, ante el edificio Nuevo León desplomado. El rescate de los sobrevivientes, las palabras que les decían: golpeen por favor diez veces, "detectaban el menor sonido". Luego cinco veces, luego tres, y otra vez diez; repitieron lo mismo en cada entrada del edificio. "Sabemos que están ahí, no se desesperen, estamos trabajando y los vamos a sacar". Rescataron a 16 personas, entre niños y ancianos, hombres y mujeres, "podían registrar la comunicación casi con el más allá". Y es que -dijo- en situaciones extremas la comunicación también se improvisa, porque se inventa otra forma nueva de ser, la de la sobrevivencia.

Estos momentos reflejan una situación límite en la vida del país, sostuvo, y rememoró a la persona que reclamaba: No es justo que le toque siempre a la gente más fregada, a la gente más jodida, no es justo que se caigan los edificios de los hospitales, los edificios del gobierno.

"La memoria colectiva forma parte de la literatura testimonial, y de ella nos alimentamos, y es historia y es literatura, como cuando alguien dice: ¿te acuerdas, te acuerdas de cuando mataron a Emiliano Zapata?".

También afirmó que a través de la ventana de América Latina la multitud está siempre presente, también la miseria y otra vez la muchedumbre. México podría parecer una barca a la deriva, "sin embargo, el pueblo mexicano tiene una capacidad de lucha poco común". A la semana de los sismos -contó- en la avenida Insurgentes se hizo una carrera de relevos, en la que participaban hombres de extracción popular, ''corrían hacia alguna meta inventada. Unos días antes habían dado muestras de una solidaridad conmovedora. 'Mira a nuestro pueblo -dijo una señora-. Apenas hace unos días salieron de los escombros y ahora salieron a correr el maratón'".

El movimiento estudiantil terminó en la masacre de la noche de Tlatelolco, sin embargo fue ganando fuerza, removió la conciencia, fue el movimiento que logró que el movimiento cardenista ganara las elecciones de 1988, las mismas que robó Carlos Salinas de Gortari. El movimiento estudiantil, ''la conciencia enloquecida de un movimiento de pureza'', como decía José Revueltas.

No hay literatura testimonial de la riqueza -deslindó-, porque los magnates, la clase gobernante, procrean a sus amanuenses. En resumen, la literatura que sale a la calle -concluyó- responde a una necesidad de manifestar lo oculto, y documentarlo.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año
La Jornada
en tu palm

Av. Cuauhtémoc 1236 Col. Santa Cruz Atoyac
delegación Benito Juárez México D.F. C.P. 03310
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Coordinación de Publicidad
Tels: (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00 Exts: 4900 y 4104

Email
Coordinación de Sistemas
Teléfonos (55) 91 83 03 11 y 91 83 03 77

Email

  © Derechos Reservados 2003 DEMOS, Desarrollo de Medios, S.A. de C.V.
Todos los Derechos Reservados. Derechos de Autor 04-2003-08131804000-203.
Prohibida la reproducción total o parcial del contenido sin autorización expresa del titular.
El título y contenido se encuentran protegidos por la legislación de la materia en la República Mexicana.