Usted está aquí: lunes 15 de agosto de 2005 Economía Casi 80 por ciento de los ingresos de Pemex van a parar al fisco: BdeM

Durante la administración foxista ha pagado impuestos por 142 mil millones de dólares

Casi 80 por ciento de los ingresos de Pemex van a parar al fisco: BdeM

Las aportaciones fiscales representan en promedio 106% del rendimiento de operación de la empresa

ISRAEL RODRIGUEZ

Sometida a un régimen fiscal que le obliga a prescindir de 61 por ciento de sus ingresos por ventas, la empresa petrolera mexicana ha aportado más de 142 mil millones de dólares a las arcas del gobierno federal durante la administración del presidente Vicente Fox, indican informes del Banco de México (BdeM).

El pago de impuestos realizado por Petróleos Mexicanos en este gobierno representan 37.2 por ciento de la recaudación tributaria entre enero de 2001 y junio de 2005. Así también los pagos fiscales de la paraestatal son equivalentes a 75 por ciento de los ingresos no tributarios obtenidos por el erario público en el mismo periodo, y fueron suficientes para cubrir casi una cuarta parte, 23 por ciento, del gasto presupuestal realizado por el gobierno federal.

Sin embargo, la carga fiscal de Pemex no se ha visto reflejada en una menor carga impositiva para los trabajadores, en especial los causantes cautivos, quienes durante la primera mitad de este año aportaron 52 por ciento de la recaudación del impuesto sobre la renta (ISR) y todavía la Secretaría de Hacienda ha propuesto que a partir del próximo año sean gravadas las prestaciones laborales.

De acuerdo con la clasificación contable del banco central, el ingreso corriente de Petróleos Mexicanos (Pemex) ascendió a 180 mil 360 millones de dólares durante esta administración. Pero de esa cantidad se han destinado 142 mil millones al pago de derechos y aprovechamientos, lo que significa que 79 por ciento de los ingresos alcanzados por la paraestatal correspondieron al pago de impuestos.

O bien, que prácticamente cuatro de cada cinco dólares generados por la paraestatal han ido a parar al fisco federal.

Entre tanto, la empresa se ha visto orillada a recurrir a la contratación de deuda para mantener sus actuales niveles de producción. El monto de la inversión programable, la cual corresponde a las asignaciones aprobadas por el Congreso de la Unión, ha sido de 8 mil 825 millones de dólares durante este gobierno. Esta cantidad es equivalente a 6 por ciento del monto destinado por Pemex al pago de sus obligaciones fiscales.

Con escasos recursos presupuestales para financiar su gasto de inversión en infraestructura, la paraestatal ha recurrido en forma ascendente a la contratación de deuda con empresas privadas para ampliar sus obras, mediante el mecanismo conocido como Proyectos con Impacto Diferido en el Registro del Gasto (Pidiregas).

Reportes contenidos en el Anuario Estadístico 2005, dado a conocer recientemente por Pemex, indican que a través de este mecanismo de deuda la paraestatal petrolera ha utilizado 36 mil 610 millones de dólares en inversiones de infraestructura, concentrados principalmente en exploración y extracción de crudo.

Pero los pasivos de Pemex registran un incremento de 121 por ciento durante la actual administración, hasta llegar a 86 mil 500 millones de dólares, según el reporte oficial de la paraestatal, y representan 96.2 por ciento del valor total de sus activos al término del primer semestre de 2005.

El incremento de las deudas de Pemex, entre colocaciones de bonos en los mercados nacional e internacional, contratación de créditos directos con la banca y a través de los Pidiregas, ha tenido un costo adicional para las finanzas de la novena empresa petrolera en el mundo.

Los registros del Banco de México señalan que entre enero de 2001 y junio de 2005 Petróleos Mexicanos pagó más de 6 mil 500 millones de dólares exclusivamente en intereses de su deuda.

Descapitalización

Durante los pasados tres sexenios, la empresa ha privilegiado la extracción de petróleo crudo por encima de otras líneas de negocios igual o más rentables que sólo la explotación del crudo, pero con una tasa de retorno más lenta, como son la refinación y la petroquímica, de las que se obtienen productos con mayor valor agregado.

El destino del gasto de inversión total de Pemex, incluidos los Pidiregas, confirma la apreciación de los especialistas en la materia. Los recursos destinados a Pemex Refinación representan menos de 5 por ciento del total del gasto en inversión de la paraestatal, y en el caso de la petroquímica esa proporción se reduce a sólo 1.3 por ciento

El director general de Pemex, Luis Ramírez Corzo, reconoció: "en los pasados cuatro años las aportaciones fiscales han representado en promedio 106 por ciento del rendimiento de operación (de la empresa). Esto ha provocado una disminución del patrimonio de 117 mil millones de pesos (10 mil 700 millones de dólares) de 2000 a 2004".

En el mensaje del director general en el informe anual 2004, dado a conocer hace unos días, Ramírez Corzo manifestó que Pemex requiere de un "cambio estructural mayor", y consideró que "los cambios en el régimen fiscal, autonomía de gestión y relaciones laborales, si bien necesarios, serían insuficientes para aprovechar al máximo el potencial petrolero del país".

 
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