Por unanimidad exige a George W. Bush rectificar la decisión
Se une el Senado al rechazo nacional a la construcción del muro fronterizo
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Incrementar los elementos de la Patrulla Fronteriza es una acción xenofóbica, argumentaron en el Senado mexicano
Foto: Notimex
El Senado de la República condenó enérgicamente la construcción del muro fronterizo y el uso de la tecnología militar por parte de Estados Unidos para vigilar y detener a los migrantes indocumentados en la frontera con México, por ser una medida xenofóbica que pone en peligro la vida y vulnera la dignidad humana.
Además, por unanimidad, el Senado suscribió la demanda hecha por distintos sectores de la sociedad mexicana al presidente George W. Bush, por haber promulgado la ley relativa a la construcción del muro que se contrapone a la protección de los derechos humanos, al espíritu de la justicia, de amistad y cooperación para resolver los problemas comunes.
Los senadores de todas las fuerzas políticas condenaron la decisión unilateral de Estados Unidos, en virtud de que, manifestaron, el fenómeno migratorio debe ser resuelto en el contexto de la relación y la cooperación bilateral.
Propusieron crear una comisión plural de legisladores que dé seguimiento y proponga -a la directiva del Senado- la agenda de los temas fundamentales y la estrategia a seguir, a fin de impulsar una reforma migratoria integral.
Originalmente dicho punto de acuerdo fue impulsado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), pero todas las fuerzas políticas se sumaron a él, por lo cual se presentó como de consenso entre los legisladores.
Por el Partido Acción Nacional (PAN), Luis Alberto Villarreal dijo que "ante un embate de esta magnitud, desde este Senado convocamos a todas y todos los mexicanos a rechazar en una sola voz este reforzamiento de seguridad de la frontera, que paradójicamente provocará más inseguridad, más violencia y más odio".
La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, la perredista Rosario Ibarra de Piedra, señaló que el problema migratorio tiene muchos años y que "ningún mexicano hubiera emigrado si aquí hubieran las políticas de empleo suficientes, si no hubiese ese abandono al campo, si no se luchara a brazo partido por la represión contra los sindicatos y contra quienes luchan por sus derechos".
En tanto, por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), la senadora Amira Griselda Gómez resaltó en tribuna que "de ninguna manera los legisladores podemos ni debemos ser omisos. No permitiremos ser tratados como criminales. Reconocemos que el tema migratorio se ha polarizado, porque los diversos grupos políticos estadunidenses han encontrado en los migrantes una bandera para atraer votos de cara a las elecciones de noviembre, en las que se renovará toda la Cámara de Representantes y un tercio del Senado".