Falta aprehender a 10 miembros de la organización
La banda de secuestradores Los Macizos no ha sido desarticulada
La banda de secuestradores conocida como Los Macizos aún no ha sido desarticulada en su totalidad, a pesar de que el pasado fin de semana fueron detenidos en el estado de Jalisco dos importantes líderes de esa organización delictiva, indicó Fabián Medina, enlace de la Procuraduría General de la República (PGR) con los medios de comunicación, quien agregó que la Agencia Federal de Investigación (AFI) todavía tiene pendiente la aprehensión de 10 miembros de la banda.
Agregó que la corporación policiaca realizó ayer dos cateos en casas de seguridad del grupo de plagiarios, ubicadas en Guadalajara, con el propósito de ubicar a los ahora prófugos de la justicia.
El funcionario dijo: "afirmar que Los Macizos ya no van a secuestrar sería decir mentiras, y señalar que continúan secuestrando sería hablar de algo que no conocemos".
La PGR relaciona a dicho grupo delictivo con al menos 12 plagios cometidos desde 1999 en el Distrito Federal, estado de México, Querétaro, Morelos, Puebla e Hidalgo.
Además Medina proyectó un video sobre la declaración de Daniel Díaz Barrientos, El Kimba, uno de los líderes de la banda, quien fue arrestado el pasado sábado en Jalisco.
Durante el interrogatorio que le efectuaron autoridades de la PGR, el inculpado reveló que en latas de atún y de sardinas fueron introducidas al penal de Neza-Bordo siete pistolas calibre .25 para que igual número de integrantes de Los Macizos pudieran someter a los custodios de esa institución y lograr su fuga el 9 de octubre de 2004.
"Unas latas de comida, de atún. No sé. Lo que sea. Lo que sí sé es que fueron casi puras pistolas 25 las que metieron en latas de sardina, en las que puede caber una (pistola), y las metieron un día antes de que se fugaran", narró El Kimba a la PGR.
Díaz Barrientos declaró que el 8 de octubre de 2004 su hermano Sergio Díaz Barrientos, El Checo, así como otros seis secuestradores recluidos en el penal de Neza, se encargaron de corromper a las autoridades penitenciarias para introducir las armas.
El Kimba admitió haber participado en al menos seis secuestros y que su labor consistía en negociar el rescate de las víctimas; confesó haber asesinado a una, y señaló que arrojaron el cuerpo de una empresaria que secuestraron al canal de Tecámac, estado de México.