Usted está aquí: sábado 30 de septiembre de 2006 Mundo Influidos por el enemigo, los críticos a la guerra contra el terrorismo: Bush

Está fuera de contacto con la realidad, dice la legisladora demócrata Nancy Pelosi

Influidos por el enemigo, los críticos a la guerra contra el terrorismo: Bush

Irak no es la razón de la conflagración; nos atacan porque odian todo lo que significa EU, asegura

Celebra el presidente la autorización legislativa del programa de espionaje telefónico y por Internet

AFP, REUTERS Y DPA

Ampliar la imagen El presidente Bush es felicitado por personal militar después de una alocución en un hotel de Washington sobre su "guerra contra el terrorismo" Foto: Ap

Washington, 29 de septiembre. Un día después de que el Senado estadunidense aprobó una ley que legaliza la tortura de "enemigos" extranjeros, el presidente George W. Bush acusó a los críticos de su guerra contra el terror de estar influidos por la "propaganda del enemigo", al pronunciar un discurso en esta capital en que celebró el avance de la legislación que personalmente promovió en el Capitolio, en las últimas semanas.

En una respuesta inmediata, la lideresa demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, afirmó que el mandatario pintó un "escenario color de rosa", y prueba que está "fuera de contacto con la realidad" porque su discurso refleja que se halla en estado de "negación sobre lo que sucede en la guerra contra el terror".

Pelosi, quien convocó a conferencia de prensa especial para responder a Bush, acusó al presidente de "fallar" en la "razón, preparación y estrategia" de la lucha contra la red de organizaciones que considera terroristas.

En su discurso, pronunciado a sólo seis semanas de las elecciones legislativas "intermedias", Bush dijo que los críticos de su guerra manejan argumentos que están "influidos por la propaganda del enemigo, en el sentido de que los terroristas nos atacan porque los estamos provocando".

Según Bush, "Irak no es la razón por la que los terroristas están en guerra contra nosotros. Están en guerra porque odian todo lo que Estados Unidos significa".

Además de su victoria en el Senado -donde ayer fue aprobada la Ley de Comisiones Militares-, Bush aludió en su discurso a otro triunfo del Ejecutivo en el Poder Legislativo, específicamente en la Cámara baja, donde fue autorizado el programa de espionaje telefónico e intervención de correos electrónicos personales sin necesidad de orden judicial.

Hacia el Estado policial

La noche del jueves, la Cámara de Representantes, controlada por los correligionarios republicanos de Bush -al igual que el Senado-, aprobó reformas y adiciones a la Ley de Vigilancia e Inteligencia sobre el Extranjero, con 232 votos en favor y 191 en contra. Después de acalorado debate, 18 demócratas se sumaron a los 214 que integran la fracción mayoritaria.

En los próximos días, el proyecto legislativo pasará al Senado para su revisión, pero en la Cámara alta aún no existe consenso sobre su viabilidad, debido a que la constitucionalidad de la nueva normativa ha sido puesta en duda.

Poco después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, Bush ordenó secretamente a la Agencia de Seguridad Nacional monitorear las llamadas telefónicas internacionales y los correos electrónicos de estadunidenses con extranjeros, sin orden judicial, en el contexto general de la "guerra contra el terror" pero sin marco legal que lo respaldara.

La prensa estadunidense reveló en diciembre pasado la existencia de esa práctica, lo que provocó críticas en la opinión pública por la violación de la ley original sobre la materia, vigente desde 1978, que requiere órdenes judiciales específicas para la realización de espionaje electrónico dentro de Estados Unidos.

Un juez federal declaró inconstitucional ese programa el mes pasado y Bush apeló, por lo que expertos en temas jurídicos esperan que el caso termine en la Corte Suprema de Estados Unidos.

La inminente legalidad de la tortura contra "combatientes enemigos ilegales" -que incluye una redefinición de los Convenios de Ginebra para denominarla "técnicas de interrogación"-, fue criticada por Manfred Nowak, relator especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre ese tipo de prácticas.

"Me temo que con la nueva ley los métodos de interrogatorios no cambiarán realmente. Bush ha hablado de que continuarán los métodos severos y esa es mi preocupación", dijo en Ginebra el profesor austriaco de derecho, al comentar que la nueva legislación estadunidense está al margen de la ley internacional en la materia.

"El proyecto no toma en cuenta críticas sustanciales de nuestro lado. No es la señal que esperaba del gobierno de Estados Unidos y del Congreso", manifestó, en alusión a críticas de la ONU y organizaciones no gubernamentales defensoras de derechos humanos.

Algunas de las prácticas que Washington ha realizado en los últimos cinco años, a raíz de los ataques del 11 de septiembre de 2001, incluye el plagio de "combatientes enemigos", su traslado secreto de un país a otro, su encierro en cárceles clandestinas y en la base militar estadunidense de Guantánamo, donde a presuntos milicianos islamitas se ha privado del sueño, según testimonio de quienes han logrado salir.

"Esta gente debe tener derecho a juicio justo ante una corte independiente, que en principio tiene que ser un tribunal ordinario. Estoy particularmente preocupado porque con la ley los derechos de habeas corpus (amparo) están más reducidos", dijo Nowak.

Dentro de Estados Unidos, una de las voces que se sumó a las críticas a la nueva ley fue Human Rights Watch, con sede en la ciudad de Nueva York.

"Esta es una de las legislaciones más retrógradas de la historia de Estados Unidos", afirmó Reed Brody, consejero legal de la organización humanitaria.

En este contexto, Al Qaeda difundió por Internet un video en que el subjefe de la red, Ayman Zawahiri, afirma que Bush fracasó en su intento por acabar con sus células, llamó a los islamitas del mundo a combatir a los cruzados de la ONU en Darfur y consideró "charlatán" al papa Benedicto XVI por sus comentarios sobre el Islam, la semana antepasada.

"El verdugo responsable del derramamiento de sangre de los musulmanes, George W. Bush, anunció que disponía de prisiones secretas y está capturando a los líderes más peligrosos de Al Qaeda, entre ellos al hermano guerrero Jaled Cheij Mohammed (número tres de la red y cerebro de los atentados de 2001)", señaló el brazo derecho de Osama Bin Laden, en alusión a la detención ocurrida hace tres años y medio.

"Yo pregunto a ese fracasado y mentiroso: ¿Cuáles dirigentes de Al Qaeda han arrestado o matado gracias a informaciones obtenidas de Jaled Cheij Mohammed (en la actualidad en Guantánamo)?", dijo Zawahiri, cuya última aparición fue con motivo del quinto aniversario de los ataques contra Nueva York y Washington.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.