En lucha, sindicatos y organizaciones campesinas, con el respaldo de legisladores del FAP
Habrá movilizaciones por un salario justo y en defensa de la soberanía alimentaria
Sindicatos afiliados a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), así como organizaciones campesinas, apoyados por senadores del Frente Amplio Progresista (FAP), anunciaron el inicio de una segunda jornada de movilizaciones por un incremento salarial justo, castigo a los especuladores de productos básicos y la renegociación del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)
La jornada comenzará mañana y continuará con diversas acciones y marchas hasta el próximo primero de mayo.
Los líderes sindicales y campesinos se reunieron ayer con el coordinador del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete Ruiz, y otros legisladores, con quienes acordaron además adoptar medidas para evitar que se impulsen iniciativas que continúen con el actual modelo económico, que ha generado desigualdad, concentración de la riqueza e injusticia.
Navarrete precisó al respecto que la reunión con los sindicatos es para acordar la firma de un acuerdo de colaboración entre los legisladores del FAP en las dos cámaras y la UNT, para llevar a cabo acciones conjuntas en defensa de los trabajadores; colocar los temas laborales en el Congreso, y apoyar las movilizaciones que emprendan las organizaciones a escala nacional.
El legislador destacó que están con el sindicalismo que pelea por sus derechos, y no con el cetemista, que sólo aparece en ciertos momentos para replegarse al poder y hasta afirma que no reclama un incremento salarial de emergencia para las bases obreras.
La primera movilización empezará mañana, cuando organizaciones campesinas y sindicatos que firmaron la llamada Declaración del Zócalo se manifiesten en las oficinas centrales y estatales de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso); serán respaldados por la UNT y diversas organizaciones sociales.
Francisco Hernández Juárez, líder de la presidencia colegiada de la UNT, planteó que es totalmente desequilibrado que mientras a los trabajadores del país se les quiere imponer un tope de incremento salarial de 3.9 por ciento, a los miembros del Ejército Mexicano se les dio 46 por ciento, para "mantenerlos contentos", ya que ellos son precisamente los que "van a tener que contener el descontento de los trabajadores que no ven mejorar sus condiciones de vida".
Agustín Rodríguez, líder del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, señaló que por el momento no se está pensando en un paro nacional, pero sí en una nueva jornada de lucha salarial y por el respeto y la defensa de la soberanía alimentaria.
A su vez, dirigentes de organizaciones campesinas que participan en el diálogo con el gobierno federal, apuntaron que hay profundas diferencias entre ambas partes, ya que sigue estancada la propuesta de establecer una política de fomento productivo incluyente y que dé prioridad a los campesinos pobres. Sin embargo, acordaron continuar los encuentros con los secretarios del Trabajo, Economía y Agricultura, además de realizar movilizaciones de protesta.
La exigencia es sostener una interlocución sincera, seria y sin verdades a medias, indicó Rafael Galindo, dirigente de la Central Campesina Independiente, quien no descartó una ruptura si continúa "el trato autoritario y excluyente".