Usted está aquí: viernes 8 de diciembre de 2006 Economía Al Buró de Crédito, todos los contribuyentes morosos: Carstens

El planteamiento ''no es terrorismo fiscal'', responde tras la comparecencia ante diputados

Al Buró de Crédito, todos los contribuyentes morosos: Carstens

''No hay presupuesto perfecto'', dice al cuestionarle el recorte en actividades culturales

Se intentará impulsar el mercado interno ''sin descomponer la macroeconomía'', indica

ROBERTO GONZALEZ, ROBERTO GARDUÑO, ENRIQUE MENDEZ

Ampliar la imagen Comparecencia del secretario de Hacienda, Agustín Carstens, ante diputados Foto: María Meléndrez Parada

En su primera presentación en la Cámara de Diputados como secretario de Hacienda, Agustín Carstens Carstens anunció este jueves la intención del gobierno de enviar al Buró de Crédito el reporte de todos los contribuyentes morosos, medida que en la práctica los excluiría de los circuitos de financiamiento. ''Eso no es terrorismo fiscal'', respondió apresurado el funcionario, cuando fue interrogado por la prensa sobre esta determinación del gobierno federal, propuesta en el paquete económico para 2007.

Carstens Carstens compareció ante integrantes de las comisiones de Hacienda y de Programación y Presupuesto de la Cámara de Diputados, en la primera sesión de trabajo del proceso de discusión y aprobación del paquete económico para 2007. Lo hizo con tono conciliador, con la afirmación reiterada de que encontraba más coincidencias que diferencias con los diferentes grupos parlamentarios, aun ante las posturas más críticas. También empleó su presentación formal para anunciar que en 2007 es altamente probable que existan ingresos extraordinarios a los previstos en el presupuesto, pero que de ocurrir serán guardados en fondos de estabilización para hacer reserva ante los años de ''vacas flacas''.

Corte a cultura, aumento a fuerzas armadas

En cambio, fue evasivo en responder dos preguntas directas, una de ellas del coordinador de los diputados del Partido de la Revolución Democrática, Javier González Garza, sobre la reducción de 2 mil millones de pesos en el presupuesto para las actividades culturales desde el sector público, cantidad similar a la que el gobierno federal propone elevar el gasto de las fuerzas armadas y de seguridad. Sobre este punto ni una sola palabra del titular de Hacienda.

Sí reconoció que el presupuesto propuesto a la Universidad Nacional Autónoma de México, una de las más importantes del mundo, se reducirá en 900 millones de pesos respecto al ejercido en 2006. ''En términos del gasto en UNAM sí hay una reducción, pero eso refleja fundamentalmente la aplicación del decreto de austeridad al presupuesto de la UNAM. Coincido en que siempre más gasto en educación es importante, eso no lo dudo, pero le estoy simplemente respondiendo cuál es la razón del decremento en ese presupuesto'', contestó el funcionario al diputado Alejandro Chanona, del partido Convergencia, quien lo interrogó sobre la reducción al gasto a la Universidad Nacional.

El secretario de Hacienda afirmó que ''no hay presupuesto perfecto''. Frente a al expectativa de un menor crecimiento en Estados Unidos, destino de 85 por ciento de las exportaciones mexicanas, y un menor ingreso petrolero, añadió, la opción que plantea el nuevo gobierno es impulsar el mercado interno, ''sin descomponer la macroeconomía''. El estímulo, abundó, se hará a través de la construcción de vivienda, el apoyo a pequeñas y medianas empresas, y en el sector turismo, así como en la construcción de infraestructura, no a través de partidas del presupuesto federal sino con financiamiento de la banca de desarrollo.

La otra vertiente del presupuesto que defendió Carstens, que de hecho planteó como innovación con respecto a pasados ejercicios, fue la simplificación en el pago de impuestos y el combate a la evasión y elusión fiscales.

Actualmente, informó, la Secretaría de Hacienda tiene créditos fiscales por 550 mil millones de pesos, casi 6 por ciento del producto interno bruto. Un porcentaje ''altísimo se juzga incobrable ya por los años que tiene, por los recargos. Esto implica a más de 2.2 millones de contribuyentes''.

