Usted está aquí: jueves 5 de enero de 2006 Opinión MEXICO SA

MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Fox busca capitalizar lo que los bolivianos van a descapitalizar

Otra farsa del foxismo, los supuestos headhunters que integraron el gabinetazo

EL GOBIERNO FOXISTA se retuerce ante el triunfo electoral de Evo Morales, y ya no sabe qué pretexto utilizar para dar más largas al reconocimiento oficial que debe obsequiar al futuro presidente boliviano.

SE ARQUEA PORQUE es obvio que la del líder indígena no es la Bolivia que cuadra con los planes del "cambio"; la "buena", dice, es la que en su momento impulsó Gonzalo Sánchez de Lozada (el Goni), con sus trasnacionales devoradoras.

EL 22 DE ENERO Evo será oficialmente el presidente boliviano y Los Pinos tendrán que otorgar el reconocimiento, por retorcido que se encuentre su inquilino y demás luminarias de la "diplomacia" mexicana.

SIN EMBARGO, EL presidente Fox y sus muchachos insisten en la "experiencia" energética boliviana (la del Goni) y pretenden la "capitalización" (léase privatización) de Petróleos Mexicanos, en un ejercicio similar al practicado en Bolivia una década atrás.

LA "NOVEDAD" ES que el gobierno foxista quiere "capitalizar" el 20 por ciento de los activos de Pemex, mediante la ''emisión de certificados fiduciarios que se colocarían en la Bolsa Mexicana de Valores". En este esfuerzo participan algunos priístas -el senador Genaro Borrego, entre ellos- y "ciertas" iniciativas que duermen el sueño de los injustos desde abril pasado en el Congreso.

"CAPITALIZAR", NO SIN la decidida intervención del Banco Mundial y el BID, fue el término utilizado en Bolivia para extranjerizar los energéticos y tantos otros sectores productivos, y como el gobierno del "cambio" es por demás creativo quiere "capitalizar" a Pemex.

¿QUÉ PASO CON la "capitalización" en Bolivia? Con la ayuda de la Universidad de Los Andes, Venezuela, y su académico Jesús Mora Contreras, sabemos que la estrategia para "capitalizar" (1996) la entidad pública Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos fue retirar la intervención productiva del Estado y atraer inversión privada extranjera masiva.

LA PRIVATIZACION DE YPFB formó parte del proceso de "desintervención" productiva del Estado en los seis sectores más importantes de la actividad económica boliviana, que en 1994 generaron el 12 por ciento del producto interno bruto del país. En cada uno de ellos operaba una empresa pública: YPFB, hidrocarburos; ENDE, electricidad; ENTEL, telecomunicaciones; LAB, transporte aéreo; ENFE, ferrocarriles, y EMV, fundición de estaño-antimonio.

LA PRIVATIZACION DE YPFB fue la más importante de todas. La empresa producía el 80 por ciento del crudo y condensados que se extraían en el país y el 60 por ciento del gas. El sector de los hidrocarburos aportaba cerca del 35 por ciento del valor de las exportaciones totales, 50 por ciento de los ingresos fiscales y 6.3 por ciento del PIB boliviano. Los planes de privatización del Goni encontraron resistencia unida de trabajadores y empresarios privados bolivianos. Los primeros se opusieron a la transferencia de la propiedad de las empresas públicas a inversionistas extranjeros; los segundos quedaban excluidos del proceso.

LA CAPITALIZACION SE concibió primero como un proceso legal complejo, que exigió acuerdos políticos parlamentarios, mediante los cuales, en un par de años, el Estado boliviano creó un marco regulatorio novedoso, la ley de capitalización, incorporó legalmente un sistema de regulación sectorial y reformó la ley de hidrocarburos. Sólo después se pasó a capitalizar las empresas correspondientes, que se convirtieron en "sociedades de economía mixta" (SEM).

LOS INVERSIONISTAS privados tendrían a su cargo la administración de la SEM. Los bolivianos "participarían" por medio de los fondos de pensiones, propiedad de empresas privadas. Legalmente, las deudas de las empresas capitalizables (entre ellas YPBF) se transfirieron al Tesoro General de la Nación y sus servicios se pagan con presupuesto público.

EL CAPITAL DE las SEM capitalizadas estaría constituido por tres tipos de acciones: de los ciudadanos bolivianos, administradas por los fondos de pensiones; de los trabajadores, administradas por el fondo de capitalización común, y de los inversionistas extranjeros (50 por ciento). El dinero pagado por los nuevos socios no se destinó al Tesoro Nacional, sino a la compañía como inversión directa.

CON EVO MORALES en la Presidencia boliviana la "capitalización" va para atrás, pero las trasnacionales devoradoras no se arredran: para eso están México, Pemex y, especialmente, el gobierno del "cambio".

Las rebanadas del pastel:

DE LA PASION de los lectores por el gabinetazo: "otra farsa del foxismo; he leído ya en varias ocasiones la referencia que haces a los supuestos headhunters que fueron utilizados para encontrar a 'los mejores hombres y mujeres' para integrar el gabinetazo de Fox. Lo menos que uno puede decir respecto del trabajo de estos headhunters es que fue muy pobre. Sin embargo, un servidor descubrió que dicho trabajo en realidad fue inexistente, aunque no me consta que no les hayan pagado por ello. Realicé una solicitud de información a la Presidencia de la República, a través del IFAI, para obtener datos concretos de los despachos que participaron en dicho proceso, así como de los resultados de su trabajo y sus honorarios. La primera respuesta de la Presidencia fue negar la información, aduciendo que era reservada (típico en muchas dependencias). Después de insistir mediante un recurso y de que el IFAI resolviera que dicha información no era reservada y que debía ser entregada, recibí como respuesta a grosso modo lo siguiente: que no tenían información acerca de los headhunters, pues nunca trabajaron para la Presidencia, sino que fueron contratados por empresarios para apoyar en el proceso de búsqueda. Por ello ni sabían quiénes eran, qué habían hecho y cuánto recibieron como pago. Es decir, nunca existieron, al menos tal como nos los presentaron. Por tanto, se podría concluir que en efecto no hubo tal método de selección, sino que se simuló utilizarlo con el fin de evitar compartir el queso de los puestos del gabinete con el PAN y su aliado el PVEM. Sólo así se explicaría que los elegidos por los headhunters para integrar el gabinetazo resultaran ser cuates de Fox y Martita, muchos de ellos provenientes de Guanajuato. Qué casualidad, ¿no?". ([email protected])

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