Usted está aquí: viernes 21 de julio de 2006 Política Clausura simbólica de Mexicana de Aviación

Estudiantes y artistas critican a Gastón Azcárraga

Clausura simbólica de Mexicana de Aviación

JAIME AVILES

Ampliar la imagen Protesta de organizaciones ciudadanas frente a la torre de la compañía Mexicana de Aviación Foto: María Meléndrez Parada

Alrededor de 150 integrantes de organizaciones ciudadanas no partidistas envolvieron ayer la base de la torre de Mexicana de Aviación con papel de estraza y cerraron durante varias horas una oficina de boletos contigua, en demanda de que los resultados electorales del 2 de julio se vuelvan a contar ''voto por voto y casilla por casilla'' en todo el país.

Así prosiguió por tercer día consecutivo en la ciudad de México la resistencia civil pacífica convocada por Andrés Manuel López Obrador. La desobediencia estalló el martes al amanecer, con un acto que paralizó las oficinas del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), y continuó el miércoles cuando la escritora Elena Poniatowska tomó el Centro Banamex.

Jóvenes universitarios y artistas escénicos en su gran mayoría, los manifestantes de ayer iniciaron la protesta a las 7:30 de la mañana y la terminaron poco antes de la una de la tarde, lapso en el cual no cesaron de bailar y cantar para exigir que todo el peso de la ley recaiga sobre el magnate hotelero Gastón Azcárraga, flamante propietario de Mexicana de Aviación, por haber violado las leyes electorales vigentes al apoyar al candidato panista, Felipe Calderón.

Cuando el mitin estaba a punto de finalizar, empleados de la aerolínea entregaron discretamente dos mantelitos del comedor del personal, ubicado dentro de la torre, sobre los cuales el empresario, explicaron, mandó imprimir propaganda política del Partido Acción Nacional con retratos de Calderón y del ex priísta y ex perredista Demetrio Sodi, ''que nos daban asco, pues teníamos que verlos cuando tomábamos nuetros alimentos".

El artículo 48 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales prohíbe que los particulares hagan proselitismo en favor o en contra de cualquier candidato, y Gastón Azcárraga, subrayaron los activistas, ''financió la campaña de odio y miedo de Calderón en contra de López Obrador, por lo que debe ser juzgado como delincuente electoral''.

Azcárraga, añadieron, ''es presidente del Grupo Posadas y dueño de las cadenas Fiesta Americana y Fiesta Inn, así como de grandes desarrollos turísticos en Sudamérica''. El presidente Vicente Fox, continuaron, ''le vendió Mexicana a precio de ganga a cambio de que ayudara a Calderón a llegar a la Presidencia, por lo que también debe ser juzgado como delincuente de cuello blanco, porque traficó con influencias''.

Como ocurrió el martes en el CCE y el miércoles en el Centro Banamex, ayer también los empleados de mayores ingresos reprobaron la acción ciudadana, mientras los más modestos expresaban sus simpatías con gestos casi imperceptibles, sonriendo, por ejemplo, cuando los activistas cantaban estrofas del rap del Peje: No queremos a Fecal/en Palacio Nacional/queremos a Obrador/porque es el triunfador.

Los manifestantes distribuyeron un panfleto firmado por el Grupo Ciudadano Resistencia Creativa, que se dio a conocer el martes frente al CCE, pero otros dijeron ser miembros del Frente Universitario de Apoyo Crítico a López Obrador, la Red Nacional de Jóvenes con AMLO, la Iniciativa Flor y Canto, la Logia Independencia Número 2 y el Plan de los 3 Puntos.

Hombres y mujeres concluyeron la protesta cantando y bailando, mientras un músico virtuoso tocaba el acordeón y numerosas personas de la tercera edad batían palmas al compás del alegre ritmo que de pronto adquiría armonías tétricas para recitar entre aullidos de ultratumba: Despacio/de prisa/Televisa te idiotiza.

 
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