Una subcomisión viajará a la capital oaxaqueña
Decide el Senado volver a analizar si procede desaparecer poderes
El Senado de la República decidió volver a analizar si procede la desaparición de poderes en el estado de Oaxaca, luego de recibir a los integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y a los dirigentes de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), quienes exigieron a los legisladores cumplir con su responsabilidad y analicen las circunstancias que privan en la entidad para no provocar ''un baño de sangre''.
Para determinar si se declara la desaparición de poderes, se acordó nombrar una subcomisión integrada por los senadores Tomás Torres, del Partido de la Revolución Democrática (PRD); Ramiro Hernández, del Revolucionario Institucional (PRI), y Alejandro González, de Acción Nacional (PAN), quienes visitarán el estado a partir de hoy, y hasta el viernes, con el fin de conocer in situ la situación que priva en Oaxaca. Además, recibirán información en la ciudad de México. Todo ello, para elaborar el fin de semana un dictamen que se presente a la Comisión de Gobernación el lunes, y al pleno el martes próximo.
Con esta decisión, el dictamen sobre Oaxaca -que heredó de la anterior legislatura- fue rechazado en los hechos, ya que se elaborará uno nuevo tomando en cuenta los elementos que se han generado de agosto a la fecha.
Entre éstos destacan la pérdida de vidas humanas, el deterioro económico de la capital oaxaqueña y el retraso en el inicio del ciclo escolar. Cabe destacar que el anterior dictamen consideraba que no procedía la desaparición de poderes.
El perredista Ricardo Monreal Avila mostró cautela frente a los acuerdos logrados en la citada comisión, ya que existe la posibilidad de que el Senado ratifique que no hay condiciones para declarar la desaparición de poderes. ''No echamos campanas al vuelo ni estamos desbordados de optimismo. Lo que hoy se aprobó es el inicio de los trabajos, pero lo importante es que no se aprobó el (anterior) dictamen que iba en sentido negativo y que se elaborará uno nuevo considerando la situación actual'', subrayó el ex gobernador de Zacatecas.
Al concluir la reunión vespertina de la Comisión de Gobernación -donde se aprobó volver a analizar la situación oaxaqueña-, agregó que ninguno de los integrantes de esta instancia aprobó el dictamen heredado, pues todos consideraron necesario sumar los nuevos acontecimientos. Pero ello no implica que el PRI y el PAN vayan a votar en favor de la desaparición, subrayó, luego de resaltar que los panistas están divididos sobre lo que deben hacer con respecto a la salida del gobernador Ulises Ruiz Ortiz.
A su vez, el dirigente del PAN, Manuel Espino Barrientos, llegó hasta la casona de Xicoténcatl, donde se reunió con los legisladores de su partido para abordar el caso Oaxaca. Trascendió que el jefe nacional del blanquiazul trató de convencer a los disidentes de que lo mejor para su partido es que no se declare la desaparición de poderes. Inclusive, en breve entrevista consideró que esa medida ''no es la más conveniente''.
Previo a la reunión vespertina de la Comisión de Gobernación, los líderes de las principales fuerzas políticas cabildearon la posible salida al conflicto oaxaqueño. En medio del pleno senatorial, el panista Felipe González, el priísta Jesús Murillo Karam y el perredista Ricardo Monreal tejieron el acuerdo con el que pretenden dar respuesta a los reclamos que la APPO y los maestros les hicieron por la mañana.
En este contexto, el presidente de la Junta de Coordinación Política, el panista Santiago Creel Miranda, comentó la necesidad elaborar un nuevo dictamen sobre la eventual desaparición de poderes en la entidad oaxaqueña, debido a que el anterior no contempló los hechos relevantes que acontecieron de agosto a octubre.
El líder de los senadores del blanquiazul advirtió que los sucesos registrados en los últimos dos meses tendrán que ser valorados a la luz de la Constitución y la ley reglamentaria del artículo 75 fracción 5, referido a la desaparición de poderes.
De manera coincidente, Murillo Karam declaró que la comisión empezará a trabajar para actualizar el proyecto de dictamen. Con ese fin se integró la subcomisión que viajará a Oaxaca y que en el menor tiempo posible deberá presentar su fallo.
-¿Analizará si procede o no la desaparición de poderes?
-Desde luego que sí. Según la actualización, volveremos a ponerlo a consideración. Vamos a escuchar a todo el mundo. El asunto urge. Es cuestión de días.
Por la mañana, alrededor de 15 dirigentes de la APPO y de la sección 22 se reunieron con la directiva de la Comisión de Gobernación, ante la cual ratificaron su petición para desaparecer poderes en Oaxaca y llamaron a los senadores a asumir su responsabilidad. Dejaron en claro que retirarán los campamentos hasta que salga el gobernador Ulises Ruiz.
Los oaxaqueños dijeron creer en las instituciones y por ello recurren al Senado de la República. Pero advirtieron que si los legisladores no responden a sus demandas, serán los responsables del baño de sangre que se puede presentar en la entidad.
Enrique Rueda Pacheco, dirigente de la sección 22 del SNTE, llamó la atención sobre el hecho de que es necesario agregar nuevos elementos de juicio sobre lo que está pasando en Oaxaca. Con ello se refería a la muerte de personas en los últimos dos meses.
Los senadores, por su parte, se comprometieron a ser imparciales, a no ocultar los resultados de su trabajo, como ocurrió en el pasado, y a presentarlo al pleno a la brevedad posible.
Por otra parte, al filo del mediodía, el secretario de Gobernación, Carlos Abascal Carranza -entrevistado al término de la sesión solemne en el Senado de la República para entregar la medalla Belisario Domínguez al doctor Jesús Kumate-, destacó que es el Senado el que tiene que decidir sobre la situación de Oaxaca. Yo no puedo dar órdenes a esa cámara''.