Wilfrido Castro, acusado del secuestro de un campesino guerrerense en 1972

Niegan a ex jefe judicial prisión domiciliaria

ALFREDO MENDEZ

Un juez federal negó en definitiva a Wilfrido Castro Contreras, ex comandante de la Policía Judicial de Guerrero -quien enfrenta proceso penal por su presunta responsabilidad en la privación ilegal de la libertad del campesino Bernardo Reyes Félix- la posibilidad de que sea trasladado del penal de Acapulco a su casa particular para quedar sujeto a una "prisión preventiva domiciliaria", informó Marcos Castillejos, defensor del inculpado

El juez segundo de distrito, con sede en Acapulco, Francisco Esteban González Chávez, determinó ayer que el reo está acusado de un delito grave que no permite el derecho a la libertad provisional, y aunque el artículo 55 del Código Penal Federal establece la posibilidad de que un indiciado mayor de 70 años enfrente un proceso penal "arraigado" en su domicilio, el juzgador consideró que la salud mental de Castro está en buenas condiciones, por lo que debe continuar recluido.

El abogado informó que prepara una demanda de amparo para combatir el auto de formal prisión que se le dictó a su cliente el pasado 4 de noviembre; también solicitará que mediante la protección de la justicia federal "se respete el derecho que tiene mi defendido, por su edad, a permanecer confinado en su casa".

Castro Contreras fue detenido el pasado 30 de octubre por elementos de la Agencia Federal de Investigación, debido a que la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado solicitó la aprehensión por su presunta responsabilidad en el secuestro de Bernardo Reyes Félix, quien fue detenido el 24 de septiembre de 1972 y desde entonces se desconoce su paradero.

El abogado del ex policía aseguró en entrevista con La Jornada que las imputaciones contra su cliente se basan prácticamente en declaraciones "encontradas y poco claras", que más bien "hacen pensar que se trata de testigos de cargo que interpusieron denuncias por venganza".