Usted está aquí: viernes 16 de febrero de 2007 Opinión Ciudad Perdida

Ciudad Perdida

Miguel Angel Velázquez

Omisiones en el caso Las Golondrinas

Visos de fraude en los rellenos millonarios de Zuno Chavira

Socavones que minan futuros políticos

Mal hará el gobierno de Marcelo Ebrard si no acude de inmediato a dar asistencia, y en serio, a los habitantes de la colonia Las Golondrinas, de la que ya le hemos hablado en este espacio.

Mal porque en la misma Secretaría de Gobernación se maneja ya, como un pretexto para ignorar la situación, que el jefe de Gobierno ha hecho caso omiso de la situación de emergencia que se vive en ese lugar de la delegación Alvaro Obregón.

Dicen en Bucareli que no se ve, por ningún lado, el interés del gobierno de la capital en atender el problema, por lo que, según ellos, es más el escándalo que ha hecho el delegado Leonel Luna que el riesgo que en verdad se vive en aquel lugar. Lo cierto es que ni unos ni otros quieren dar la batalla por salvar a la gente de Las Golondrinas.

Ya le comentábamos a usted que el secretario de Gobierno, José Avila, piensa que la solución al problema debe darse mediante un diálogo entre el gobierno delegacional y el federal, es decir, la Secretaría de Gobernación, en lugar del enfrentamiento que hasta ahora ha llevado Leonel Luna con los funcionarios de la dependencia federal.

Lo malo es que, por más que se dialogue, las cuevas que dejó la explotación irracional de las minas de piedra y arena, principalmente, ya no soportan el peso de las casas que se construyeron sobre ellas. La paredes de las oquedades presentan en estos momentos cuarteaduras que muestran su debilidad y anuncian, irremediablemente, una desgracia.

Pero además hay algo que huele mal en este asunto. Todo parece indicar que durante la gestión del panista Luis Eduardo Zuno Chavira al frente de la delegación Alvaro Obregón, se gastaron sumas millonarias en rellenar las cuevas que provocó la extracción de minerales, pero eso pudo haber sido, nada más, otro de los enjuagues sucios del panista que hoy está en prisión.

Según los habitantes, no nada más de Las Golondrinas, sino de otras colonias en situación similar, el relleno de los socavones fue una farsa. Algunos testigos aseguran que el trabajo para evitar que el techo de las galerías de las minas se viniera abajo no se realizó. Si acaso, dicen, se reforzaron los tiros, las entradas, pero no se tocaron las perforaciones profundas.

No sabemos si las autoridades delegacionales que han visitado estos lugares estén enteradas de lo expresado por la gente, pero no estaría nada mal que se empezara a investigar lo que podría conducir a un fraude, cuyos culpables tienen nombre y apellido.

Además, en el asunto de la explotación de las minas, parece que hubo algunos, o muchos, permisos que no cumplieron con todas la exigencias de la ley al concluirse los trabajos, y en otros casos ni siquiera se cumplió con el requisito de obtener el permiso de explotación.

El asunto, entonces, parece tener más aristas de las que muchos esperaban. No será fácil, de ninguna manera, hallar las pruebas que lleven a comprobar los ilícitos. El equipo necesario para determinar el tamaño del daño provocado en el subsuelo lo tiene nada más la UNAM, según se nos dijo, pero el alquiler es tan elevado que se hace impensable para las finanzas de la delegación.

En este asunto hay muchas cosas en juego, pero sobre todo la línea de gobierno en el Distrito Federal. El olvido, la omisión o el engaño serían una losa muy difícil de cargar para quienes tienen, ahora, futuro político. El gobierno federal, como ya sabemos, por cuestiones políticas se negará a ayudar a los pobladores de esa porción de la capital, pero ¿por qué será que desde el Zócalo se quiere ignorar la situación?

¡No que no!

Ahora resulta que desde todas partes se levanta sonora aquella frase que alguna vez escandalizó: ¡Cállate chachalaca!

[email protected] * [email protected]

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.