El anteproyecto para la elección de candidato, empantanado por la crisis
El PRI, hacia mayor endeudamiento
El PRI planea recurrir a un nuevo préstamo bancario, a mecanismos de autofinanciamiento e incluso a "apretarse más el cinturón", mediante la suspensión del pago de nómina, debido a las dificultades económicas que enfrenta para efectuar la consulta abierta a la ciudadanía que definirá a su candidato presidencial, y que mantiene frenada la emisión de la convocatoria respectiva.
Ayer se informó que la Comisión Nacional de Procesos Internos, que preside Rafael Rodríguez Barrera, está "empantanada" en la elaboración del anteproyecto, pues analiza los costos de 3 escenarios posibles para que pueda consumarse la jornada de votaciones.
La primera consiste en instalar 63 mil mesas receptoras de votos en cada sección electoral del país, con costo de 200 millones de pesos; la segunda plantea colocar 22 mil mesas, una por cada tres secciones electorales, con gasto de 66 millones de pesos, y la tercera que sean sólo 6 mil 400, una por cada 10 secciones, con una erogación de 20 millones de pesos.
Esta discusión no es menor en virtud de que los estrategas de la campaña del gobernador saliente del estado de México, Arturo Montiel, consideran que mientras más casillas se instalen, sus posibilidades de ganar aumentan, ya que el caso contrario favorecería a Roberto Madrazo.
El PRI recibe cada mes 25 millones de pesos, con lo que se cubre la nómina de los trabajadores, gastos de operación y la deuda por 70 millones que contrajo hace dos meses debido a la multa de mil millones de pesos que el Instituto Federal Electoral le impuso por el Pemexgate.
No obstante, la Comisión Nacional de Procesos Internos, instalada en sesión permanente, pretende que se ubique el mayor número de mesas posible para facilitar la votación y obtener un porcentaje suficiente que legitime a quien resulte abanderado a la Presidencia de la República.
Además, la comisión dio por concluida la consulta a los representantes de los precandidatos Arturo Montiel y Roberto Madrazo, es decir, Enrique Martínez Horta y Héctor Hugo Olivares, de forma respectiva, quienes esperan que se expida la convocatoria.
Fuentes de la dirigencia del PRI informaron que resulta probable que sea el domingo 30 de octubre la elección del candidato, pues llevar la consulta abierta hasta el 6 de noviembre inhibiría la participación ciudadana, ya que mucha gente estaría de vacaciones con motivo de la celebración del Día de Muertos.
Rodríguez Barrera garantizó, sin embargo, que la convocatoria será emitida antes del 15 de septiembre. Confirmó también que ya está definida la impresión de 10 millones de boletas.
Además, ratificó que al expedirse la convocatoria, los aspirantes deberán firmar un pacto de unidad para que se conduzcan con respeto en sus presentaciones conjuntas e individuales, que se definirían durante el periodo de proselitismo, a fin de mantener la unidad partidista.
Otras versiones refieren que la convocatoria sería emitida una vez que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emita su fallo respecto a la impugnación presentada por Elba Esther Gordillo contra el relevo en la directiva del PRI, a efecto de tener la garantía de que el proceso interno será convalidado por los órganos comiciales.