Usted está aquí: miércoles 12 de abril de 2006 Sociedad y Justicia Decomisan 5.5 toneladas de coca en Ciudad del Carmen, en un DC-9 procedente de Venezuela

Detienen en el DF a "empleado menor" del gobierno capitalino con 4 kilos de heroína

Decomisan 5.5 toneladas de coca en Ciudad del Carmen, en un DC-9 procedente de Venezuela

LORENZO CHIM Y GUSTAVO CASTILLO CORRESPONSAL Y REPORTERO

Ampliar la imagen José Luis Santiago Vasconcelos, Carlos Gaytán Ochoa y Gilberto Higuera Bernal al término de su conferencia ante los medios de comunicación Foto: María Meléndrez Parada

En conferencia de prensa conjunta, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Procuraduría General de la República (PGR), informaron del aseguramiento -en Ciudad del Carmen, Campeche-, de un avión DC-9 que transportaba un cargamento de 5.5 toneladas de cocaína, y de la detención en el Distrito Federal de Moisés Martín Castillo, "un empleado menor" del gobierno capitalino que pretendía introducir a territorio nacional casi cuatro kilos de heroína, y que formaba parte de un grupo de narcotraficantes que dirigía el colombiano José Fernando Vidales.

Por lo que hace al DC-9, se dieron a conocer versiones contradictorias en cuanto a la manera en que se le consideró una nave sospechosa.

En la ciudad de México, el subjefe operativo del Estado Mayor de la Sedena, Carlos Demetrio Gaytán Ochoa, afirmó que llamó la atención de las autoridades mexicanas lo irregular del vuelo, ya que primero voló una hora de Venezuela a México, regresó a ese país por una supuesta falla, y posteriormente ratificó su plan de vuelo para partir con destino a Ciudad del Carmen.

El general dijo también que el vuelo despertó sospechas porque funcionarios del aeropuerto de Ciudad del Carmen impidieron la revisión de rutina, e incluso a los militares se les mencionó la existencia de una supuesta fuga de aceite para impedir que se acercaran a la aeronave, y por último, se decidió la inspección porque perros adiestrados alertaron sobre la posibilidad de que se transportara droga.

Sin embargo, en Campeche, el comandante de la 33 Zona Militar, Jacinto Alejandro Carro Bautista, informó que el avión perteneciente a la compañía estadunidense Fly tuvo que aterrizar debido a una emergencia derivada de una falla mecánica.

Al igual que Gaytán Ochoa, en conferencia de prensa en las instalaciones de la 33 Zona Militar, el comandante Carro Bautista no descartó la posibilidad de que funcionarios del aeropuerto estén coludidos con los narcotraficantes, y por ello ya la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) los interroga, para definir su situación jurídica.

Para el general Gaytán Ochoa y el titular de la SIEDO, José Luis Santiago Vasconcelos, este decomiso de 5.5 toneladas de cocaína alertó a las autoridades mexicanas sobre el hecho de que los narcotraficantes están utilizando de nueva cuenta aeronaves para el trasladado de droga, pero también mostraron su preocupación porque vuelos lícitos sirvan para estos fines.

Por ello, el subjefe operativo del Estado Mayor de la Sedena reveló que se ha incrementado la vigilancia en distintos aeropuertos, debido a que se tienen datos de que sirven para la llegada de vuelos cargados con droga. Aunque no quiso proporcionar los nombres de todas las terminales aéreas que utilizan los narcotraficantes, señaló que se tienen evidencias de este tipo de acciones en las de la ciudad de México, Toluca, Cancún y Toluca.

Además del decomiso de la droga, que fue localizada en 128 maletas, en esa acción los efectivos militares detuvieron Miguel Vicente Vázquez Guerra, copiloto de la aeronave, ya que el piloto al darse cuenta de que se procedía a la revisión del aparato logró darse a la fuga.

Posteriormente, aseguraron una avioneta tipo Falcon que había despegado del aeropuerto de Toluca con dos pasajeros, los cuales supuestamente viajaron a la terminal de Ciudad del Carmen, para solicitar mayores servicios para el DC-9.

Así, se detuvo también a los mexicanos Marco Antonio Pérez de Gracia y Fernando Poot Pérez.

Por otra parte, en la misma conferencia de prensa, el subprocurador de Procesos Penales de la PGR, Gilberto Higuera Bernal, dio a conocer la detención de Moisés Martín Castillo.

El funcionario calificó al detenido como "un empleado menor" que laboraba como auxiliar administrativo en el área de archivo de la Secretaría de Finanzas del Gobierno del Distrito Federal.

De acuerdo con lo declarado por Higuera Bernal, no se ha detectado el involucramiento de ningún otro funcionario del gobierno capitalino en la red de traficantes en la que participaba Martín Castillo, y a la que está vinculado José Fidel Carranco, un distribuidor de enervantes ligado a los colombianos José Fernando Vidales y Leydy Karina Reyes Leniz, quienes también fueron aprehendidos en la ciudad de México y Cuernavaca, Morelos, en las últimas horas.

La detención de Moisés Martín Castillo se logró gracias a que autoridades venezolanas informaron a la policía mexicana que Samuel Martín Castillo, hermano de Moisés, había sido capturado en aquel país cuando pretendía abordar el vuelo 374 de Mexicana de Aviación procedente de Caracas, Venezuela, con un cargamento de heroína.

Samuel Martín habría declarado a autoridades venezolanas que su hermano había logrado subir al avión con destino a México, y que también llevaba droga para José Fidel Carranco.

 
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