Usted está aquí: lunes 21 de marzo de 2005 Política Rechaza Norberto Rivera hablar sobre el desafuero

Niega que haya hecho pronunciamiento ante perredistas

Rechaza Norberto Rivera hablar sobre el desafuero

Afirma que la Iglesia no entrará al juego de los partidos

ANGELICA ENCISO L.

El cardenal Norberto Rivera Carrera rehusó pronunciarse en favor o en contra del desafuero del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, ya que "la Iglesia no puede entrar a ningún juego de partidos, tiene que estar al servicio de todos los ciudadanos".

Entrevistado al final de la homilía de Domingo de Ramos, rechazó que en la reunión que sostuvo hace unos días con legisladoras del Partido de la Revolución Democrática de la Asamblea Legislativa haya hecho algún pronunciamiento sobre el tema. "Ellas iban a eso, pero yo les dije con toda claridad que ni sabía si iba a haber desafuero. Es más, hasta el momento no lo sé. No sé qué vayan a decidir la sección instructora o la Cámara de Diputados."

-¿Está en favor o en contra del desafuero? -se le preguntó.

-La Iglesia no puede sustituir a los legisladores, a la sección instructora o al juez, quien finalmente dirá si hay o no culpabilidad. La Iglesia haría mal en entrar a esos campos. Que si se diera el desafuero, ¿cuál sería la postura de la Iglesia? Pues ya veremos, dijo un ciego y nunca vio.

El arzobispo primado de México precisó que la Iglesia no puede entrar a "ningún juego de partidos. Tiene que estar al servicio de todos los ciudadanos, no puede partidizarse. El día que haga eso no sólo violará la ley canónica y la del país, sino perderá su naturaleza, porque la Iglesia católica es para todos, no puede estar defendiendo a un grupo o atacando a otro".

Antes, Rivera Carrera, durante la ceremonia religiosa, aseveró que "el pueblo escogido alimentó por siglos la idea de que el mesías tenía que ser un representante divino, glorioso, no sólo en lo religioso, sino también en lo político y social. El mesianismo de Jesús es totalmente ajeno a esta concepción, ya que su horizonte no es el triunfo personal ni la conquista política y social".

El cardenal bendijo las palmas de centenas de personas que llenaron la Catedral Metropolitana, adonde también asistió el ex gobernador de Veracruz, Miguel Alemán Velasco, quien se reunió en privado con el prelado.

 
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