México D.F. Sábado 6 de noviembre de 2004
Más de 10 mil pacientes de 84 países
han recibido tratamiento en la isla caribeña
En Cuba, eficaz programa para combatir la ceguera nocturna
La nación cuenta con un hospital internacional
con tecnología de punta y 13 clínicas
AISSA G. GARCIA ESPECIAL PARA LA JORNADA
Los cubanos han desarrollado un avanzado programa que
permite no sólo detener el progreso de la retinosis pigmentaria
-enfermedad hereditaria y degenerativa capaz de provocar la ceguera total-,
sino también hacer un diagnóstico precoz de esta afección
mediante exámenes sistemáticos en grupos de riesgo.
Si
bien la ceguera noctura, como también se le conoce, no tiene cura
hasta hoy, 91 por ciento de los pacientes que han recibido el tratamiento
cubano -más de 10 mil de 84 países, además de los
de la propia isla- muestran mejorías en la visión central
y mantienen la estabilidad de su campo visual.
Tales resultados se deben a la aplicación, desde
1989, del Programa Nacional de Atención a Pacientes con Retinosis
Pigmentaria, que abarca desde el diagnóstico precoz, el estudio
epidemiológico, el tratamiento y las investigaciones hasta la rehabilitación.
Dicho programa tiene una base poblacional e interviene en los diferentes
niveles de atención médica (primario y secundario) de la
red preventivo-asistencial del Sistema Nacional de Salud de Cuba, con cobertura
para toda la población y servicios gratuitos.
En la isla se realizan estudios a todas las personas con
riesgo de padecer esa dolencia, lo cual ha permitido detectar lesiones
en el fondo de ojo y alteraciones electrorretinográficas que se
corresponden con las características de la retinosis pigmentaria,
en edades tan tempranas como los tres o cinco años, cuando el mal
es aún asintomático y se puede tratar mejor.
Lo anterior, porque el tiempo de evolución de la
enfermedad es muy importante y el pronóstico resulta muy favorable
en personas que hayan recibido un diagnóstico precoz o en quienes
los síntomas y signos hayan sido detectados en un periodo no mayor
de cinco años.
Estudios como el electrorretinograma -que permite registrar
la actividad eléctrica de la retina y, por tanto, conocer la funcionabilidad
de ésta- son realizados en familias con algún afectado por
la retinosis pigmentaria.
Estudios más allá del paciente
De acuerdo con Alberto Barrientos, jefe del departamento
de electrofisiología del Hospital Internacional Camilo Cienfuegos
-nosocomio con 13 clínicas en toda la isla-, dicha prueba cumple
las normas establecidas por la Sociedad Internacional para el Estudio de
la Electrofisiología Clínica de la Visión y se realiza
en otras partes del mundo, pero sólo a nivel de institutos especializados
en momentos en que el paciente presenta síntomas, mientras en Cuba
se lleva a cabo en el área de atención primaria de la población
y abarca a las familias en riesgo.
Eso explica, detalla el especialista, por qué el
número de pacientes con retinosis pigmentaria en Cuba es más
alto que en otros países. Mientras en el mundo la tasa es de uno
por cada 5 mil habitantes, en la isla es de 4.1 por cada 10 mil. "La diferencia
se debe a que nuestro estudio es más profundo y abarcador, pues
va mas allá del paciente e incluye a toda la familia, permitiendo
tratar los casos desde temprana edad, cuando los síntomas aún
no han aparecido", dijo.
A su vez, el director del Hospital Internacional Oftalmológico
Camilo Cienfuegos, Obel García, afirmó que Cuba cuenta con
amplia experiencia en la atención a pacientes con retinosis pigmentaria
y enfermedades asociadas a ella, así como en el diagnóstico
diferencial de todas las afecciones oculares, entre ellas la mala visión
nocturna, la degeneración macular, la deficiencia de vitamina A,
la retinopatía diabética y el glaucoma.
Esas enfermedades son de difícil diagnóstico
y diferenciación, sobre todo cuando están en la primera etapa,
pero el hecho de contar con equipamientos de punta y especialistas de primer
nivel garantiza un diagnóstico certero.
Unico en el mundo y altamente eficaz, el método
fue creado por Orfilio Peláez Molina, quien fue una eminencia de
la medicina cubana y se dedicó durante más de 40 años,
junto con un equipo de científicos, a hacer estudios en el campo
de la oftalmología y sobre todo de la retinosis pigmentaria, que
constituye la primera causa de ceguera entre las enfermedades distróficas
de la retina.
Descripción
¿Qué es la retinosis pigmentaria? Es una
enfermedad ocular, de predominio hereditario, crónica y no contagiosa,
con características clínicas, genéticas y evolutivas
muy heterogéneas. En su forma típica y atípica afecta
a los conos y bastones (células fotorreceptoras de la retina que
permiten percibir los colores y la luz) y la función epitelial del
pigmento, entre otras estructuras del ojo. Dichas anomalías determinan
que la visión periférica y nocturna se pierdan progresivamente,
debido a la disfunción de los fotorreceptores. En su forma asociada
puede dañar otros órganos, sistemas y sentidos del organismo.
Los pacientes con este mal sufren de mala visión
en sitios poco iluminados, demoran en adaptarse a la oscuridad y tropiezan
con objetos y personas por pérdidas de su campo visual periférico,
lo cual les hace asistir al médico. Estos síntomas son más
frecuentes en el sexo masculino y comienzan de modo insidioso, por lo general
en la adolescencia, alrededor de los 15 años, aunque varía
según la forma de herencia. La enfermedad evoluciona lentamente
hasta llevar en un tiempo variable a la pérdida total de la visión.
Tratamiento
De acuerdo con los especialistas del Hospital Internacional
Camilo Cienfuegos, la terapéutica cubana es específica para
cada individuo, teniendo en consideración el estadio clínico
de la enfermedad, la edad, los años de evolución y que no
estén presentes otras afecciones oftalmológicas, anomalías
congénitas o patologías sistémicas asociadas.
El tratamiento consiste en una técnica quirúrgica
asociada a la aplicación de ozono, electroestimulación, vitaminoterapia
y terapia con oligoelementos. Cuando se atienden por primera ocasión,
los afectados requieren de unos 21 días en el centro, tras los cuales
los resultados son sorprendentes, pues pacientes con pocas esperanzas de
prolongar su visión, en estos momentos llevan más de 10 años
de estabilidad.
En el Hospital Internacional Camilo Cienfuegos, que cuenta
con los recursos humanos y tecnológicos necesarios para mejorar
la calidad de vida de todas las personas afectadas por esta enfermedad,
también se brindan servicios especializados para el diagnóstico
de enfermedades oculares y los más novedosos tratamientos para dolencias
de la mácula, cataratas, glaucoma y ametropías asociadas.
Se puede contactar a los especialistas por medio de Obel García
en los teléfonos 5682-1313 y 5543-2695.
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