Usted está aquí: jueves 5 de abril de 2007 Estados Gana amparo inmobiliaria que construyó casas sin agua potable

Obligan a las autoridades de Izcalli a retirar sellos

Gana amparo inmobiliaria que construyó casas sin agua potable

SILVIA CHAVEZ GONZALEZ CORRESPONSAL

Cuautitlán Izcalli, Mex., 4 de abril. Inversionistas del desarrollo habitacional Cañadas del Lago de Guadalupe, clausurado por el gobierno municipal hace tres meses porque no se garantizaba el suministro de agua potable, ganaron un amparo federal, que ordenó el retiro de sellos de suspensión de las obras. Otros empresarios adelantaron que tramitarán amparos similares.

Galo Blanco Mateos, empresario afectado, integrante de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios y socio del proyecto Cañadas del Lago de Guadalupe, explicó en entrevista que, en respuesta a un amparo interpuesto ante el Poder Judicial de la Federación, el juez del caso sentenció la semana pasada al ayuntamiento local a retirar de sellos de clausura de 32 lotes en desarrollo.

El promotor dijo que, ante el juzgado federal en materia de amparos, argumentó que el conjunto habitacional Cañadas de Lago de Guadalupe tiene agua suficiente y cumple con normas ambientales, como aprovechamiento de aguas de lluvia, plantas recicladoras y mecanismos de recarga de mantos freáticos.

El presidente municipal, David Ulises Guzmán Palma, emplazó en enero a propietarios de 42 proyectos habitacionales a garantizar el servicio de agua en sus desarrollos y ordenó la suspensión de obras en aquellos que no cumplieran con dicha norma, acordada por el cabildo.

Galo Blanco dijo que la clausura de Cañadas del Lago provocó pérdidas mayores a ocho millones de pesos, por el pago de amonestaciones debido a incumplimiento de plazos del proyecto y salarios caídos de trabajadores. Además, 30 familias que ya habitan en las viviendas exigen escrituración.

Reynaldo Cervantes, vicepresidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y presidente de la Asociación de Industriales de Naucalpan, quien en febrero dijo haber sufrido la clausura de un proyecto habitacional en Cuautitlán Izcalli, cuya razón social se negó a mencionar, exigió al alcalde Guzmán Palma ''recapacitar''.

En Izcalli, agregó, ''se tasa a todos los desarrolladores por igual''. Asimismo, aseguró que la obra que él promueve cumple normas ambientales y que ha sufrido ''enormes'' pérdidas por el pago de intereses de créditos bancarios.

El conjunto habitacional La Floresta, (794 viviendas en un predio de 48 hectáreas cercano al Lago de Guadalupe) fue clausurado por no cumplir con los estudios de impacto ambiental. La Dirección de Desarrollo Urbano ha detenido más de seis proyectos habitacionales, en los cuales se preveía edificar más de 2 mil casas

 
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