Usted está aquí: miércoles 5 de julio de 2006 Política Los legisladores del PRI descartan una desbandada

Hay que renovar las dirigencias, afirma Bartlett

Los legisladores del PRI descartan una desbandada

VICTOR BALLINAS Y ELIZABETH VELASCO

Diputados y senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) descartaron que se vaya a dar una desbandada de militantes después del fracaso en la contienda electoral. Por el contrario, el senador Manuel Bartlett convocó a una movilización nacional para rescatar al tricolor. Es momento de que haya nuevas dirigencias nacional, estatales y municipales, porque no pueden continuar los mismos que hundieron al partido, afirmó.

Heliodoro Díaz Escárraga, vicepresidente de la Cámara de Diputados, señaló que quienes afirman que habrá una desbandada "no tienen muy claro el sentido de la democracia".

Aparte, su compañero de bancada Alberto Aguilar Iñárritu admitió que la derrota del PRI obedece a que prevalecieron "los intereses de grupo". De seguir esa tendencia, añadió, "vamos a cambiar el nombre al letrero que está en Insurgentes Norte. En vez de PRI le vamos a poner RIP, porque hasta ahí va a llegar".

A diferencia de Díaz Escárraga, quien pidió a sus correligionarios que en lugar de "autoflagelarse" y pedir que se "corten cabezas" se haga un diagnóstico serio para definir las líneas de acción a futuro, Aguilar cuestionó desde el nombramiento de Mariano Palacios Alcocer al frente del tricolor hasta la integración de las listas plurinominales que se presentaron al Congreso, las cuales, dijo, "no fueron de un partido en transformación, sino producto de la restauración".

"Definitivamente las cosas no se hicieron correctamente. El nombramiento de Mariano Palacios se hizo a espaldas de los mil 200 consejeros, porque se pidió un voto de confianza -eufemísticamente llamado así- por Roberto Madrazo y Montiel."

En cambio, Díaz Escárraga pidió admitir que en la democracia "se gana o pierde", y dijo que los priístas, más que emitir "opiniones personales" y sacar "el dedo flamígero", tienen que hacer un análisis estatal y por regiones.

Al respecto, el senador Bartlett comentó que no sabe si todavía tengan por ahí "la idea de expulsarme, porque no creo que estén muy animados para expulsiones los que me amenazaron hace poco".

No obstante, dijo, es importante que en este momento de definiciones haya voces que defiendan al PRI, porque "Madrazo nos llevó al desastre, a la peor elección de la historia priísta, a la tercera fuerza menguada en todo. No ganó un solo estado y también perdieron todos los gobernadores priístas".

"Siempre supimos que la candidatura de Madrazo era la peor. El grupo que se apoderó del partido no quiso escuchar, engañó a la militancia y manipuló las encuestas, y ahí están los resultados", apuntó.

Por otra parte, calificó de despropósito la actitud del presidente del PRI, Mariano Palacios Alcocer, y del candidato a la Presidencia, Roberto Madrazo, quienes avalaron el triunfo del abanderado panista, Felipe Calderón Hinojosa.

El proceso todavía no termina, agregó, y el pronunciamiento de Palacios suena a "arreglos cupulares. Ya se habla de que están en contacto algunos gobernadores priístas con el PAN, y esa es una traición a lo que Madrazo llamó el voto leal del partido".

El ex secretario de Gobernación no ocultó sus discrepancias con Madrazo. Aseveró que "los resultados del PREP son preliminares, y hasta que no se haga el cómputo distrital no sabremos quién ganó la elección presidencial, por lo cual es totalmente negativo que Madrazo y compañía -la dirigencia nacional priísta y los gobernadores- se presten a apuntalar el triunfo de la derecha en el país, cuando todavía falta el proceso más importante, que es analizar acta por acta, casilla por casilla, en los 300 distritos electorales".

Después comparó a Madrazo y su comité ejecutivo con el PARM, el cual, hace años, "cuando el PRI ganaba le levantaba la mano".

Bartlett aseveró que quienes llegaron en la lista plurinominal a las cámaras de Diputados y Senadores, si no tienen una dirigencia distinta al grupo madracista, van a continuar con lo mismo, es decir, orientando a los legisladores a la derecha, en contra de los intereses populares.

Por su parte, Díaz Escárraga y Aguilar Iñárritu descartaron que el PRI haya avalado el triunfo de Calderón. "Lo que reconocemos es que los resultados no favorecieron al PRI y que el dos por ciento de actas que faltan por computar no cambiarán esa tendencia", sostuvo Díaz.

 
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