Usted está aquí: domingo 9 de octubre de 2005 Opinión EJE CENTRAL

EJE CENTRAL

Cristina Pacheco

Sex¡oh!

Sex Capital, dice el anuncio que abarca la fachada del antiguo cine Olimpia en 16 de Septiembre. Con su walkie-talkie en la mano, un vigilante va de un lado al otro del edificio, listo para detectar en la mirada de los transeúntes cualquier intención que supere la lógica curiosidad por el primer centro comercial, en México y en el resto del mundo, consagrado exclusivamente al sexo.

En la planta baja, donde antes estuvo la escalinata del cine, hay aún comercios tradicionales. El lado derecho lo ocupa Bertinabear: ''Todo lo que buscabas a sólo tres, cinco y 10 pesos''. En el pequeño establecimiento de la izquierda se venden pants y camisetas infantiles. Atendido por don José Luis Ramírez y su esposa, Andrea Sánchez, el negocio está por cumplir un año.

A pesar del éxito en las ventas, sus propietarios piensan mudarse a otro local en 5 de Febrero. Don José Luis me explica las razones: "Nos sentimos incómodos desde que se estableció la plaza del sexo. Mis hijos vienen a ayudarnos con frecuencia. No me gustaría que ellos, aún pequeños, escucharan o vieran cosas inadecuadas para niños. Y conste que no soy cerrado ni puritano, pero cada cosa tiene su hora y su tiempo".

La inquietud de don José Luis rebasa los motivos familiares: ''En las grandes ciudades tiene que haber toda clase de diversiones. En ese sentido el DF no puede ser una excepción; sin embargo, me parece que esta plaza debió establecerse en otra parte, lejos del Centro Histórico. Vienen muchas familias, en especial los sábados, para hacer sus compras; pero sobre todo para que sus hijos se cultiven viendo las calles y los edificios que simbolizan nuestra cultura. Y esto no lo es".

Doña Andrea refuerza los argumentos de su esposo: "Desde que comenzaron a montar Sex Capital llegan menos familias. Lo notamos en la calle y en nuestro negocio. Los padres no se atreven a acercarse para comprar pants y camisetas, porque les desagrada entrar en un comercio que se encuentra al paso de donde hay barra libre, cine pornográfico y cosas por el estilo. Entre y verá que no miento".

XXX 3D

Nos despedimos. Avanzo por un pasillo de losetas brillantes. Las paredes a ambos lados se encuentra tapizadas de plásticos donde se especifican con grandes letras los servicios que estarán al alcance de los interesados: table-dance, condonerías, museo del sexo, teatro-bar, body-piercing, cine XXX y 3D...

Un guardia sonriente se acerca a preguntarme si traigo cámara. Su compañero, también equipado con walkie-talkie, me dice que no está permitido hacer filmaciones ni tomar fotos. Le muestro lo único que llevo: mi cuaderno y mi pluma. No ceja: ''Por favor, no siga tomando notas. Espere a que se lo autorice''.

El vigilante se aleja unos pasos y, sin dejar de observarme, habla en clave y recibe indicaciones. Suspende la comunicación y regresa a mi lado: ''Van a venir por usted''. Me siento personaje de una película de espías hasta que aparece Fernando Bravo y me conduce a la oficina en que trabajan Irasema, Lupita y Norma: el personal administrativo.

Egresado de la Universidad Iberoamericana, donde estudió ciencias de la comunicación, Fernando Bravo tiene a su cargo comercializar los locales y vender el concepto de la plaza.

''Alberto Kibrit tuvo la idea de crear un centro comercial de sexo y entretenimiento; un sitio donde, como en otras ciudades, el sexo pueda ser visto como parte de la cultura y no esté relacionado con lo oscuro, lo sucio, lo sórdido, lo morboso."

Tenista amateur, Fernando siente orgullo de estar integrado al selecto grupo de colaboradores que rodean a Alberto Kibrit, y de contribuir a la realización de un proyecto que coloca a México en la vanguardia sexual del mundo:

''En otras ciudades hay zonas o calles dedicadas al sexo, pero ninguna cuenta con una plaza comercial semejante a esta. Además, es la más bonita del Centro Histórico, empezando porque nos ampara la espléndida fachada del cine Olimpia. La hemos respetado porque entendemos su valor histórico y artístico."

