Usted está aquí: domingo 25 de junio de 2006 Sociedad y Justicia Instalan en Oaxaca la comisión para resolver conflicto magisterial

Representantes de la Iglesia católica y el pintor Francisco Toledo, sus integrantes

Instalan en Oaxaca la comisión para resolver conflicto magisterial

Desconocen maestros, de manera oficial, la oferta de 85 mdp para levantar paro y plantón

ENRIQUE MENDEZ Y OCTAVIO VELEZ ENVIADO Y CORRESPONSAL

Ampliar la imagen El Padre Uvi y el arzobispo José Luis Chávez Botello, integrantes de la comisión de intermediación en el conflicto magisterial de Oaxaca, después de una conferencia de prensa Foto: María Meléndrez Parada

Oaxaca, Oax., 24 de junio. Con la participación de representantes de la Iglesia católica y el pintor Francisco Toledo, esta tarde quedó formalmente integrada la comisión de intermediación que tenderá puentes de diálogo entre los maestros de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en paro desde el 22 de mayo pasado, y el gobierno de Ulises Ruiz, con lo que se perfila el inicio de una posible solución al conflicto magisterial en el estado.

El arzobispo y los obispos de la entidad anunciaron que este domingo presentarán un documento de exhorto a la paz, a la reanudación de clases en las escuelas y una propuesta de reforma educativa.

José Luis Chávez Botello, arzobispo de Antequera Oaxaca, aceptó participar como testigo en la mesa de negociación, que podría instalarse entre martes y miércoles, y en un encuentro por la mañana en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, Toledo planteó al líder sindical, Enrique Rueda Pacheco, que en la mesa también se suscriba un pacto para que el próximo año el gobierno estatal y los maestros lleguen a un arreglo antes de mayo, para evitar los paros cíclicos en el estado.

Hoy, luego de entrevistarse con Chávez Botello en el templo de El Carmen Alto, Rueda Pacheco afirmó que no había recibido ninguna comunicación oficial sobre la oferta de ampliar a 85 millones la partida que el gobierno local está dispuesto a entregarles para terminar con el paro y con el plantón, por lo que hasta el momento no podían analizar si la aceptaban o no.

Refirió que en la mesa de la negociación, integrada además de Francisco Toledo por el obispo emérito de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes, y el sacerdote Wilfredo Mayrén, conocido como el Padre Uvi, se buscará que la Secretaría de Gobernación acepte un diálogo directo de los mentores con representantes de las secretarías de Hacienda y Educación Pública, de la dirección del Instituto de Seguridad y Serevicios Sociales de los Trabajadores del Estado y con la dirigencia del SNTE.

-¿Pero, en tanto, es aceptable la oferta de 85 millones de pesos?

-No tenemos aún comunicación con el gobierno del estado. Planteamos, después de la agresión, que sólo tendríamos como interlocutor al gobierno federal. Desconocemos este ofrecimiento, sólo lo conocemos por la información publicada en los medios, es informal y no podemos tomarlo como una propuesta seria.

"Para nosotros, lo que se requiere es la salida de Ulises Ruiz, y en la negociación no aceptaremos la presencia de ningún funcionario del gobierno del estado."

Respecto de las elecciones del próximo 2 de julio, Rueda Pacheco afirmó que el magisterio aún no puede garantizar la instalación de casillas en el Centro Histórico, tomado por los profesores, porque ello "depende de la respuesta que den las instancias federales".

-El diálogo se rompió porque Gobernación rechazó la intervención de instancias federales, ¿ahora la acepta?

-Así es, está en la idea de poder instalar las mesas con funcionarios federales, por eso se puede reabrir el diálogo. Pero como queremos evitar un nuevo rompimiento, invitamos a esta comisión mediadora para que sea garante de que no nos levantemos hasta lograr una solución.

