Falso debate, privatizar o no Pemex y CFE: Cárdenas
Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), afirmó que no es necesaria una reforma constitucional para garantizar una política energética que permita el rescate de la industria petrolera nacional, y aseguró que es ''indispensable y urgente'' un cambio radical en la política petrolera del país, pues se ha caído en un ''falso debate'' sobre si se debe o no privatizar Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Al participar en un ciclo de conferencias sobre energéticos y seguridad nacional, convocado por la Organización Nacional Politécnica, el perredista presentó diez propuestas para devolver a la industria petrolera nacional su carácter de motor del proceso de industrialización y crecimiento económico del país, ante la necesidad de definir ''cómo y dónde se abre el acceso a la actividad privada y dónde no''.
Esto, insistió, en función de determinar qué actividades para aprovechar los recursos naturales y la prestación de servicios que requieren amplios sectores de la población y la economía ''deben considerarse como estratégicos y ser manejados como tales''.
En su propuesta señala la necesidad de desarrollar un sistema de planeación energética que dote al Estado mexicano de una política industrial moderna, que priorice la exploración y acrecentamiento de nuevas reservas probadas de petróleo, la transformación industrial de los hidrocarburos en territorio nacional, la seguridad energética y el fortalecimiento de un amplio sector de empresas de proveeduría, ingeniería y servicios relacionados, que fortalezcan el crecimiento nacional de los proyectos petroleros e industriales.
Liberar a Pemex de Hacienda
También propone abrir un sistema de planeación a la participación, no sólo de instituciones gubernamentales y legislativas, sino también de las ''empresas que contribuyen en el esfuerzo productivo y en el consumo intermedio y final de los insumos de las empresas públicas de energía'', así como constituir una Comisión Nacional de Energía, instancia de concertación para definir metas y políticas industriales de largo aliento.
Se requiere, indicó, una reforma institucional, que no implica alterar el orden constitucional, pero que libere de trabas a Pemex, y lo sustraiga de la ''confiscación presupuestal'' que realiza Hacienda.