Usted está aquí: miércoles 24 de enero de 2007 Capital Clausuran ex fábrica en Tlalpan; se realizaban obras de demolición sin aval

Autoridades inspeccionaron el inmueble, tras queja de colonos de La Fama

Clausuran ex fábrica en Tlalpan; se realizaban obras de demolición sin aval

El edificio, declarado patrimonio histórico, operaba como bodega de supermercado

ROCIO GONZALEZ ALVARADO

Ampliar la imagen La ex fábrica de hilados y tejidos La Fama Montañesa, clausurada ayer por autoridades delegacionales de Tlalpan

Ampliar la imagen La planta textilera, una de las más antiguas en México, fue decretada como monumento histórico el 5 de diciembre de 1986, cuando se decidió proteger el centro de Tlalpan y los 57 edificios con valor arquitectónico que alberga en un perímetro de 45 manzanas

Autoridades delegacionales de Tlalpan colocaron sellos de clausura en el inmueble de la ex fábrica de hilados y tejidos La Fama Montañesa tras labores de supervisión en las que se confirmó que se realizaban obras de demolición sin permisos.

El director general del área de Jurídico y Gobierno, Jorge Pérez Rodríguez, explicó que como cualquier otro inmueble, independientemente de su estatus como patrimonio histórico, los responsables de la propiedad deben contar con permiso para realizar algún cambio en la instalación, lo que se incumplió en este caso.

En entrevista, precisó que a partir de la denuncia vecinal que advirtió sobre el inicio de trabajos de demolición en el inmueble ubicado en la calle La Fama número 1, se procedió a realizar la supervisión correspondiente.

Por la mañana un grupo de verificadores comprobó que dentro del edificio se realizaban trabajos de demolición en por lo menos 350 metros en el área de coneras, donde se ubicaba antiguamente el taller en el que acomodaban los hilos en conos, según comentaron vecinos.

Pérez Rodríguez detalló que al llegar al sitio, personal del área a su cargo pidió al encargado del inmueble ­actualmente opera como bodega de una sucursal de la tienda Comercial Mexicana contigua a la ex fábrica­, las licencias correspondientes, las que no pudieron acreditar, por lo que "en consecuencia se procedió a la clausura de los trabajos".

Por lo anterior, afirmó que "se impedirá cualquier tipo de obra cuyo permiso no se acredite"; señaló que hasta el momento en la dirección general de Obras de la demarcación, responsable de la autorización respectiva, no ha recibido solicitud alguna al respecto, lo que sustenta la revisión y la posterior clausura.

Recordó que cualquier particular que tenga un inmueble catalogado como patrimonio histórico tiene la obligación de regirse bajo las reglas y normas que se dicten, en este caso por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por lo que ya se turnó la queja vecinal a esa instancia, para que haga lo conducente.

De hecho, abundó, el decreto presidencial en el que se declara patrimonio histórico a la ex factoría se estipula que las construcciones que se hagan en la zona de monumentos históricos se sujetarán a las condiciones legales aplicables, y cualquier obra de construcción, restauración o conservación, debe contar con permiso.

Vicente Díaz, director del área de Jurídico y Gobierno, indicó que personal del INAH acudió al lugar con una representación de la PAOT para supervisar si además de la afectación al inmueble no existen daños en materia ecológica, pero de los resultados de su visita no tienen conocimiento.

Respecto a la situación jurídica del inmueble, Jorge Pérez dijo que de acuerdo con la denuncia vecinal podría existir una situación irregular, pero "por ahora, lo consideramos propiedad privada, sin que no conste, pues no tenemos competencia para intervenir; las indagatorias las realiza el área de reordenamiento territorial", apuntó.

Los integrantes de los colectivos Fuentes Brotantes y Arte Consciente en La Fama manifestaron que su lucha no concluirá con la clausura de los trabajos de demolición; insistirán en que las autoridades capitalinas intervengan para esclarecer la propiedad del inmueble y lo expropien para crear un centro cultural y un museo del obrero y la obrera textil, pues consideran que su actual uso, dada su historia, no es el más adecuado.

 
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