Usted está aquí: jueves 1 de febrero de 2007 Cultura Los primeros 53 días

Margo Glantz

Los primeros 53 días

El gran escritor decimonónico Stendhal escribió su gran novela La cartuja de Parma en 53 días. Georges Perec, otro gran escritor francés, muerto en 1982, dejó inconclusa una novela llamada 53 días, en homenaje a la gran creatividad de su antecesor.

Su novela empieza con estas palabras, pueden remitirnos, por ejemplo, a Oaxaca:

''El ejército y la policía siguen patrullando la ciudad.

''Hace 10 días, para el vigésimo aniversario de la Independencia, los mineros se congregaron ante la Presidencia Vitalicia; hubo ocho muertos, entre ellos una mujer y un niño; se declaró el estado de excepción, con todo su cortejo de vejaciones y malos tratos: detención de los presuntos inductores, prohibición de toda reunión, registro de vehículos, toque de queda desde las seis de la tarde..."

Hagamos cálculos y comparemos: ¿Qué ha hecho Felipe Calderón en sus primeros 53 días de gobierno?

1. Efectuó dos veces el cambio de poderes, una, en la medianoche del 30 de noviembre, relevo transmitido con lujo de detalles por la televisión, aunque los interesados cometieran algunos errores graves de protocolo. Al día siguiente, primero de diciembre, el segundo cambio de poderes, esta vez oficial, sin previo aviso y con una rapidez fantástica, el presidente electo entra por una puerta del estacionamiento del Congreso, intercambia (con la misma precipitación) la banda presidencial con el presidente saliente Fox, y de manera veloz vuelve a salir protegido por tanques y numerosos soldados que mantuvieron en estado de sitio esa zona de la ciudad. En tercer lugar celebra su triunfo en el Auditorio Nacional: sólo hay representantes del 33 por ciento de los votantes.

2. Se publica el presupuesto nacional: la cultura, la salud y otros rubros fundamentales son arbitrariamente recortados.

3. Miguel Angel Granados Chapa comenta alguna de las medidas tomadas por el nuevo gobierno: ''En el frente que se ocupará de la gobernabilidad (aparte de los ministerios militares) el puño cerrado y no la mano tendida es la seña de identidad" (Proceso, 3/12/06).

4. En relación con el conflicto de Oaxaca se lee en el mismo número de Proceso: '''Diálogo' en clave militar". Resultado: Se encarcela a varios dirigentes de la APPO dispuestos a 'dialogar' con el secretario de Gobernación. El gobernador Ulises Ruiz permanece en su puesto: 'Oaxaca, en calma'.

5. La militarización del país se acentúa. Cito de nuevo a Granados Chapa: ''Vestido con uniforme de campaña, el comandante supremo de esas fuerzas, en algunas tomas fotográficas, parecía ordenanza del general Guillermo Galván, secretario de la Defensa Nacional, ataviado con uniforme de calle, ornado por gafetes que dan cuenta de su trayectoria. El contraste invitaba a preguntar quién manda a quién... Felipe Calderón dependerá del Ejército para ejercer el cargo (...)'' (Proceso, 7/ 01/07). Días después, Calderón recibe, a la manera de Amadís, un sable, se le ha ordenado Caballero Andante de la Patria.

6. Efectivamente, la mano dura empieza a ejercerse en contra del narcotráfico, primero en Michoacán; las operaciones militares se extienden luego a otros estados. Semanas más tarde se extradita a miembros de diversos cárteles ya encarcelados en México en reclusorios de alta seguridad. Estados Unidos se congratula de esta decisión.

7. La tortilla ­y como consecuencia, otros productos de primera necesidad­ se pone a flotar (sólo en México ­¿país surrealista?­ la tortilla es capaz de flotar) (¿podrán flotar los huevos?). Los precios se disparan, el salario mínimo permanece en su estado natural, como mínimo alcanza perfectamente para comprar cinco kilos de tortilla. Acatamos sin chistar las órdenes del mercado, condición sine qua non de una sociedad neoliberal. Por su populismo y por su tendencia dictatorial ­su mano dura­ el mandatario hace declaraciones rotundas en contra de algunos países de América del Sur, ya pasados esos primeros 53 días.

Me es imposible enumerar todos los beneficios que este tiempo inicial del gobierno ha traído para México.

Me detengo. Hago un balance comparativo: Quizá se trate de una deformación profesional, pero por amplio margen decido que son mucho más importantes para la humanidad ­y México es parte de ella, supongo­ esos 53 días en que Stendhal estuvo ocupado en escribir una obra maestra, y claro, también, los que Perec dedicó a conmemorarlo, ''ese ingenioso rompecabezas compuesto por una galería de espejos que proyectan la trama en una sucesión de novelas igualmente infinita".

 
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