Usted está aquí: viernes 3 de marzo de 2006 Mundo Sunitas y kurdos se oponen a confirmar a Jaafari como primer ministro de Irak

Lo acusan de no ser neutral; chiítas advierten que su nombramiento es irrevocable

Sunitas y kurdos se oponen a confirmar a Jaafari como primer ministro de Irak

La violencia deja al menos 37 muertos; en Ciudad Sadr, el ataque más sangriento

REUTERS, AFP Y DPA

Bagdad, 2 de marzo. Sunitas y kurdos externaron su oposición a que el primer ministro de Irak, el chiíta Ibrahim Jaafari, sea confirmado en el cargo porque, argumentaron, "no consulta a su socios a la hora de tomar decisiones importantes", mientras la violencia en el país cobró este jueves otras 37 vidas.

A su vez, el diario The New York Times reveló que oficiales del servicio secreto de Alemania (BDN) colaboraron con el ejército de Estados Unidos durante la invasión a Irak, en 2003, en contradicción con la manifiesta oposición del entonces gobierno del canciller Gerhard Schroeder a la guerra, revelaciones que fueron minimizadas por funcionarios políticos alemanes.

Para los grupos kurdos y sunitas, Jaafari no es la persona apropiada para ocupar el cargo de primer ministro y no pueden formar un gabinete con él, "pues no adopta una posición neutral", afirmó el diputado kurdo Mahmud Osman.

Jaafari fue elegido en febrero por los chiítas conservadores de la Alianza Unificada Iraquí (AUI), que logró 128 de los 275 escaños en las elecciones del 15 de diciembre, y aunque cuenta con mayoría, necesita apoyo para poder formar gobierno.

La Alianza Kurda, el Frente de Concordia Sunita y la lista del ex primer ministro chiíta Iyad Allawi, prevén pedir a la AUI que busque un candidato alternativo para el cargo de jefe de gobierno, pero responsables chiítas insistieron en que la elección de Jaafari es irrevocable.

Jaafari, por lo pronto, declaró toque de queda diurno en Bagdad para el viernes, día de oración, con la finalidad de evitar desórdenes tras el atentado contra la Mezquita del Domo Dorado chiíta en Samarra y las represalias contra lugares de culto y miembros de la comunidad sunita.

Con este medida quedó prohibida la circulación de automóviles y serán cerrados los accesos a la capital, informó la televisión oficial.

En tanto, los ataques del día dejaron por lo menos 37 muertos, sólo en Bagdad cuatro atentados cobraron la vida de 11 personas y dejaron 26 heridos.

El ataque más sangriento fue perpetrado en el suburbio chiíta de Ciudad Sadr, donde una bomba estalló en un minibús y provocó la muerte de cinco personas y lesiones a ocho. Además, Adnan Dulaimi, jefe de la Lista del Frente de la Concordia Sunita, sufrió un atentado del que salió ileso, pero murió uno de sus guardaespaldas y otros cinco salieron heridos.

De su lado, el ejército de Estados Unidos informó de la muerte de uno militares, el miércoles, en la occidental provincia de Al Anbar, mientras realizaba una operación de combate.

Precisamente en esa provincia 61 presuntos miembros de la red de Abu Mussab Zarqawi, jefe de la célula iraquí de Al Qaeda, fueron arrestados el lunes en una serie de operativos militares de las fuerzas estadunidenses en la región de Fallujah.

En Tokio, en tanto, la agencia de prensa japonesa Jiji informó que las autoridades iraquíes detuvieron e inculparon a un militante de la organización Al Qaeda de la Jihad en el País de Rafidain, el grupo de Zarqawi, por la decapitación de un turista japonés secuestrado en 2004.

En Alemania, por otra parte, Olaf Scholz, uno de los dirigentes del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) de Schroeder, dijo que la información del The New York Times "es absurda" pues contiene refritos que nada tienen que ver con investigaciones serias.

Max Stadler, experto del opositor Partido Liberal (FDP), estimó que la nota no aporta nada nuevo al informe ya conocido públicamente.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.