En el planeta se utilizan alrededor de 8 mil: Instituto Nacional de Ecología
Se desconoce impacto en la salud de más de 7 mil sustancias químicas que se usan
ANGELICA ENCISO L.
A pesar de que en el mundo se utilizan alrededor de 8 mil sustancias químicas peligrosas, sobre poco menos de mil se han realizado estudios sistemáticos para conocer su riesgo para la salud humana y los ecosistemas, señala el Instituto Nacional de Ecología (INE).
En el análisis Las sustancias peligrosas y el medio ambiente, el organismo desconcentrado de la Secretaría de Medio Ambiente puntualiza que en total se han identificado alrededor de 12 millones de sustancias en el planeta, de las cuales alrededor de mil están en el comercio mundial.
Agrega que de aproximadamente 3 mil se producen volúmenes superiores a una tonelada al año en más de un país, lo que representa alrededor de 90 por ciento del total que se comercia.
Refiere que a pesar de que se han regulado alrededor de 8 mil, con base en alguna propiedad que las hace peligrosas, en la mayoría no se conocen sus efectos secundarios para el medio ambiente y la salud.
Precisa que la Organización de Naciones Unidas tiene una lista de 600 sustancias que han sido prohibidas, severamente restringidas, no autorizadas por los gobiernos o retiradas del comercio. Además, de éstas "sólo 15 son objeto de control internacional de exportaciones e importaciones mediante el procedimiento de consentimiento fundamentado".
Agrega que entre los procesos que más influyen en el destino y transporte de los elementos químicos en el ambiente y que pueden incrementar o disminuir la posibilidad de exposición a ellas e incidir en riesgos, están la penetración de las partículas al suelo, así como su degradación química o la acción de los rayos solares. De esa forma, la capacidad tóxica de las sustancias puede incrementarse o eliminarse.
Entre las sustancias que deben eliminarse del mundo están los contaminantes orgánicos persistentes (Cops). México tiene dos años para establecer un plan nacional para su erradicación. Entre esos elementos están el DDT y los bifenilos policlorados.