Autorizan diputados recuento parcial de votos en Italia
Roma, 14 de diciembre. Ocho días después que el Senado de Italia autorizó contar nuevamente los votos en blanco, nulos y cuestionados, la Cámara de Diputados decidió este jueves verificar el conteo de cerca de cuatro millones de papeletas empleadas en las elecciones legislativas de abril pasado.
La decisión de volver a contar parte de los votos fue tomada por todos los miembros de una comisión parlamentaria mixta y atañe las papeletas de 10 por ciento de las mesas electorales para la Cámara de Diputados.
Los resultados de los comicios legislativos en la Cámara de Diputados y en el Senado fueron denunciados por el perdedor de las elecciones, el magnate de las comunicaciones Silvio Berlusconi, quien fue derrotado por estrecho margen.
Para el también ex primer ministro conservador hubo "fraude" por parte de la izquierda, que obtuvo la mayoría de los votos en las dos ramas del Parlamento.
A finales de noviembre un documental realizado por Enrico Deaglio, director de la revista Diario, y Beppe Cremagnani, periodista independiente, acusaba al ex primer ministro Berlusconi de fraude electoral fallido.
El filme, que lleva el título ¡Maten a la democracia!, narra lo que ocurrió la noche del 10 abril pasado cuando la aparente y cómoda victoria de la coalición de izquierda fue puesta en entredicho por el enorme e inesperado avance de última hora de la coalición de centroderecha.
Hace una semana la comisión parlamentaria del Senado para la verificación de los escrutinios autorizó un nuevo conteo de los votos en blanco, nulos y cuestionados.
La revisión de los votos para el Senado concluirá en marzo de 2007, mientras que los de la Cámara de Diputados durará al menos hasta julio del mismo año.
La medida fue elogiada también por los políticos de centro izquierda, quienes consideran que una revisión sólo podrá confirmar la victoria.
El clima de confusión total vivido por Italia tras las elecciones, en las que un puñado de votos (24 mil) determinaron la estrecha victoria de la coalición de centroizquierda, ha marcado los primeros meses de gobierno de Romano Prodi.