María del Pilar Martínez
Hugo Pérez Cano, director de la Consultoría Jurídica de Negociaciones Comerciales Internacionales de la Secretaría de Economía y representante de México ante la OMC, señala que la disputa azucarera hará que el país negocie con EU a fondo, o bien, adopte medidas como el arancel-cuota.
P. ¿Cuál puede ser el efecto de la resolución de la OMC?
R. Hay varios escenarios posibles. El primero es que el panel de la OMC resuelva en favor de México y admita el uso del impuesto ante la negativa de EU de solucionar el conflicto en el marco del TLCAN. En ese caso seguiríamos como hasta ahora, sin una verdadera acción integral. Aunque eso sucediera, habría incentivos para regresar a la mesa de negociación y resolver la disputa del azúcar.
"El segundo escenario es un fallo en favor de EU y se tendría que eliminar el impuesto, lo que no resuelve la controversia. La respuesta de México sería adoptar medidas que permitieran mantener el equilibrio del mercado para proteger los intereses de la industria.
"El tercer escenario es que EU acepte un panel del TLCAN. Así, México habría logrado su objetivo y se replantearían las cosas. Sin embargo, México tendría que quitar el impuesto. Y la última posibilidad es que se dieran los incentivos para sentarse nuevamente a la mesa para buscar una solución negociada."
P. Si se afecta al sector azucarero, ¿qué hará el gobierno?
R. Mucho depende del escenario; lo que hemos venido diciendo es que por la resolución de la controversia no habrá una afectación directa. Como parte de la nueva estrategia llevaríamos el caso nuevamente a un panel para resolverlo por completo. En este caso se llevarán seis o nueve meses más.
P. ¿Qué opinión tiene la Secretaría de Economía?
R. El escenario menos bueno es que sigamos como hasta hora y sustituir el impuesto con otra medida. Aunque se ha conseguido cierto equilibrio, no es lo más correcto para la industria §
MPM
La Secretaría de Economía (SE) prevé cuatro escenarios del fallo; tres se inclinan por la eliminación del impuesto que desde 2002 aprobó el Congreso.
De ser favorable el dictamen para México, se entablaría una solución de controversias en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y se marcarían los derechos y obligaciones que deberán asumir ambos países antes de la desregulación definitiva en 2008. Aun así el impuesto tendría que quitarse.
En principio la demanda fue interpuesta por EU; luego de 14 meses de litigio, la situación para la industria azucarera nacional aún es complicada.
Sin embargo, legisladores e industriales esperan que el trabajo del grupo de abogados mexicanos ante la OMC "vaya por buen camino, incluso existe la posibilidad de contrademandar en caso de que el fallo no sea favorable", comentó el presidente de la Comisión Especial de la Caña de Azúcar en la Cámara de Diputados, Marco Antonio Torres Hernández.
La decisión de la OMC de aplazar hasta agosto debió haber servido para buscar salidas a la competencia del mercado nacional, ya que en abril industriales refresqueros, específicamente el grupo Femsa, lograron un amparo para utilizar fructosa nacional sin pagar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de 20 por ciento. Según los embotelladores nacionales, el precio del azúcar aumentó hasta 30 por ciento los costos de su producto, lo que los obliga a utilizar fructosa.
Rubén García Treviño, vicepresidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA), adelantó que podría presentarse una apelación hasta 2006, sobre todo porque "en caso de que México perdiera el impacto sería muy fuerte para el sector".
Si la OMC fallara en favor de EU ingresarían al país al menos 1.5 toneladas de fructosa, desplazando otro tanto de azúcar nacional.
El golpe para la industria, según la CNIAA, sería de 98 mil millones de pesos, "lo que haría inviable la recuperación de la industria", dijo García Treviño.
Para la zafra 2004-2005 se prevé un excedente de 600 mil toneladas, "las que en teoría debería aceptar EU, pero que deja fuera de su mercado". Si el fallo es favorable, "obligaríamos a los estadunidenses a la entrada del azúcar", dijo el diputado Torres Hernández; si no habría que trabajar fuerte para que junto con la cámara azucarera se determinaran los volúmenes que conviene producir para cubrir la demanda.
Si la OMC determina que el gravamen a la fructosa es "discriminatorio", los ganadores podrían ser las principales empresas productoras de fructosa en México, como Almidones Mexicanos, Aranal, CPI Ingredientes e Industrias de Maíz.
Según la Cámara del Maíz Industrializado, antes del gravamen el mercado de la fructosa se ubicaba en 550 mil toneladas, de las cuales 200 mil eran de importación. Así, casi se dejó de producir maíz amarillo y los precios se incrementaron hasta 30 por ciento en los dos últimos años.
Las secretarías de Agricultura y Economía han destacado que el precio del azúcar en México está por encima del promedio mundial. El año pasado se pagó por tonelada 631 dólares, mientras que en otros países el precio fue de 236.
Rubén García Treviño señaló que en el mercado hay un ambiente negativo por el amparo que obtuvieron los refresqueros, pues dejaron de usar unas 300 mil toneladas de azúcar.
Entre las estrategias que se plantean legisladores e industriales están reforzar los aranceles, buscar un mercado ordenado de edulcorantes, "para que ingrese fructosa a México y azúcar a EU". En los últimos años sólo han entrado 10 mil toneladas, "y eso es nada. Ese país no recibe el azúcar de kilo por kilo, que sería lo más equitativo" §