Usted está aquí: jueves 23 de junio de 2005 Política Si prueban que violo la ley, rectificaré, dice Fox

Defiende su apoyo al partido que lo llevó al poder

Si prueban que violo la ley, rectificaré, dice Fox

En Moscú, rechaza hablar acerca de la alerta del EZLN

ROSA ELVIRA VARGAS Y JUAN PABLO DUCH ENVIADA Y CORRESPONSAL

Moscú, 22 de junio. Poco antes de abordar el avión para regresar a México, tras concluir su gira por Ucrania y Rusia, el presidente Vicente Fox eludió de modo tajante comentar acerca de la alerta roja decretada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). "Sobre el asunto del EZLN no tengo ningún comentario y no voy a hacer ningún comentario al respecto", afirmó.

Después de otras dos preguntas sobre el tema, en conferencia de prensa con periodistas mexicanos, la respuesta de Fox Quesada, con la tensión reflejada en el rostro, se mantuvo invariable: "Nuevamente, del EZLN no tengo comentarios".

Ante la insistencia de los reporteros, el mandatario mexicano lanzó otra frase: "No tengo comentarios. A la ciudadanía lo único que le puedo decir es que esté tranquila, que no hay nada nuevo en lo que hasta hoy se ha presentado y no hay nada oficial tampoco".

En contraste, Fox se explayó al reivindicar su "derecho democrático de defender y promover" su proyecto de gobierno, así como "sostener y apoyar la ideología y valores del partido que me llevó al poder".

Sin explicar dónde está la línea que separa sus preferencias electorales como ciudadano del uso de recursos públicos, la fuerza del poder y los tiempos del gobernante para apoyar una candidatura presidencial, Fox dijo que tiene que ser "claramente establecido" cuando se incurre en prácticas ilegales.

Quién y cuándo deberá establecer esa línea divisoria entre lo que Fox llama "madurez democrática" y el uso de la fuerza del Estado para inducir el voto, no parece tarea que figure entre sus prioridades de cara al 2006.

Manos y conciencia limpias

Como promotor de las celebraciones por el "arribo de la democracia en nuestro país el 2 de julio de 2000", aseveró que tiene "las manos y la conciencia limpias".

Además, desde su perspectiva de que existe "una distancia del cielo a la tierra" entre "asuntos como el Pemexgate, esto es, sacar dinero de las arcas del Estado para apoyar un candidato, como quedó debidamente probado y está en tribunales", y la democracia "desarrollada" que reclama para México, el Instituto Federal Electoral (IFE) y el tribunal electoral de la Federación deben garantizar comicios transparentes y equitativos.

Fox Quesada, quien no considera "ninguna injerencia de tipo doloso o ilegal" convocar a celebrar los cinco años de su triunfo en las urnas, tampoco ve contradicción alguna entre exhortar a que las elecciones sean limpias y equitativas, como hizo en fecha reciente en México, y en volcar todo su apoyo a un candidato, como anunció ayer aquí, en Moscú.

Retó: "Me gustaría escuchar que alguien sustente que está fuera de la ley lo que he dicho, que si hago lo que he dicho estaré en problemas con el IFE; no nomás que alguien diga que le preocupa o que tenemos que regresar a las prácticas del pasado, de aquellos doble moral y doble discurso, de meter las manos en las urnas y aparentar que no hubo nada".

Agregó: "Estoy abierto a que alguien me diga, de la oposición, en dónde está el Presidente violando principios éticos, violando principios morales, violando principios democráticos o violando la ley y la Constitución. Porque si hubiera algo de eso, yo encantado rectificaría".

Al inaugurar hoy un encuentro organizado por la Cámara de Comercio e Industria local, Fox dijo que esta visita a Rusia "sirvió no sólo para revisar el avance de los acuerdos que tuvimos (con el presidente Vladimir Putin) allá en México, sino ya nos planteamos nuevas metas, nuevos objetivos, nuevos retos".

Ante los empresarios reunidos en el Centro Internacional de Comercio de esta capital, Fox dejó constancia de su satisfacción: "En ambientes como éste me siento en casa, con mi gente, con la gente que emprende, con la gente que invierte, con la gente que toma riesgos, con la gente que genera empleos, con la gente que genera riqueza para un país".

Casi al final de su discurso, el jefe del Ejecutivo mexicano señaló: "Venimos de haber sido empresarios, muy probablemente volveremos a ser empresarios cuando terminemos este reto de gobierno y, por tanto, entendemos bien lo que ustedes buscan y necesitan".

Al despedirse, reconoció que Putin y él quieren "que las cosas ocurran, no sólo que las platiquemos en nuestras discusiones".

Camino al aeropuerto, Fox hizo una breve escala en el Club de Directores (de medios); ahí afirmó que esta visita a Rusia "superó todas las expectativas". Dijo a los periodistas rusos: "Las cosas van bien (en la relación bilateral). Todos estamos buscando a todos, buscando negocios, comercio e inversiones, pero en la competencia por mercados, cuando se hace como en Rusia y México, no tiene que ganar uno y perder el otro, ganan los dos".

Aseveró que "el siglo XXI será de América Latina", porque en el continente "corren tiempos de mayor integración, en aras de un desarrollo sostenido y sustentable".

 
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