El nuevo gobierno, anticipó, busca con una propuesta de condonación de deudas fiscales ­siempre que no estén en litigio­ reconocer la incobrabilidad y dar oportunidad a los contribuyentes de regularizar su situación ante el fisco. Esta suerte de amnistía, aunque no utilizó ese término, estaría vigente a lo largo de 2007. En 2008 comenzarían los problemas para los morosos, por vías no utilizadas hasta ahora, como su inscripción en el Buró de Crédito.

El Buró de Crédito es una sociedad de información crediticia, donde se registra con puntualidad el historial de comportamiento de pago de una persona o empresa. Actualmente es utilizado por bancos, empresas de telefonía, cadenas de tiendas y empresas que financian créditos automotrices. Si un solicitante tiene un registro negativo en el buró, su posiblidad de obtener crédito es mínima.

Carstens planteó: ''a partir de 2008, toda la información de morosos o de faltantes con sus obligaciones con el fisco se reportarían al Buró de Crédito. Esto tiene un incentivo muy claro de regularizar, de permitir que la gente tenga una limpieza en su relación con el fisco y no genera, pensamos, incentivos perversos''.

Paquete económico recesivo

Para algunos grupos parlamentarios, como el de Convergencia y el del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el paquete económico y en específico el Proyecto de presupuesto de egresos de la Federación 2007 planteados por el Ejecutivo tienen un marcado carácter recesivo, que no atiende necesidades básicas del país como la de mayor crecimiento, generación de empleo y combate a la pobreza.

''No vamos a aprobar ese presupuesto'', afirmó González Garza, coordinador de la fracción parlamentaria del PRD. ''El paquete económico no nos gusta, no satisface. No nos sorprendemos, es la misma receta que viene desde hace tiempo. Usted ha sido parte de estos equipos'', dijo al funcionario federal, quien fue subsecretario de Hacienda en el gobierno anterior. Resulta sorprendente, añadió el legislador, que después de tantas promesas de campaña y de la existencia de un verdadero debate nacional ''se decida no proponer nada''.

Cuestionó que los recursos a educación no crezcan en la propuesta para 2007, respecto a 2006. ''Existen áreas de gran importancia para el país como son las instituciones del sector cultura, el sector cultura desaparece, o los institutos de investigación en ciencia, los cuales se vuelven a descuidar. Estamos en ciencia debajo de 0.3 por ciento del PIB, cuando hay aprobaciones para llegar a uno por ciento desde hace seis años, y seguimos disminuyendo'', planteó González Garza al titular de Hacienda.

La Jornada publicó este jueves que el presupuesto a las instancias culturales se reduce a propuesta del nuevo gobierno en 2 mil millones de pesos en 2007, respecto al gasto ejercido en 2006. El recorte afectará áreas y proyectos sustantivos del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, de los institutos nacionales de Antropología e Historia, de Bellas Artes, el Mexicano de Cinematografía, las compañías de danza, así como a los canales Once y 22 de televisión.

Carstens, en su respuesta a los cuestionamientos del coordinador de la banca perredista, la segunda en número en la Cámara de Diputados, comentó: ''pienso que hay muchas más coincidencias, yo pienso que muchas de sus preocupaciones las compartimos y creo que muchas están reflejadas en lo que estamos presentando''.

Dijo que de acuerdo con las posibilidades de gasto, en un presupuesto que, aseguró, tiene un ''margen que se ha venido achicando'', las asignaciones propuestas por el Ejecutivo a los diferentes renglones reflejan los objetivos de abatimiento de la pobreza, creación de empleo y crecimiento que persigue el gobierno.

En otra parte de la comparecencia, Carstens mencionó que el nuevo gobierno considera acciones concretas en el paquete económico para estimular el crecimiento económico y apoyar a las personas de menores ingresos. Enumeró: una partida de 3 mil millones de pesos para financiar vivienda a personas pobres; subsidiar el consumo de energía a 2.4 millones de familias de bajo ingreso, y un programa de estímulos fiscales a empresarios para un programa de primer empleo a jóvenes, que pretende generar 150 mil plazas.

 
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