Vendió a General Motors predios expropiados y pagados por el gobierno estatal

Obtiene familia de NL millones de pesos con tierras ejidales potosinas

Las autoridades dijeron que se usarían para agroindustria; Fox avaló las operaciones

JAIME HERNANDEZ LA JORNADA SAN LUIS

San Luis Potosi, SLP, 7 de abril. La familia regiomontana Villarreal Ballesteros se benefició de la expropiación de 90 hectáreas de terrenos ejidales que, mediante la creación de una empresa paralela, vendió a la empresa General Motors.

La intervención fue solicitada por el anterior gobernador, el priísta Fernando Silva Nieto, y autorizada por el presidente Vicente Fox Quesada.

El actual mandatario potosino, el panista Marcelo de los Santos Fraga, pagó 4.2 millones de pesos para indemnizar a miembros de los ejidos Laguna de San Vicente y Ojo de Gato, municipio de Villa de Reyes.

La maniobra se concretó a finales de 2003 y sale a la luz ahora que Logistik y dos integrantes de la familia Villarreal se embolsaron 292 millones de pesos que pagó la administración panista por la venta de 350 hectáreas del parque industrial para una planta de General Motors.

Por órdenes de Fox, el Registro Agrario Nacional de la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) expidió en 2005 certificados de propiedad ejidal a dos integrantes de esa familia, que amparaban 222 hectáreas y que también fueron vendidas a General Motors en 190 millones de pesos.

La historia del uso de recursos públicos para favorecer a la familia Villarreal Ballesteros, propietaria del recinto fiscalizador estratégico Logistik Free Trade Zone, un parque industrial que recibe trato fiscal especial, se reconstruyó a partir de la revisión de documentos inscritos en la oficina del Registro Público de la Propiedad y el Comercio (RPPC) en Santa María del Río.

Dos empresas, una familia

El 30 de agosto de 2000 los Villarreal Ballesteros crearon en San Pedro Garza García, Nuevo León, la empresa Operadora de Inmuebles San Pedro SA de CV (OISP), cuyo consejo de administración presidía por Blanca Ballesteros Almaguer. Como vocales aparecen Blanca Raquel, Ana Laura y Fernando Pablo Villarreal Ballesteros. Fernando Villarreal Cantú fue designado director general.

El 11 de febrero de 2004 en Monterrey, Nuevo León, el clan formó Logistik Servicios Multimodales SA de CV, con un consejo de administración idéntico al de OISP, según las escrituras públicas de los negocios que ha hecho en San Luis Potosí.

Tres gobiernos, dos expropiaciones

El 22 de junio de 2005, según la inscripción número 410 del tomo 29 de propiedades públicas del Registro de la Propiedad, OISP vendió a Logistik Servicios Multimodales 90 hectáreas ubicadas en los ejidos Laguna de San Vicente y Ojo de Gato, en Villa de Reyes. El monto de la operación fue de 4 millones 862 mil pesos.

En esa escritura se explica que OISP es dueña de dos terrenos, uno de 86.50 hectáreas en Laguna de San Vicente, y otra de 3.90 en Ojo de Gato, ambas obtenidas de una donación condicionada del gobierno de San Luis Potosí.

Este apoyo se concretó el 5 de noviembre de 2003 y se inscribió en el testimonio 449 del tomo 19 de escrituras públicas.

Los documentos también dan cuenta de las expropiaciones a favor de la OISP. Los decretos presidenciales se publicaron en el Diario Oficial de la Federación del 12 de junio de 2003.

El primer decreto señala que con el oficio número SP/101- /2002 de fecha 25 de noviembre de 2002, cuando aún gobernaba Silva Nieto, la administración estatal solicitó a la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) la expropiación de 86.43 hectáreas del ejido Laguna de San Vicente.

El predio, explicaba el gobierno potosino, se destinaría a ''una planta almacenadora, comercializadora, industrializadora, de transformación y demás actividades inherentes al ramo agroindustrial de la empresa operadora Inmuebles San Pedro SA de CV''.

Según ese oficio, el gobierno de Silva Nieto se comprometía a pagar la indemnización. Cuando esto ocurriera, el gobierno potosino solicitaría autorización para transmitir a OISP la propiedad de los terrenos expropiados.

La Comisión de Avalúos de Bienes Nacionales determinó en marzo de 2003 que cada hectárea valía 45 mil 990 pesos, por lo que la indemnización total fue de tres millones 978 mil 253 pesos.

La Presidencia de la República afirma en el decreto que la expropiación cumple el requisito de utilidad pública que, según el texto, consiste en ''la instalación de una planta de almacenamiento para transformar y comercializar granos y oleaginosas para garantizar el abasto y consumo de la colectividad''. Con ese argumento, Fox Quesada determinó procedente la expropiación.

La segunda expropiación, en los mismos términos que la primera, fue por 3.90 hectáreas, que se destinaron a los caminos y vialidades para conectar las instalaciones de la OISP con la supercarretera Bledos-Villa de Arriaga.

El gobierno estatal pagó a dos ejidatarios por esa superficie 229 mil 942 pesos.

Pese a que fue una propuesta de su antecesor, De los Santos Fraga concretó la expropiación. El 3 de noviembre de 2003, el mandatario, su secretario general, Alfonso Castillo Machuca, y el de Desarrollo Económico, Fernando López Palau, firmaron el contrato de donación. Por la empresa signó el poderado legal, Miguel Angel Gómez. En total, la administración estatal de Marcelo de los Santos pagó cuatro millones 208 mil 195 pesos.

Los apoyos de la autoridad, sin embargo, no acaban ahí. La mayor parte de los terrenos en que se asentará la planta automotriz fueron comprados a tres particulares: Eladio González Peraza y dos miembros de la familia Villarreal Ballesteros. Los tres recibieron del Registro Agrario Nacional de la SRA títulos de propiedad que amparaban, entre los tres, 332 hectáreas.

José Armando Ballesteros Almaguer, al parecer hermano de la apoderada legal de Logistik y presidenta del consejo de administración de OISP, recibió ''por instrucciones del presidente Vicente Fox Quesada'' el título de propiedad 2287 que amparaba la tenenia de 11.3 hectáreas. Al venderlas a general Motors, obtuvo 95 millones 25 mil 299 pesos.

Fernando Pablo Villarreal Ballesteros, accionista de las dos empresas, obtuvo el título de propiedad 2286, que le daba derechos sobre 11.5 hectáreas, por las que General Motors pagó 95 millones 154 mil pesos. Ambos certificados fueron expedidos el primero de junio de 2005.