Usted está aquí: lunes 6 de marzo de 2006 Política Renuncian al PRI cuatro legisladores poblanos

Son encabezados por el presidente del Congreso local

Renuncian al PRI cuatro legisladores poblanos

MARTHA GARRIDO ORTEGA Y FERMIN GARCIA LA JORNADA DE ORIENTE

Puebla, Pue., 5 de marzo. El presidente del Congreso del estado, Rafael Moreno Valle Rosas; los legisladores locales Leticia Jasso Valencia y Hugo Alejo Domínguez, así como el diputado federal Guillermo Aréchiga, al igual que los ex dirigentes de la sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Jesús Huerta Carrera y Cupertino Alejo Domínguez, anunciaron de manera conjunta su renuncia al Partido Revolucionario Institucional (PRI). Aseguraron en conferencia de prensa que el tricolor se ha vuelto propiedad de Roberto Madrazo, quien excluye a quienes no piensan como él, además de que no pueden ser cómplices del gobierno de Mario Marín Torres, ''que protege a pederastas''.

Los dimitentes enfatizaron que el escándalo que provocó la intriga de Marín y el empresario Kamel Nacif, en contra de la periodista Lydia Cacho, aceleró su decisión de dejar el PRI. Rafael Moreno Valle dijo no estar de acuerdo en que el tricolor minimizara la marcha que miles de poblanos realizaron el pasado 26 de febrero para exigir la renuncia del mandatario.

Guillermo Aréchiga expresó: ''Como maestros, no podemos ser cómplices cuando se presume que desde el gobierno estatal se protege a pederastas, se atenta contra la libertad de expresión, se somete al Poder Judicial y al Legislativo, se usa la ley y el aparato del Estado como instrumento de coerción''.

Todos los renunciantes son colaboradores de la dirigente moral del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales, quien estará el martes en Puebla con motivo del Día Internacional de la Mujer.

Moreno Valle Rosas pertenece a una familia priísta de abolengo. Su abuelo, Rafael Moreno Valle, fue gobernador de Puebla. En el sexenio pasado fue secretario de Finanzas estatal, y hace dos años fue precandidato a gobernador, pero declinó en favor de Mario Marín, mediante un pacto por el que se convertiría en líder del Congreso, y posteriormente en senador.

Hace algunas semanas, Moreno Valle Rosas se quejó de que el proceso de selección de candidatos del PRI no era democrático ni transparente, y anunció que de no haber cambios dejaría al partido, amenaza que concretó este domingo.

En reacción a las renuncias, el presidente estatal del PRI, Juan Manuel Vega Rayet, minimizó lo ocurrido al indicar que todo se trató de ''un capricho'' de Moreno Valle, y que la renuncia de ''cuatro personas'' no significa que haya una desbandada de militantes del partido.

La fractura entre el SNTE y Mario Marín Torres se perfiló desde hace semanas, y se agudizó cuando el sindicato se percató de que el PRI no le concedería ninguna candidatura, lo que rompería una costumbre de hace 50 años, por la cual el tricolor siempre otorgó dos diputaciones federales a las secciones 23 y 51 del sindicato magisterial.

Durante su conferencia de prensa, Moreno Valle leyó un comunicado en el cual acotó que por congruencia con sus "principios y convicciones, y por la tristeza de ver que el partido en el que creí ha sido desvirtuado por quienes se han apoderado de él, renuncio a la presidencia de la Gran Comisión del Congreso local; a la coordinación de la bancada priísta; al Consejo Político del PRI, tanto nacional como estatal, y a mi militancia partidaria, para como simple ciudadano continuar con la lucha por la modernización del país y las mejores causas de Puebla''.

Consideró que a raíz de la derrota electoral del PRI en 2000, se inició una lucha entre quienes buscaban modernizarlo y aquellos que buscaban el poder para satisfacer ambiciones personales.

''Con ello se suplantó la lealtad a los principios de partido, piedra angular de una disciplina partidaria por una fidelidad perruna a Roberto Madrazo, quien confunde a su persona con la institución y que por su propia naturaleza excluye a quienes no se pliegan a sus designios. Se ha marginado a compañeros con amplios merecimientos, simplemente por no estar dispuestos a acatar la voluntad de la camarilla que se ha adueñado de las estructuras del partido.''

Sobre el caso Lydia Cacho, dijo estar convencido ''de que nadie está por encima de la ley, y de que las autoridades son las primeras obligadas a respetarla, como han manifestado claramente los poblanos a través del rechazo social y la marcha ciudadana sin precedentes'' que se realizó recientemente.

 
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