Por su parte, el Padre Uvi dijo que la mesa ya trabaja con cada una de las partes, señaló que la instalación formal sería a partir del martes, y refirió que los ocho obispos de Oaxaca realizaron ayer un "encuentro virtual", para redactar de manera conjunta el pronunciamiento que difundirán después de la misa dominical.

Expresó su esperanza de que el martes se dé un buen avance en la negociación, y reiteró su rechazo a la violencia, porque ésta, dijo, lleva a una posición alejada de la sensatez y la prudencia.

En ese sentido, planteó que una de las tareas de la comisión será sentar a los maestros con el gobernador Ulises Ruiz. "La comisión pretende que esté también el gobierno, pero no sabemos si lo lograremos. Vamos a luchar porque estemos en planos de igualdad, y cruzar la información al magisterio", declaró.

Mientras, Chávez Botello confirmó que la jerarquía eclesiástica emitirá un mensaje. "Desde nuestra misión vamos a aportar nuestro granito de arena para que se avance en la paz", expresó.

El documento será firmado por los obispos de las diócesis de Huajuapan de León, Puerto Escondido, Tehuantepec y Tuxtepec, Teodoro Enrique Pino Miranda, Eduardo Carmona Ortega, Felipe Padilla Cardona y José Antonio Fernández Hurtado, respectivamente; el obispo auxiliar de la diócesis de Tehuantepec, José Refugio Mercado Díaz, y de las prelaturas de Huautla y de Los Mixes, Héctor Luis Morales Sánchez y Luis Felipe Gallardo Martín del Campo, en ese orden, así como por el arzobispo Chávez Botello.

Por su parte, la secretaria técnica de la Red Oaxaqueña de Derechos Humanos, Sara Méndez Morales, demandó que para restituir "el orden constitucional violentado" en Oaxaca es necesaria la urgente intervención del gobierno federal, mediante el Congreso de la Unión que, dijo, debe iniciar un proceso de juicio político contra el gobernador.

Afirmó que la persistencia de violaciones a los derechos humanos en Oaxaca se ha visto agravada por el uso de la fuerza pública para desalojar a los maestros, acción que puso de manifiesto la falta de voluntad política del gobierno para resolver el conflicto.

Al presentar un informe detallado del frustrado desalojo del plantón del magisterio, rechazó la postura oficial de que el operativo del 14 de junio fue "legal", porque "la policía actuó con estricto apego a la ley y no utilizaron armas de fuego".

Como evidencia, presentó un listado de los heridos y se refirió a cinco casos: el de Héctor Ruiz Martínez, quien fue alcanzado por una bala en el pie mientras corría para salir del Centro Histórico. Según reportes del Hospital Civil, donde fue atendido, el paciente presentó "herida por proyectil de arma de fuego con orificio de entrada y salida en el pie derecho, con fractura de huesos".

También se refirió a Daniel Mendoza Reyes, atendido en el mismo nosocomio, quien fue recibido por una herida penetrante en el tórax por proyectil de arma de fuego e intervenido quirúrgicamente en el Instituto Mexicano del Seguro Social, al presentar "segmentectomía en lóbulo superior del pulmón derecho. El refiere que fue alcanzado por un disparo de lanzagranadas".

En tanto que Daniel Bautista Díaz casi pierde el ojo a consecuencia del estallido de una bomba de gas lacrimógeno, mientras que Heriberto Martínez fue alcanzado por un petardo, y Filemón Caballero Ríos refiere que una bomba lanzada desde el helicóptero le estalló en el brazo.

También presentó otro testimonio sobre el uso de armas de fuego en el edificio sindical: "entró un comando armado con rifles de asalto, miras telescópicas y láser; cuando estábamos ahí parados empezamos a ver el láser en nuestros pechos y los veíamos en las caras de los compañeros. Eran rifles de asalto, de alto poder, que portaba una unidad especializada, porque ese fue un operativo de unidades especiales con hombres más allá de 1.80 metros de estatura, corpulentos, con chalecos antibalas, máscaras antigas, radios, navajas, pistolas al cinto, en fin, hombres de guerra".

 
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