Usted está aquí: martes 17 de mayo de 2005 Opinión MEXICO SA

MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Los "buenos negocios" de John McCarthy en Fonatur

Pérdidas en operaciones con hoteleros en Tulum

FONATUR, CON JOHN McCarthy a la cabeza, no deja de hacer buenos negocios, y para ello se asocia con el que en su momento fue presumido como uno de los consorcios más exitosos del país, aunque a la postre resultara el más sonado fracaso empresarial y evidenciara las estrechas "relaciones" entre el poder público y el privado, en ese inagotable esfuerzo por sangrar las arcas nacionales.

EL MAS RECIENTE negocio de McCarthy y asociados una vez más lo documenta La Jornada: "en dos operaciones con hoteleros en Tulum, el Grupo Situr y fraccionadores en Cancún -a los que vendió a 18.40 pesos el metro cuadrado-, Fonatur sufrió pérdidas por 61 millones 605 mil dólares, que al tipo de cambio de diciembre de 2003 (11.236 pesos por billete verde) representan un impacto económico de 692 millones 198 mil pesos, que fueron registrados en la cuenta Deudores diversos por venta de terrenos, determinó la Auditoría Superior de la Federación (ASF)".

COMO RESULTADO DE la revisión de la cuenta pública 2003, el órgano superior determinó que el probable quebranto se debe a que los funcionarios de Fonatur incurrieron en irregularidades en el "otorgamiento de créditos de garantías y falta de recuperación oportuna de los adeudos". En uno de los casos, la ASF solicitó la intervención de la Secretaría de la Función Pública, "pues el fondo permitió que se le entregaran acciones de un hotel en Tulum, aun cuando los funcionarios responsables de la operación sabían que Fonatur tenía participación accionaria en la empresa, además de que el edificio es inoperable en 40 por ciento".

HIJOS PREDILECTOS DEL salinato (periodo en el que conocieron la gloria), los hermanos Jorge, Guillermo y José Martínez Güitrón fueron propietarios -entre otras muchas cosas- de Situr, un consorcio que formaba parte del Grupo Sidek, de cuyo desplome -"el riesgo crediticio más grave para el Fobaproa- se hizo cargo el erario, gracias a las estrechas "relaciones" entre el poder público y el privado.

DIAS ATRAS, LA propia Auditoría Superior de la Federación denunciaba irregularidades en la liquidación (en pleno sexenio foxista) de un grupo de bancos, entre los que aparecía el Industrial, en su momento propiedad de los hermanos Martínez Guitrón. En esta ocasión, el erario también dio la cara por ellos.

POR LAS ACTAS DEL Fobaproa, divulgadas por el ahora peje de gobierno, los mexicanos supieron del "rescate del Grupo Sidek, Situr incluido: el consorcio tenía una deuda total cercana a 2 mil 200 millones de dólares. Para el Fobaproa este adeudo representó "el riesgo de crédito más importante en su política de rescate y salvamento". Con la banca nacional, los préstamos vencidos sumaban cerca de mil 255 millones de dólares.

EN OCTUBRE DE 1997, las cabezas visibles del Fobaproa se autorizaron la restructuración de los pasivos del consorcio, mediante "una liquidación ordenada de todos los activos de Sidek y subsidiarias. Los bancos recibirán acciones de Sidek... Se estima que los acreedores A recuperen 100 por ciento y los quirografarios 31 por ciento".

LA RESTRUCTURACION ORQUESTADA por el gobierno zedillista se dio así: "Simec es uno de los activos más importantes de Sidek, cuya deuda no ha sido vendida a Fobaproa. Con el fin de incrementar el valor de recuperación, se está restructurando la deuda de Simec por un total de 256 millones de dólares con plazos a 10 años, periodos de gracia que van de 2 a 12 años y tasas de interés que fluctúan de 10.5 a 11 por ciento. Sidek, Fobaproa y el Comité de Bancos están elaborando un plan de venta de activos que será realizado por la compañía, bajo la supervisión del Fobaproa a través de un comité de ventas controlado por el fondo".

EN ESE ENTONCES, EL consejo de administración de este consorcio era encabezado por Jorge, José y Guillermo Martínez Güitrón (también accionistas en, cuando menos, Siderúrgica Guadalajara, Tubos de Acero, Banco Industrial de Jalisco -intervenido gerencialmente por el gobierno federal-, Super Diesel, Anglo, Fobursa, Progres, Casa de Bolsa Probursa, Grupo Mark, Astilleros Unidos de Ensenada, Procorp, Grupo Embotelladoras Unidas y Estral. Guillermo fue el presidente del consejo consultivo de Banco Internacional en Guadalajara. José, miembro del consejo de administración del Grupo Financiero Banamex-Accival que encabeza Roberto Hernández Ramírez. Y Jorge, consejero propietario de la serie B de Bancomer y miembro del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios)

CON ELLOS PARTICIPABAN, entre otros, Juan I. Gallardo Thurlow (empresario refresquero, presidente del consejo de administración del Grupo Embotelladoras Unidas; la Inmobiliaria GEUSA, la empresa de compra-venta de acciones de sociedades Coninver, de la inmobiliaria GEU-GAM, del Grupo Azucarero Mexicano -seis ingenios en Michoacán, Jalisco, Sinaloa, Tabasco y Veracruz- y la Controladora de Negocios Azucareros; fue el representante del sector privado mexicano en las negociaciones del TLC, y accionista en Nadro -casas comerciales-, Grupo Industrial Minera México, Seguros Olmeca, Casa de Bolsa Operadora) y Eduardo Legorreta Chauvet (accionista del Grupo Embotelladoras Unidas que preside Gallardo Thurlow; ex presidente de la casa de bolsa Operadora de Bolsa; preso por fraude bursátil en febrero de 1989 e inhabilitado 10 años por las autoridades financieras y judiciales para operar en el mercado bursátil -la inhabilitación vencería en 1999-; accionista mayoritario de Videovisa).

Además, Enrique Robinson Bours Almada (Grupo Bachoco), Saturnino Suárez Fernández (accionista de Serfin, involucrado con los Gutiérrez Cortina en el rescate de los créditos del World Trade Center; ex accionista del Banco del Atlántico antes de la expropiación) y Sandra López Benavides (accionista de Bancomer, que fue el banco que encabezó el rescate de Calzado Canadá, empresa de López Benavides).

FONATUR NO PUDO seleccionar mejor socio. Pasan los años, siguen los chanchullos, aparecen siempre los mismos nombres y John McCarthy jura que no tiene otra intención como funcionario público que "hacer buenos negocios para México".

SE ENTIENDE, PUES, por qué México no sale del hoyo.

Las rebanadas del pastel:

EL PRESIDENTE VICENTE FOX ya no siente lo duro sino lo tupido por el "desliz" con tono racista.

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