Los medallistas se manifestaron por los derechos de la población afroamericana de EU
Smith y Carlos serán inmortalizados con monumento por su protesta en México 68
Con el puño en alto, guante negro y cabizbajos, serán erigidos en la Universidad de San José
San José, 28 de mayo. Las imágenes se difundieron el 16 de octubre de 1968 por el mundo entero. Con el puño en alto enfundado en un guante negro y la cabeza gacha, los atletas Tommie Smith y John Carlos se manifestaron por más derechos de la población afroamericana en Estados Unidos, en los Juegos Olímpicos de México. Casi 37 años después de aquel gesto memorable, los dos medallistas serán inmortalizados con una estatua en la Universidad Estatal de San José.
Tras su protesta muda, los dos ex velocistas gozaron de la simpatía internacional, pero en su patria se vieron enfrentados a menudo a un odio profundo por el desafío impuesto en la cereonia de entrega de medallas de la justa olímpica en la capital mexicana.
Ahora se les rinde homenaje. La Universidad de San José, donde entrenaron, les erigió un monumento. Ante familiares, amigos y miembros del equipo olímpico de 1968, ambos atletas asistieron el viernes a la colocación de la primera piedra de una estatua de siete metros de altura, que mostrará a Smith y a Carlos en la postura de protesta. Este sábado recibieron el título de doctor honoris causa de la Universidad.
En México, Smith batió el récord mundial de los 200 metros, con 19.83 segundos, con lo que ganó el oro olímpico, por delante del australiano Peter Norman y Carlos. La acción de protesta, con los símbolos del black power, elegida en EU "como el sexto acontecimiento del siglo más digno de ser mantenido en el recuerdo'', llevó a la exclusión de los dos deportistas del equipo y la expulsión de la Villa Olímpica.
Smith y Carlos sospecharon que sus vidas cambiarían para siempre por su actitud desafiante. Descalzos, para simbolizar la pobreza de su raza en territorio estadunidense, levantaron los puños en el podio de premiación, mientras escuchaban cabizbajos su himno nacional.
Los atletas tuvieron que soportar numerosas desventajas al quedarse sin trabajo, pero hace tiempo que han sido rehabilitados y homenajeados, como, por ejemplo, con la inclusión en el Hall of Fame del atletismo estadunidense.
"Sé lo que hemos representado. Seguiré este camino hasta la muerte'', dijo Smith, quien cumplirá 61 años el 5 de junio, el mismo día en que Carlos tendrá 60. "Es estupendo venir aquí sin mis zapatos deportivos. No estoy corriendo ni llevo un escudo para evitar que la gente dispare contra mí''.