El Kamasutra en relieve

Sex Capital abarca 2 mil metros cuadrados. El enorme espacio aloja 80 establecimientos. Fernando hace un rápido inventario de lo que los visitantes encontrarán allí:

-Tiendas de ropa y juguetes eróticos (lo mismo condones de cinco pesos que artefactos de 4 mil 500 o disfraces de 750), boutiques de piercing, bares que funcionarán de tres de la tarde a tres de la mañana, restaurantes y lugares de entretenimiento: table-dance, cine erótico, chippendale para mujeres, 50 cabinas de video y 30 de espectáculo en vivo. Además un museo del sexo cuya fachada es copia de un famoso cabaret en Amsterdam.

En el tercer piso, enfrente del table-dance -único sitio al que no se me permite entrar- se encuentra el museo todavía inconcluso. Entre otras cosas falta la instalación eléctrica, y lo recorro a la luz de una lámpara de pilas, acompañada por Fernando Bravo:

-Estamos muy orgullosos de este museo. Para montarlo nos asesoramos con expertos sexólogos que nos ayudaron a comprobar toda la información. Aquí los visitantes podrán ver el Kamasutra en relieve, un mapamundi con el registro de las costumbres amatorias en otras latitudes, mitos, fantasías sexuales, filias extrañas. Consciente de los altísimos niveles de desempleo que padecemos, mi anfitrión me hace notar otro aspecto positivo de la plaza: generarán 200 empleos directos y no duda de que con el tiempo esta cifra aumentará porque la plaza será todo un éxito, ya que fue rigurosa y profesionalmente proyectada:

''En esto, como en el tenis, no se puede improvisar. Nosotros ya tuvimos dos experiencias previas muy importantes en el Palacio de los Deportes: en 2004 montamos la primera Expo Sex. Recibimos 80 mil visitantes. A la expo de 2005 asistieron 100 mil personas. Esperábamos que acudirían exclusivamente hombres; pero conforme fue corriendo la voz de lo que era la muestra empezaron a llegar parejas, hombres y mujeres solos.

Los promotores de Sex Capital están dispuestos a atraer toda clase de público -excepto menores de edad- para que disfrute de las opciones de diversión sexual en medio de la mayor seguridad: estará a cargo de un equipo de expertos en control de multitudes y situaciones difíciles.

Pan y sexo

Por lo que he visto y oído hasta ese momento, deduzco que en la plaza no hay más restricción que la capacidad de soñar; no obstante, Fernando me indica que habrá límites:

"No promoveremos ni aceptaremos nada que esté fuera de la ley: ni drogas, ni prostitución; en las cabinas no se permitirá sexo en vivo ni zoofilia, y sólo en el table-dance habrá desnudo total. Quienes piensen que Sex Capital será una especie de prostíbulo inmenso están equivocados. No han comprendido que aquí van a encontrar una forma sana de entretenimiento que girará en torno al sexo como un derecho para todos, ajeno a la idea de culpa y de pecado."

La pregunto cuál es su idea del pecado:

"Lo que daña a otros seres humanos. Esto les hará bien. No dudo que muchas personas, después de venir aquí, se sientan más seguras de sí mismas y comprendan mejor su sexualidad. Las parejas, al compartir la experiencia de visitar la plaza, renovarán y fortalecerán su relación amorosa."

Fernando espera que la inauguración de Sex Capital, el 27 de octubre, será todo un acontecimiento: ''Tendremos invitados especiales: políticos, empresarios, artistas, periodistas, estrellas del deporte y, por qué no, jerarcas de la Iglesia".

Aunque no puede revelarme la lista, Fernando Bravo me confiesa su máxima ilusión: "Que el señor presidente Vicente Fox acepte inaugurar la plaza -solo o acompañado de su esposa, como él guste. Sabes que soy parte de un equipo. Sin embargo, por lo que respecta a la inauguración estoy hablando en términos estrictamente personales".

Vecino de El Globo y La Ideal, el despacho se llena con ''el santo olor de la panadería''. Ocurrirá lo mismo, a distintas horas, durante los 365 días en que estará funcionando la plaza.

''El olor del pan es muy placentero -concluye Fernando. Cuando inunde la plaza no se pervertirá; por el contrario: su inocencia se enriquecerá con los dulces aromas del sexo.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.