Usted está aquí: miércoles 16 de mayo de 2007 Mundo Policía colombiana espió por 2 años al Ejecutivo, opositores y periodistas

Director y jefe de inteligencia son retirados del cargo

Policía colombiana espió por 2 años al Ejecutivo, opositores y periodistas

DPA, AFP, REUTERS

Ampliar la imagen Salvatore Mancuso, ex líder paramilitar, ayer durante una comparecencia ante una corte en Medellín, Colombia Salvatore Mancuso, ex líder paramilitar, ayer durante una comparecencia ante una corte en Medellín, Colombia Foto: Ap

Santafe de Bogotá, 15 de mayo. El director de la policía colombiana, Jorge Daniel Castro, y del jefe de la central de inteligencia de ese organismo, Guillermo Chávez, fueron pasados a retiro tras revelarse que la institución espiaba desde hace dos años al Ejecutivo, oposición y periodistas.

"Infortunadamente, se pudo comprobar que quien realizó las grabaciones y la filtración fue personal de la Dirección de Inteligencia de la Policía (Dipol)", dijo el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos. Ante la gravedad de esta situación, añadió, ambos mandos pidieron su retiro y se les aceptó.

Santos negó que el gobierno tuviera conocimiento del contenido de estas grabaciones y señaló que desconocía quién ordenó tal espionaje. Pero el líder y ex candidato presidencial del opositor Polo Democrático Alternativo, Carlos Gaviria, calificó esta acción de "muy grave" y exigió que el presidente Alvaro Uribe asuma su responsabilidad política ante lo ocurrido.

El nuevo escándalo de espionaje político agrava la situación del gobierno porque se suma a otras grabaciones que desde el domingo dio a conocer la revista Semana sobre presuntas conversaciones entre desmovilizados jefes de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y varios de sus hombres presos en Itagüí, lo que desató la molestia del Ejecutivo.

En las conversaciones, los ex jefes paramilitares presos en una cárcel de alta seguridad supuestamente coordinaban acciones ilegales que incluyen narcotráfico e incluso asesinatos. Al respecto, el ministro Santos dijo que si se comprueba que los paramilitares estaban delinquiendo perderán los beneficios que les otorga una ley promovida por el Ejecutivo a cambio de su desmovilización.

Por lo pronto, se ordenó una "investigación interna para dar con los responsables de estos hechos", y el gobierno nombró como nuevo director de la Policía al general Oscar Naranjo, quien se desempeñaba como comandante de la Policía Judicial. El nuevo director tendrá, entre sus funciones, concretar esa investigación sobre el espionaje político y en relación al asunto de los paramilitares.

Según la prensa local, para el nombramiento de Naranjo se tuvo que pedir la renuncia de 11 generales de la policía con más antigüedad.

Uno de los más destacados líderes de las AUC, Salvatore Mancuso, declaró ante un fiscal haber sido parte del paramilitarismo de Estado que combatía a las guerrillas, y citó entre los apoyos a los ex generales Rito Alejo del Río y Martín Orlando Carreño, quienes dieron entrenamiento a sus fuerzas, además de citar al senador Miguel de la Espriella como "uno de los nuestros".

A su vez, la prensa reveló que cuatro de los 20 políticos capturados el lunes por suscribir en 2001 un pacto de colaboración con los paramilitares son familiares de la ministra de Comunicaciones, María del Rosario Guerra: el citado senador De la Espriella, Víctor Antonio Guerra, Rodrigo Burgos de la Espriella y Jorge Feris.

En otro orden, el gobierno llamó a los colombianos a opinar sobre los mecanismos jurídicos para efectuar una masiva excarcelación de guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con miras a lograr la liberación de un grupo de 58 secuestrados por ese grupo, que ha propuesto intercambiarlos por unos 500 insurgentes presos.

 
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