Usted está aquí: miércoles 24 de mayo de 2006 Capital Acusan vecinos a Slim y Arango de acaparar inmuebles en el Centro

Usan "prácticas gansteriles" para obligar a los dueños a que les vendan, señalan

Acusan vecinos a Slim y Arango de acaparar inmuebles en el Centro

Anuncian jornada de resistencia civil; exigen que se les informe sobre su "suerte"

LAURA GOMEZ FLORES

Ampliar la imagen Trabajos finales en calles del Centro Histórico, al término de su remodelación, en noviembre de 2002

Las inmobiliarias Centro Histórico y Lomelí-Collet, de los empresarios Carlos Slim y Manuel Arango, respectivamente, llevan a cabo desalojos de edificios catalogados que presentan adeudos en el pago de predial o están intestados, y "presionan a los propietarios a venderlos a precios irrisorios, muchas veces utilizando prácticas gansteriles", denunció la Unión de Vecinos y Comerciantes del Polígono Centro Histórico.

Representantes de esa agrupación, integrada por más de 140 propietarios de negocios de la zona, dijeron que la estrategia, aplicada desde hace tres meses, consiste en la clausura del establecimiento, la instalación de ambulantes para impedir el acceso de clientes y el ofrecimiento de una cantidad que no supera 20 por ciento del valor de la propiedad.

Esa estrategia, dijeron, ha permitido a las inmobiliarias Centro Histórico y Lomelí-Collet "apoderarse" de 50 edificios de valor artístico, histórico y cultural, principalmente en las calles de República de Uruguay, Mesones, Regina, Bucareli, República de El Salvador y San Jerónimo, de donde han sido desalojadas decenas de familias, y otras han visto perder su único patrimonio. Esos inmuebles se suman a los 66 adquiridos y restaurados en la zona financiera del Centro Histórico.

Señalaron que las denuncias presentadas contra el director jurídico de la delegación Cuauhtémoc, Alonso Rojas, por esas irregularidades, "han derivado en más clausuras, multas y su negativa a levantar los sellos, obligando a los afectados a ceder, sin importar sus más de 40 años de arraigo en la zona, a fin de crear el Slim center-Arango club".

Por ello, decidieron realizar una jornada de resistencia civil pacífica y ordenada la semana próxima, que incluirá una marcha con antorchas de la avenida José María Izazaga al antiguo Palacio del Ayuntamiento, antes de la conferencia matutina del jefe de Gobierno, Alejandro Encinas.

Venderán en las banquetas

También efectuarán "un día de venta en las banquetas", anunciaron José Luis Solís, Teresa González, María Concepción Ruiz, Armando Villar, Oscar Rivera y Enrique Valle. En conferencia de prensa, los representantes de más de 140 negocios de billetes de Lotería, papelerías, restaurantes, electrónica, instrumentos musicales y cafeterías mencionaron que los casos "más dramáticos" sucedieron en los inmuebles marcados con los números 7 y 36 de la calle de Mesones, donde el adeudo de predial y la carencia de testamento permitió a las empresas Centro Histórico y Lomelí-Collet apropiarse de ellos y proceder a su desalojo.

Narraron que una de las vecinas, al enterarse de lo que iba a suceder, murió. María Concepción, quien vivía en el primer inmueble, denunció la violencia con que fue sacada de sus hogares la gente, "porque los señores (Slim y Arango) ya habían cubierto los pagos que se debían y, por lo tanto, ya eran los dueños". A unos meses de ello, "es acondicionado para la renta de departamentos, mientras otros edificios, comprados entre 800 mil y un millón de pesos a sus propietarios, hoy tienen un valor en el mercado inmobiliario de 5 millones de pesos".

Los denunciantes manifestaron que funcionarios de la Secretaría de Finanzas del DF han facilitado "esas compras", al informarles sobre el estado que guardan los edificios que les interesan, y con el apoyo de notarios proceden a cubrir los adeudos o comprar, lo cual "es ilegal, pero como tienen el poder del dinero y las influencias, se les allana el camino para crear su paraíso, donde la gente pobre no tiene cabida", señaló Teresa González, asesora de la unión.

Una prueba de ello, indicó, es el cierre de una parte de la calle Vizcaínas con una reja verde de gran tamaño y diseño arquitectónico, para "salvaguardar la seguridad y tranquilidad de los inquilinos de uno de sus edificios en renta; en su mayoría son pintores, escultores, escritores y gente "descontextualizada de quienes vivimos en este barrio y somos catalogados como puntos rojos", aseveró.

Indicó que tras varias reuniones, se logró que la delegación Cuauhtémoc retire, a partir de este jueves, a los ambulantes que obstruyen las entradas de los negocios establecidos en la zona "no remodelada", pero "exigimos una reunión con los empresarios, no con sus representantes, para conocer su programa de rescate y remodelación de este polígono y la suerte que corremos, pues no vamos a permitir que nos quiten nuestro patrimonio".

 
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