Usted está aquí: lunes 19 de junio de 2006 Opinión Aprender a Morir

Aprender a Morir

Hernán González G.

Pertinentes aclaraciones

Escribe Alfonso García , presidente de la Sociedad Española e Internacional de Tanatología (SEIT), con sede en Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias, España, y con presencia además en Argentina, México y Puerto Rico, para decir: "He leído detenidamente su artículo Aprender a Morir (La Jornada, lunes 5 de junio) y aprovecho para dar algún matiz, pues la información que vierte no es del todo cierta".

"Es cierto que la SEIT-México es quien presta apoyo a las familias afectadas en Pasta de Conchos, en Sabinas, Coahuila, llevada de la mano de su presidente D. Mario Guerra Rojano, tanatólogo mexicano para más señas, junto a otros seis profesionales mexicanos, de la misma organización.

"Dicha sociedad tiene su sede en México DF y se encuentra integrada en una formación de ámbito internacional que es la SEIT, quien sencillamente creó un marco internacional que agrupa diferentes sociedades tanatológicas, lo cual puede hacer pensar a quien escribe que dichos tanatólogos son españoles y en cierta medida dar a entender que es un colonialismo tanatológico.

"Nada más lejos de la realidad y del ánimo de trabajo de los profesionales implicados en la empresa tan difícil de ayudar en condiciones tan dramáticas y de tanta tensión como las acontecidas en Coahuila. Por ello aprovecho para recordarle que en su país hay no sólo dos instituciones serias encargadas de la formación y la atención tanatológica, sino que son algunas más."

A continuación, don Alfonso García anexa un listado de inimaginadas instituciones que en México se dedican a la tanatología, además del instituto nacional y de la asociación nacional: SEIT-México, Sociedad Española e Internacional de Tanatología en México; ATT, Asociación Tabasqueña de Tanatología AC; Astem, Asociación de Tanatología del estado de Morelos AC; Prosertan, Profesionales al servicio de la tanatología AC;
Conatan, Consejo Nacional de Difusión y Apoyo en Tanatología AC; Asociación Interna de Tanatología y el Departamento de Tanatología del ISSSTE (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado).

Mercedes Bonilla Arandia , directora general de CEDEHC, Centro de Estudios de Desarrollo Humano y Capacitación AC, también escribe para decir que éste se dedica "al apoyo del duelo en la circunstancia que sea. Acerca de la información que vierte de los tanatólogos españoles, no es del todo cierta. Son tanatólogos que se formaron en España, pero son mexicanos. Su director, Mario Guerra fue mi alumno e hizo un master en España, no sé para qué, ya que los tanatólogos mexicanos estamos muy bien preparados para realizar el manejo del duelo en cualquier circunstancia. Quiero decirle que sí se aprende a morir si nos preparamos, se trata de una filosofía de vida en la cual nosotros trabajamos. Mentira que la tanatología se dedique a la muerte como la trabajan las dos instituciones que mencionaron en el artículo anterior. La nueva tanatología es realmente aprender a vivir y a morir".

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