Número 122 | Jueves 7 de septiembre de 2006
Director fundador: CARLOS PAYAN VELVER
Directora general: CARMEN LIRA SAADE
Director: Alejandro Brito Lemus

Rosa de cantera

Por Joaquín Hurtado

Días enrarecidos que saben a ricino, que huelen a pólvora quemada. Días en que uno mira al otro con desconfianza, con miedo, con rencor. Días en que basta pasar los dedos sobre la piel pelada del día para recibir a cambio una rabiosa mordida.

Días en que el cuerpo del país está en vilo. Desde que amanece siempre temiendo lo peor, medrosos de que el espinazo del azul cielo mexicano nos caiga hecho añicos.

He venido a Zacatecas con la luna llena de agosto. Atiendo la invitación de Amalia García y del equipo que conforma la Comisión para la Integración Social de las Personas con Discapacidad. En el Foro Nacional para Prevenir y Erradicar la Discriminación me vuelve un poco la alegría al cuerpo. Siento una paz interna como rabia en ciernes.

Con mi mano crispada firmo la carta de las organizaciones presentes para revertir la amenaza de la censura de la extrema derecha contra los libros de texto de secundaria.
Gilberto Rincón reanima en mi corazón y en mi conciencia lo que de tanto oírlo y repetirlo me parecía discurso hueco: la lucha contra la discriminación y el estigma es la pelea contra la miseria que lastima, que enferma, que mata.

Esta batalla es la que me ha dado en lo personal y como colectivo la oportunidad de sobrevivir a un diagnóstico fatal. Le echamos cuentas mi esposa y yo: casi veinte años de supervivencia al VIH. Muchos han quedado en la vereda. Los privilegiados aún hacemos planes para el mañana.
Y en honor a esos sueños le decimos a Guillermo Núñez que tenemos que hacer ese viaje siempre pospuesto por la península de Baja California. Ya está: en diciembre partiremos de Hermosillo hacia el encuentro con la feraz luz del desierto. Cosas así le dan sentido al filo atroz del presente que nos agobia.

Guillermo nos organiza una velada de despedida junto a su pareja. Nos sentimos bellos, saludables y encendidos en esta fría noche del altiplano. Para eso Zacatecas, la rosa de cantera, se pinta sola. Brindamos y nos abrazamos y nos vamos a dormir sabiendo que la inteligencia es otra forma de la belleza de los cuerpos. Es con la lucidez y la alegría del erotismo como combatiremos a los enemigos del placer y la razón que andan quemando libros. Los fascistas no pasarán.