"Sin destinatario", la denuncia tras la acusación de sicólogas contra un mando
Descarta el jefe de la SSP represalias por filtración
El secretario de Seguridad Pública del DF, Joel Ortega Cuevas, negó que iniciar una denuncia penal por la presunta filtración de expedientes oficiales del Centro de Control de Confianza, sea un mensaje autoritario y signifique que todo aquel que denuncie alguna irregularidad dentro de la SSP será perseguido por las autoridades.
En días pasados las sicólogas Luz del Carmen Alvarez, Nancy Karina Gómez, Mirna Sánchez y Ana Luisa Castañeda denunciaron que el ex subdirector de Evaluación de dicho centro, Erick Chargoy Romo, las obligaba a alterar los exámenes sicométricos para favorecer a determinados elementos.
Luego de que se dió a conocer la acusación, Ortega Cuevas aceptó la renuncia de Chargoy Romo y decidió cambiar a las denunciantes al área de Servicios Médicos y Asistenciales.
Paralelamente, la Dirección de Asuntos Internos de la corporación, a cargo de Javier González del Villar, inició una averiguación al respecto.
"Ahora nosotros encabezamos la indignación (...) somos los interesados en saber cómo salió esa información y que se deslinden responsabilidades", advirtió.
Al preguntarle qué delito se perseguía, el funcionario respondió: "el que resulte", y aseguró que la denuncia no tendrá destinatario, ya que se levantará como denuncia de hechos, en contra de quien resulte responsable.
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública reconoció la posibilidad de que lo denunciado por las sicólogas sea cierto, "por eso vamos a investigar para que se deslinden las responsabilidades, porque es como si un médico alterara la composición de un medicamento; se le puede retirar la licencia, y lo mismo ocurre en este delicado campo de la sicología, donde se juega con la mente de las personas".