Sólo envía a la muerte a los reclutas con falsas promesas de mejorar, afirma

No cumple ejército de EU: padre de joven caído en Irak

RUBEN VILLALPANDO CORRESPONSAL

Ciudad Juarez, Chih., 14 de septiembre. Rubén Estrella, avecindado en El Paso, Texas, y padre del soldado Rubén Estrella Soto -nacido en Ciudad Juárez y naturalizado estadunidense-, quien en marzo de 2003 murió durante una emboscada en Irak, pidió a los jóvenes reclutas que no crean en los ofrecimientos que les hace el ejército de Estados Unidos, pues "solamente los envía a la muerte con falsas promesas de mejorar".

Estrella Soto fue uno de los nueve elementos de la unidad de mantenimiento 507, con sede en Fort Bliss -guarnición militar ubicada en El Paso-, que murieron durante un enfrentamiento con tropas iraquíes el 23 de marzo de 2003, a las afueras de Nasiriya. Nació en Ciudad Juárez y emigró con su familia a los cinco años de edad, convirtiéndose en ciudadano estadunidense a los 18. Su padre mostró a los medios una carta del ejército de Estados Unidos con los datos de su hijo, que erróneamente indican que nació en Puerto Rico.

Luego de participar en la inauguración de un parque con el nombre de su hijo, en la comunidad Montana Vista, Rubén Estrella afirmó que al momento los deudos no han recibido el seguro de vida del joven, ni la pensión correspondiente. Destacó que hasta agosto anterior, el gobierno estadunidense enviaba a la familia un "apoyo" de cinco dólares mensuales, monto que no se había remitido en lo que iba de septiembre.

Estrella denunció que su vástago, de 19 años de edad, "fue engañado por oficiales del ejército, que lo hicieron firmar unos documentos reduciendo el monto de su seguro de vida antes de marcharse al Golfo Pérsico".

Agregó que su hijo "creía que al firmar esos papeles le iban a pagar 30 mil dólares por (realizar) servicios de mantenimiento en Irak, y no que le habían reducido el seguro de vida que tienen los militares" del vecino país.

De acuerdo con Estrella, el seguro para los militares que mueren en batalla es de 250 mil dólares, monto que a la fecha no se ha entregado a la familia, y tampoco la pensión por el deceso.

El padre del soldado destacó que cuando éste partió a Irak "no era para participar en combate", ya que pertenecía a una unidad de mantenimiento de vehículos. Añadió que las autoridades castrenses no le han explicado cómo pereció Rubén, ni la razón por la cual participó en acciones bélicas.

Comentó que nunca antes se había arrepentido de haber llevado a su familia a Estados Unidos, pero "tiene que pasarte algo malo para que te des cuenta de cómo está este país". Dijo que los jóvenes migrantes no deben enrolarse en el ejército estadunidense, "ya que no les cumplen las promesas y solamente los quieren llevar a la muerte".