Usted está aquí: jueves 6 de julio de 2006 Opinión Astillero

Astillero

Julio Hernández López

Guionistas del algoritmo

¿La misma historia, pero al revés?

Exigencia: voto por voto

Pista de Hildebrando en un taxi

Los guionistas del algoritmo ofrecieron ayer a los mexicanos una segunda función. Ya empezado el jueves, parecía la misma del domingo, pero ahora pasada en reversa (Calderón y López Obrador arrancaron esta vez de posiciones distintas a las del pasado 2, pero el software implacable se encaminaba a colocar a cada cual en su sitio predestinado, si acaso con leves acomodos porcentuales causados por eventualidades necesarias para la legitimación del propio espectáculo).

La teatralidad cibernética provocó el entusiasmo de la parte del público que esperaba la reivindicación del tabasqueño. Acomodados los episodios de contabilidad internética para aparentar súbitas e inexplicables concesiones justicieras, en su tramo final se dirigían a los resultados prestablecidos. A la hora de cerrar esta columna (0.30 horas del jueves) Feli-Pillo Cibernético se encaminaba a la recuperación de la corona de mapachería electrónica. La ventaja de AMLO, sostenida a lo largo del día, entraba en una fase de previsto decaimiento que, al igual que con las estadísticas del PREP, son todo un reto matemático.

Por lo pronto, el simple cumplimiento de una fase menor y restringida del escrutinio electoral (el conteo de actas en cada uno de los distritos federales) sirvió de plataforma para que las complicidades amotinadas actualizaran encomiendas de linchamiento contra el lopezobradorismo (en especial, algunos conductores de noticieros electrónicos y otros histéricos y derechistas moldeadores de opinión).

El fondo del debate sigue firme: el cotejo de actas distritales suele ser un protocolo capaz de detectar errores procesales, pero que no va al fondo del litigio, como sucedería si se revisara y contara voto por voto. Las sesiones de ayer sólo sirven para apuntalar el discurso de institucionalidades y legalidades que pretenden defender el triunfo de Calderón, así fuera "por un voto", haciendo abstracción de las evidencias de fraude electoral que por todo el país han brotado.

El juego con fuego que han desarrollado los genios de las computadoras (los nuevos "científicos") sólo ha fortalecido la convicción social de que sí hubo fraude electoral cibernético y que, amparándose en una idea de la legalidad, que llevaría a la represión de quienes no la respetaran, creen posible instalar a Feli-Pillo Cibernético en las cabañas martísticas de Los Pinos.

También debe apuntarse que el debilitamiento del futuro presidente es un triunfo de los intereses dominantes. Sea quien sea el ganador del show electoral montado para aparentar competencia, los libretistas de elite le habrán impuesto la etiqueta de los tercios electorales, una forma de deslegitimación original que busca atar al eventual triunfador al arbitrio de los jueces supremos, que serían los empresarios, las televisoras y los grupos políticos del foxismo-salinismo. Todo apuntaba esta madrugada a que la reducción del margen de ventaja de AMLO acabará en el anuncio de una "reñida" pero irreversible victoria de Calderón. También cabría la posibilidad de una maquinación extrema que declarara un virtual empate, y con ello impulsara la idea de la anulación de las elecciones (así López Obrador tendría que esperar más de un año para nuevos comicios, y tendría un periodo recortado de gobierno), e incluso que, en el colmo de las perversiones, se le dejara con una victoria ínfima que abriera el camino a presiones de sus adversarios para tratar de forzarlo a declinar, "por el bien de México".

Pasando a una variante del tema cibernético-electoral, el periodista Juan Bautista Aguilar viajaba el 2 de julio, alrededor de las 3 de la tarde, en un taxi cuyo conductor comenzó a platicar de los comicios y, en especial, de que él conocía a los programadores de Hildebrando, quienes habían usado un algoritmo para que los resultados siempre expresaran una delantera de Calderón. Sin que el chofer se diera cuenta, Bautista grabó parte de la conversación mediante una pequeña cámara de video que llevaba en su mochila.

El taxista aseguró que había estudiado (sin terminar) administración de empresas en la UNAM, y que un compañero de carrera había entrado a trabajar dos años atrás en Hildebrando y lo había buscado para que lo "aconsejara". Según la grabación, el amigo presuntamente miembro de Hildebrando le habló de un algoritmo que serviría para inhibir la ventaja del contrario.

En diversos momentos de la grabación aparecen los siguientes diálogos, que son una selección del material completo que está disponible en www.juliohernandez.com.mx:

Bautista: -¿Cómo va a aparecer el recuento del PREP?

Taxista: -Como que va ganando este señor siempre. Le digo, eso es lo que él me comentó. Ahora que, siempre éstos van a salir, siempre, siempre van adelante.

Bautista: -¿Y cómo, por qué porcentaje? ¿Dos a uno, tres a uno? ¿Cómo es esa tabla de algoritmo?

Taxista: -Estamos hablando de dos a uno. Por eso le digo que no es tanto, ¿cómo se llama?, tan marcado y tan comprobable, como dicen...

Bautista: -Pues qué situación tan delicada (la del fraude cibernético), ¿no?

Taxista: -No, pues, ya ve. En la noche, en la noche... usted lo va a ver.

Bautista: -Y ¿qué dice su cuate, están operando ese programa desde hace un buen rato?

Taxista: -Sí, sí. Desde hace un ratote. Desde que hubo el cambio de los nuevos, que les llaman los nuevos consejeros del IFE (...) Desde entonces el programa está ahí dentro. Está desde un principio, usted ve que le hacen (inaudible), hacen simulaciones.

Bautista: -No, pues si es así, se va a armar en grande.

Taxista: -No, no. Por eso le digo, que no es comprobable.

El taxista (quien, desde luego, pudo haber mentido) se llama -según la toma de video que Bautista hizo en su tarjeta de identificación- José Manuel Sánchez Fregoso, y el número de la placa de su unidad es L 22972. Juan Bautista -quien durante años trabajó como camarógrafo en programas de Javier Solórzano y Carmen Aristegui- está dispuesto a comparecer ante la autoridad que sea necesario para presentar su video y confirmar los datos allí expresados.

Y, mientras diversos sitios de Internet caían ayer a causa del exceso de consultas, ¡hasta mañana!

Fax: 55 45 04 73 * [email protected]

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.