Usted está aquí: domingo 17 de abril de 2005 Deportes Preocupan futuros partidos Brasil-Argentina

Todo fue un escenario armado, dicen jugadores de Quilmes

Preocupan futuros partidos Brasil-Argentina

AFP

Buenos Aires, 16 de abril. Tras el retorno de Leandro Desábato junto con el equipo de Quilmes, luego de pasar 37 horas de arresto por insultos racistas en Brasil contra el jugador Grafite, la prensa bonaerense reclamó una "autocrítica" a los argentinos.

En tanto, los brasileños externaron su preocupación por los futuros choques con equipos argentinos, sobre todo los que sostendrán ambas selecciones en junio en Buenos Aires, en el marco de la eliminatoria rumbo a Alemania 2006. El seleccionador Carlos Alberto Parreira reclamó "adoptar providencias" para evitar incidentes.

Los jugadores de Quilmes arribaron convencidos de que todo fue un escenario "armado", así lo expresó el internacional Matías Almeyda: "Fue una aberración lo que se vivió", y señaló que "todos estamos absolutamente en contra del racismo, pero cada vez se hace más claro que esta historia estuvo orquestada y se aprovecharon de Quilmes, porque es un club chico".

El defensa Desábato, quien rechazó hacer declaraciones a la prensa, fue liberado el mediodía del viernes después de que su abogado pagó la fianza fijada por el juez Marcos Alexandre Correa, en unos 3 mil 880 dólares, y tras pasar dos noches en una prisión de Sao Paulo. Desábato habría dicho a Grafite: "negro de mierda, métete una banana en el culo", según quedó asentado.

El diario Clarín comentó: "Tal vez sea una mala puesta en escena la que se hizo en Brasil, organizada de antemano a la espera de que caiga un candidato para que cierre todo el circo", pero a la vez citó que Quilmes "intentó dar una vuelta de campana para convertirse en víctima; otra exageración", y agregó: "Cabe alguna voz de autocrítica sobre un episodio que empobreció a todos".

El incidente provocó una fuerte controversia dentro de Brasil, incluso a nivel internacional, entre quienes sostienen que la sanción a Desábato fue justa, y los que advierten que se trató de una exageración, la cual sólo servirá para azuzar la rivalidad entre argentinos y brasileños.

El técnico del Sao Paulo, Emerson Leao no tardó en replicar a lo dicho por Diego Maradona, quien apoyó a Desábato y a Quilmes: "El cerebro de Maradona está afectado por cuestiones que nosotros ya sabemos. No podemos considerar este tipo de declaración", expresó en alusión a la dependencia de la cocaína que sufre el ídolo argentino.

 
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