Usted está aquí: jueves 11 de mayo de 2006 Sociedad y Justicia Vital, papel femenino contra la disfunción eréctil: experto

Las mujeres son detonante para empezar un tratamiento

Vital, papel femenino contra la disfunción eréctil: experto

Los hombres tardan cuatro años en aceptar el problema

ROCIO SANCHEZ ESPECIAL NOTIESE

Luego de múltiples estudios sobre la efectividad de los tratamientos contra la disfunción eréctil, e incluso sobre la percepción de los hombres acerca del impacto de este problema en su sexualidad, por primera vez se realizan análisis acerca de cómo viven las mujeres afectadas por este problema de sus parejas.

El estudio Experiencia femenina de la actitud de los hombres hacia los eventos de la vida y la sexualidad (FEMALES, por sus siglas en inglés), reveló que la disfunción eréctil disminuye el deseo, la excitación, la capacidad de alcanzar el orgasmo y la satisfacción sexual de las mujeres.

Así, mientras 82 por ciento de las encuestadas dijeron estar satisfechas con su vida sexual antes de que apareciera el problema, después de éste sólo 45 por ciento aseguró estar conforme.

Así lo dio a conocer el sexólogo Eusebio Rubio, presidente de la Asociación Mundial para la Salud Sexual, durante el primer simposio americano Perspectivas globales sobre los avances de la ciencia en beneficio de la pareja, realizado en Acapulco, Guerrero, el 6 de mayo pasado.

Lo importante de estas nuevas investigaciones es que se está comprobando que la disfunción eréctil impacta por igual a los dos integrantes de la pareja, sin embargo, el enfoque que le dan las mujeres es distinto. Muchas veces, revelaron los expertos, ellas son un factor determinante para que sus parejas acepten su problema y busquen ayuda médica.

No obstante, el inicio del tratamiento es el último paso de un proceso que puede ser muy doloroso para las parejas, pues se rompe la comunicación (que en general solía ser buena, según las entrevistadas), se daña la autoestima femenina al dudar si todavía es atractiva o si existe alguna infidelidad, y se buscan todo tipo de recursos para evitar lastimar la susceptibilidad del varón. Esto sumado a que, en promedio, un hombre tarda cuatro años en aceptar que sufre disfunción eréctil, además de que la mitad de los que la padezcan jamás hablarán de ello con su médico, informó Sigfried Meryn, director médico del Centro de Educación Médica Avanzada, de la Universidad Médica de Viena, Austria.

Los estudios presentados muestran por primera vez -con datos científicamente obtenidos- que el tratamiento contra la disfunción beneficia no sólo a los hombres, sino que las mujeres también observan mejoría en la calidad de su vida sexual. Una de las investigaciones, patrocinadas por el laboratorio Bayer, mostró que después del tratamiento, la percepción de una vuelta a la vida sexual completamente normal era prácticamente igual entre mujeres y hombres, las primeras en 69 por ciento y los segundos en 71.

 
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