Usted está aquí: martes 31 de octubre de 2006 Política Reprueban en Madrid y Barcelona el uso de la fuerza

Mexicanos y españoles unen voces contra la represión

Reprueban en Madrid y Barcelona el uso de la fuerza

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Ampliar la imagen Al menos 100 personas se manifestaron frente a la embajada de México en Madrid. Ciudadanos españoles y mexicanos llevaron pancartas y algunas banderas Foto: Armando Tejeda

Madrid, 30 de octubre. Con las consignas de "Gobierno mexicano, asesino", y "Oaxaca no es cuartel, fuera el Ejército de él", más de un centenar de personas se manifestaron hoy ante la embajada mexicana en esta capital y el consulado mexicano en Barcelona, en rechazo a la intervención de la Policía Federal Preventiva y la escalada represiva en ese estado y en demanda del respeto a los derechos humanos.

"Esta embajada está ensangrentada", corearon unas 100 personas que se congregaron frente a la legación mexicana en esta capital, en una concentración que transcurrió pacíficamente y en la que no sólo participaron ciudadanos mexicanos sino también españoles, con pancartas y banderas de México.

Entre los asistentes se encontraba la madre de un brigadista español en Oaxaca, de 25 años, quien se encuentra refugiado en una casa. La mujer, que prefirió guardar el anonimato ante posibles represalias contra su hijo, explicó: "Mi hijo está de cooperante y se ha ido a apoyar en lo que pudiera a la APPO, en representación de la Liga Mexicana por los Derechos Humanos, sin el ánimo de intervenir directamente en el conflicto. A mí me preocupa la situación de Oaxaca, aunque como madre quiero que a mi hijo no le pase nada, pues pienso en la madre del chaval que mataron el otro día y las de los desaparecidos. Eso es un drama y también que venzan al pueblo después de tantos meses de lucha. Por eso nosotros también tenemos cierta responsabilidad y debemos repudiar todo lo que está pasando y dejar de callarnos en Europa como cobardes".

A un costado de la puerta principal de la embajada, los manifestantes desplegaron una enorme pancarta con el lema: "Ni con tanques ni metralla. Oaxaca no se calla. Alto a la represión".

Milagros Hernández, responsable de Asuntos Sociales de Izquierda Unida (IU), explicó la preocupación de la coalición por la situación en Oaxaca y anunció la intención de la formación política de llevar esta cuestión ante el Congreso de los Diputados español, con el objetivo de que se envíe una comisión parlamentaria a Oaxaca para vigilar el cumplimiento de los derechos humanos. "Estamos intentando articular que Europa reaccione ante este conflicto, por eso nos solidarizamos con Oaxaca y con los profesores y ciudadanos que están sufriendo este conflicto. Esto lo hacemos porque creemos que México no se caracteriza por su apoyo a la democracia ni a los ciudadanos, como se puede comprobar ahora en el caso de Oaxaca, pero también en lo que está ocurriendo en Ciudad Juárez desde hace muchos años", señaló Hernández.

Mientras que Carlos Girbau, del Foro Social de Madrid, también presente en la concentración, añadió que "la situación es grave desde todos los puntos de vista, además de que ha sido la propia política y la cerrazón del gobierno mexicano lo que llevado a esta situación insostenible. Ahora la quieren resolver por la vía de la represión y la policía, fuera de todo orden y sentido y que viola cualquier noción de los derechos humanos y de los criterios democráticos. La cadena de represión puede alargarse en el tiempo, pues creemos que el gobierno de Fox sólo tiene la política de la represión y se niega a abrir una vía democrática en el país, que creemos que en este momento no existe en México".

En Barcelona acampan en el consulado

En Barcelona, la protesta consistió en una acampada en los jardines del consulado mexicano, donde unas 40 personas permanecieron durante dos horas de forma pacífica. El propio cónsul mexicano, Jaime García Amaral, molesto por la protesta, intentó conciliar posturas con los manifestantes, que se limitaron a entregar una carta de denuncia dirigida al mandatario mexicano, al que acusan de reprimir a la sociedad civil y de violentar los derechos humanos, como ya ocurrió en Atenco y Guadalajara. En la carta dirigida a Fox, los manifestantes señalaron que "la opción principal para la resolución del conflicto es la remoción de Ulises Ruiz Ortiz del cargo de gobernador del Estado". Además de exigir "el esclarecimiento y castigo a los responsables del secuestro y tortura de distintos miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), así como del asesinato de profesores y reporteros en la entidad".

De su lado, el canciller español, Miguel Angel Moratinos, se limitó a señalar que "nosotros esperamos que la situación de Oaxaca se resuelva positivamente y que vuelva el orden y la tranquilidad. Ayer hubo la intervención y esperamos que a partir de este momento todo se calme y vuelva el diálogo y que se estabilice rápidamente".

 
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