Usted está aquí: miércoles 11 de octubre de 2006 Capital El Opus Dei invade Insurgentes Mixcoac

El Opus Dei invade Insurgentes Mixcoac

La Universidad Panamericana transforma en campus la colonia sin respetar uso de suelo: colonos

BERTHA TERESA RAMIREZ/ I

Ampliar la imagen Arriba, croquis que muestra los predios de la Panamericana antes de 2005. Abajo, aspecto de lo que fue la calle Goya, ahora cerrada por esa institución educativa Foto: Luis Humberto González

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Cobijada por los gobiernos de Acción Nacional en el ámbito federal y delegacional en Benito Juárez, la Universidad Panamericana (UP), la cual tiene como preceptor moral al Opus Dei en México, avanza en una invasión hormiga para apropiarse de la colonia Insurgentes Mixcoac, acusa agrupación de vecinos.

Según la Asociación de Colonos Residentes de Insurgentes Mixcoac (ACRIM), de 2000 a 2005 la institución educativa incrementó de 12 a 40 el número de terrenos que posee en la zona.

El problema es que en los predios se han construido "aulas, infraestructura administrativa y estacionamientos, sin respetar los usos de suelo establecidos para la zona, los cuales tienen carácter habitacional", indicaron vecinos.

La expansión de la UP se tradujo en deterioro del entorno, principalmente por el incremento de la población flotante que invade diariamente la colonia: se obstaculizan entradas de domicilios, aumentó el tráfico vehicular, se cerraron calles para uso exclusivo de la universidad y se afectaron inmuebles colindantes.

Los abusos, advierte Rosa Ana Llantada, presidenta de la ACRIM, comenzaron desde 1997, cuando el entonces Departamento del Distrito Federal (DDF) le concedió a la UP un permiso administrativo revocable temporal (PART) para ocupar la calle Cerrada de Valencia, la cual fue cercada y utilizada para instalar un jardín.

Durante un recorrido con vecinos, Llantada mostró la calle limitada con una malla ciclónica cubierta de hiedra. Por una abertura mostró el jardín en el que la universidad "colocó mesas de terraza para tomar el té".

En "su voraz" intento -afirmaron los colonos-, la institución adquirió predios que eran propiedad del gobierno federal, como el ubicado en la calle de Goya número 35, en el cual por muchos años estuvo el Centro de Transfusión Sanguínea. También compró un inmueble en la calle de Valencia, donde se ubicaba una secundaria pública, además de los que ocupan la casa del Obraje, construcción que data del siglo XVIII, así como la casa que perteneció al escritor José Joaquín Fernández de Lizardi y la Plaza Jáuregui.

"La universidad del Opus Dei se quiere apoderar de la colonia para expandir sus instalaciones y convertir esto en un campus, aunque la zona no sea el lugar indicado para ello", añadió Llantada.

Una prueba de que la universidad se promueve como campus, sostienen colonos, es la descripción que ese centro de estudios hace en la edición de su revista Istmo, en la que manifiesta ser ''un oasis en Mixcoac''.

"Conoce las nuevas instalaciones de tu universidad tras la remodelación del antiguo Centro de Transfusión Sanguínea, ubicadas en la calle de Goya, los nuevos jardines, aulas, área de postgrados y cabinas de los diferentes talleres de comunicación", muestra la publicación en su edición de mayo-junio del 2005.

La presidenta de la ACRIM dijo que los vecinos no están contra el progreso, "pero sí contra lo que emana del tráfico de influencias".

Si bien la responsabilidad de hacer las verificaciones correspondientes al uso de suelo en esa colonia es de la delegación Benito Juárez, "hacer que esa autoridad cumpla con su responsabilidad es poco menos que imposible, porque el ex director jurídico y de gobierno, José Luis Herrera y Sánchez, dio muestras concretas de favoritismo hacia el Opus Dei", afirmó.

Según la representante vecinal, el ex jefe delegacional de Benito Juárez Fadlala Akabani no hizo nada al respecto porque Herrera y Sánchez "fue una imposición de El Yunque".

La indignación vecinal es por toda la mentira "de una organización que no da el rostro (se refiere al Opus Dei), que se esconde bajo el rubro de un establecimiento mercantil que está catalogado, y aunque la Subdirección de Establecimientos Mercantiles del GDF conoce perfectamente este caso, reiteradamente la delegación no se somete a la ley", añadió Llantada.

Lamentablemente, dijo, los directivos de la UP han dividido a los residentes, aprovechándose de que en en la colonia existen personas que viven de ese centro de estudios, ya sea porque trabajan en el área administrativa o en la docencia, porque les ha otorgado becas a sus hijos o porque la universidad hace arreglos a sus casas.

"Hay una parte frágil de la sociedad en la colonia, una parte vulnerable a las dádivas; de ahí que surgiera un grupo legalmente constituido para oponerse frontalmente a los abusos y defender el estado de derecho que corresponde a los vecinos", indicó.

"La UP ha estado cobijada tanto por el primer titular panista de la demarcación, José Espina von Roehrich, como por el saliente Fadlala Akabani; si con el primero se dio el arranque, su florecimiento y consolidación se dio con el otro", puntualizó.

 
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