Usted está aquí: lunes 4 de diciembre de 2006 Sociedad y Justicia La arquidiócesis separa de su cargo a presunto cura pederasta

Acusa a policías de "inducirlo" a reconocer su culpa

La arquidiócesis separa de su cargo a presunto cura pederasta

SAUL MALDONADO

Durango, Dgo., 3 de diciembre. El sacerdote Enrique Vargas Duarte, detenido la semana pasada cuando presuntamente cometía "abuso deshonesto" en contra de un menor en el interior de un automóvil en Durango, sostuvo que fue "inducido" por los policías que lo aprehendieron a reconocer la culpabilidad en los hechos.

En un comunicado, la arquidiócesis de Durango informó que el cura acusado de pederastia compareció ante los jerarcas católicos, a quienes afirmó que sólo tocó la cabeza del menor sin ninguna intención.

La noche del pasado miércoles, elementos de la Policía Federal Preventiva realizaban un recorrido de vigilancia por la carretera Durango-Gómez Palacio, cuando a la altura del kilómetro 155 detectaron una camioneta tipo pick-up, color negra, estacionada.

Al momento que los uniformados se acercaron a la unidad, de ésta rápidamente descendió Vargas Duarte acomodándose el pantalón. En el interior de la camioneta se encontraba un menor de 12 años, también subiéndose el pantalón.

Luego de tres días de silencio, el arzobispo de Durango, Héctor González Martínez, dio a conocer la versión del párroco detenido, quien aseguró que mientras transitaba por la citada carretera, cerca de una gasolinera de la cabecera municipal de Cuencamé, sólo tocó la cabeza del menor sin ninguna provocación o gravedad.

"Tanto los agentes de la patrulla como personal de las oficinas (a donde fue remitido), lo trataron brusca y groseramente; y fue inducido a reconocer ante los medios de comunicación su culpabilidad", sostiene el comunicado firmado por el propio arzobispo.

Inclusive, señala que la madre del menor y el mismo adolescente niegan que haya sucedido lo que se le imputa al sacerdote.

Sin embargo, el prelado señaló que el párroco seguirá separado del sacerdocio en tanto él mismo esclarezca, en el orden civil, la acusación en su contra. La Iglesia católica estará al pendiente de la resolución final para proceder eclesialmente y conforme al Código de Derecho Canónico.

"No teniéndose confirmados todos los datos, siendo inclusive algunos contradictorios, y para que el párroco atienda y esclarezca su caso, seguirá relevado de la atención a sus compromisos parroquiales", concluye el comunicado de prensa.

 
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